INTRODUCCIÓN
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la salud mental es un estado de bienestar en el individuo que tiene la capacidad de afrontar las tensiones presentes en su vida y entorno, así como percebe su existencia en relación con sus objetivos, expectativas y normas que aporten a una estabilidad física, emocional y calidad de vida.(1)
La evidencia científica señala que las condiciones de trabajo de los conductores profesionales (prolongadas jornadas de trabajo, horarios rotativo, inadecuado descanso, entre otras) incrementan riesgo a desencadenar problemas de sueño y alimentación, fatiga física, ansiedad, depresión, estrés y consumo de sustancias; lo que afecta su salud mental y el servicio que presta a los usuarios.(2,3) En este contexto, la intervención psicológica puede aportar al logro de autoeficacia y estrategias de afrontamiento, evitando el deterioro del desempeño social o laboral.(4,5,6,7)
Algunos alimentos se han relacionado con la salud psicológica: los nutrientes compuestos por ácidos grasos polinsaturados, proteínas y ciertos micronutrientes con síntomas de depresión; aquellos bajos en ácidos grasos ω-3 y algunos minerales (manganeso, cobre o zinc) con altos grados de ansiedad y la ingesta de comidas ricas en selenio, vitamina C o calcio con la calidad del sueño.(8)
En la sociedad contemporánea, los individuos sienten más la presencia de rasgos depresivos y conductas suicidas debido a estilos de vida de alta demanda, baja autoestima y otros elementos de naturaleza neurobiológica. Las personas que reciben apoyo social tienden a verse menos afectados por síntomas de ansiedad, insomnio y depresión grave.(9,10,11,12)
El objetivo de la presente investigación fue correlacionar los problemas crónicos y los de nueva aparición en el estado de salud mental en taxistas afiliados a la Unión Provincial de Operadoras de Transporte en Taxis de Chimborazo con variables sociodemográficas de interés.
MATERIAL Y MÉTODOS
Se realizó un estudio no experimental, correlacional transversal en la provincia de Chimborazo, Ecuador, durante el año 2020. La población estuvo constituida por 1960 taxistas pertenecientes a la Unión Provincial de Operadoras de Transporte en Taxis de Chimborazo (UOTTCH). La muestra de 301 participantes sin ninguna condición que los ubique en grupos vulnerables, se estableció mediante un procedimiento no probabilístico del tipo sujetos voluntarios.
Los datos se recopilaron mediante la aplicación del cuestionario de salud general de Goldberg (GHQ28)(10) que consta de 28 ítems divididos en 4 subescalas: A (síntomas somáticos), B (ansiedad e insomnio), C (disfunción social) y D (depresión grave). Este permite detectar problemas de nueva aparición (GHQ) y problemas crónicos (CGHQ).
La interpretación del puntaje del instrumento se realizó de la manera siguiente:
· GHQ, 0 - 5 puntos (no caso) y mayor o igual a 6 puntos (caso).
· CGHQ, 0 – 12 puntos (no caso) y mayor o igual a 13 puntos (caso).
El procesamiento se realizó mediante frecuencias absolutas y porcentajes (para la descripción) y la prueba exacta de Fisher (para medir asociación); mientras que el estado de la relación entre la edad y el puntaje GHQ y CGHQ a través de la prueba de correlación de Spearman y la comparación de los puntajes entre ambos sexos se hizo utilizando la prueba no paramétrica U de Mann-Whitney.
El estudio contó con la autorización de la directiva de la UOTTCH y los miembros participantes firmaron el respectivo consentimiento informado. Los datos se presentaron respetando el anonimato de los participantes y los resultados solo se emplearon con fines investigativos.
RESULTADOS
La media de la edad en los encuestados fue de 42,6 años, predominando el sexo masculino (89,7%), los originarios de la región sierra (96,0%), los residencia en la ciudad de Riobamba (85,4%), los que convivían en una familia nuclear (81,7%), la etnia mestiza (96,0%), el nivel escolar de bachillerato (50,8%), el estado civil de casado o unión libre (70,1%), la práctica de la religión católica (83,7%) y la tenencia de hijos (90,4%) (tabla 1).
Los puntajes establecidos permitieron determinar que en lo relativo a GHQ: 21 personas se clasificaron como caso (7,0%) y 280 no casos (93,0%); mientras que para CGHQ: 119 fueron caso (39,5%) y 182 no caso (60,5%).
Entre los clasificados como caso, el 95,2% procedían de la región Sierra, siendo el 90,5% de la ciudad de Riobamba. El 71,4% convivía en una familia nuclear (n=15), el 95,2% se declaró mestizo, el 57,1% tenía un nivel escolar de bachillerato, el 85,0% tenía estatus de casados o de unión libre, el 71,0% manifestó ser católico y el 95,2% tenía de hijos. Ninguna de las variables sociodemográficas se asoció con la clasificación según GHQ (p>0,05) (tabla 2).
Nota. .un no caso menos.
El puntaje global del estado de salud mental no se correlacionó con respecto a la edad y al número de hijos, según la prueba Rho de Spearman (p>0,05). En el grupo caso un solo encuestado presentó síntomas somáticos y 10 tuvieron ansiedad e insomnio.
En el grupo caso de la escala CGHQ se halló que el 95,0% procedía de la región Sierra, 85,7% residía en Riobamba, el 80,7% vivía en una familia nuclear, el 95,8% se autoidentificó en la etnia mestiza, el 53,8% tenía nivel de escolaridad de bachiller y el 79,0% tenía estatus de casados o de unión libre. El puntaje en este grupo resultó independiente con respecto a las variables sociodemográficas analizadas (p>0,05) (tabla 3).

Tabla 3 Asociación entre las características generales de los encuestados y ser CasoNo caso según puntuación general del CGHQ
Nota. .Un caso menos.
El coeficiente de correlación de Spearman (Rho=0,152; p=0,008) entre edad y puntuación global del CGHQ indicó la existencia de relación estadísticamente significativa, directamente proporcional y de escasa intensidad entre ambas variables.
El procesamiento de las cuatro subescalas arrojó la existencia entre los clasificados como caso de 8 con síntomas somáticos, 13 con ansiedad e insomnio y 7 con depresión.
Los resultados de la prueba Mann-Whitney indicaron la presencia de diferencias significativas (U=3386,000; p=0,034) entre ambos géneros con respecto al puntaje GHQ; mientras que, los puntajes CGHQ reflejaron similitud entre hombres y mujeres (U=3697,500; p=0,287).
Gráfico 1.Comparación de los puntajes globales en los grupos GHQ y CGHQ atendiendo al sexo
Nota: *Significación de la prueba U de Mann-Whitney al nivel de p< 0,05; GHQ: media de la puntuación de problemas de nueva aparición; CGHQ: media de la puntuación de problemas crónicos.
DISCUSIÓN
Numerosos investigadores(13,14,15,16,17,18,19,20,21,22,23,24) se han dado a la tarea de caracterizar el estado de salud general en sujetos de la región latinoamericana a partir de las variables: síntomas somáticos, ansiedad e insomnio, disfunción social y depresión grave, observando que determinadas actividades humanas pueden afectar la salud mental.
En una muestra de 501 trabajadores con edades comprendidas entre los 40 y los 65 años, Orejudo y Froján(25) investigaron el poder predictivo de ciertas variables psicológicas (dimensiones de personalidad, tipos de reacción a estrés de Grossarth-Maticek y Eysenck, estilos de afrontamiento, eventos vitales, estilo atributivo, posiciones culturales ante la salud, apoyo social y competencia personal), socio-demográficas, de estilos de vida y de problemas de salud. En las regresiones realizadas acerca de las distintas escalas de síntomas los autores hallaron una media de un 25,9% de varianza explicada. De esta, el 16,8% correspondió a variables psicológicas, sobre todo a neuroticismo e indicadores conectados con el estrés, el 2,8% a estilos de vida y variables sociodemográficas y el 6,2% a problemas de salud. El rol de los tipos según la clasificación de Grossarth-Maticek y Eysenck fue muy limitado.
En tanto, Ferre y Vilches(26) destacan que el sueño resulta un requerimiento para la salud física y mental. Sus funciones homeostática y restauradora son centrales para la termorregulación y conservación de la energía. También, el insomnio deviene en un síndrome identificado por una cantidad o calidad de sueño insatisfactorio, que provoca disfunción diurna y altera la calidad de vida de manera duradera, siendo más frecuente en mujeres, ancianos y sujetos con enfermedad médica o psiquiátrica. Un 10% de los que padecieron este problema no requerían de un tratamiento farmacológico.(27)
CONCLUSIONES
No existió evidencia suficiente para afirmar que la procedencia, la residencia, la convivencia, la etnia, el nivel educacional, el estado civil, la religión y la tenencia de hijos se asocian con la tenencia de problemas de nueva aparición, ni con la existencia de problemas crónicos.
Se correlacionó de forma positiva y estadísticamente significativa la edad y la puntuación global del estado de salud mental general, además; la tenencia de problemas de nueva aparición es mayor en mujeres que en hombres; mientras que la tenencia de problemas crónicos es similar en ambos sexos.
Conflictos de intereses: los autores de la presente investigación declaran no tenerlos.
Declaración de contribución:
Cristina Alessandra Procel Niama buscó información e hizo análisis y discusión de los resultados.
Lilian Verónica Granizo Lara redactó el artículo científico y realizó la discusión de los resultados.
Diego Armando Santos Pazos aportó con la búsqueda bibliográfica e interpretación de los datos.