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Revista Científica UISRAEL

versión On-line ISSN 2631-2786

RCUISRAEL vol.4 no.1 Quito ene./abr. 2017  Epub 09-Abr-2017

https://doi.org/10.35290/rcui.v4n1.2017.47 

Articles

El uso del ajedrez como estrategia pedagógica desde la educación intercultural en la Universidad Experimental de Caracas (Unexca- Sede Altagracia)

The use of chess as a pedagogical strategy from intercultural education in the experimental university of caracas (Unexca - calm Altagracia)

Yulitza Josefina García Pitre1 

1Universidad Nacional Experimental de la Gran Caracas. (UNEXCA). Caracas, Venezuela, yulitzagarcia@gmail.com


Resumen

En las sociedades actuales la interculturalidad es un rasgo predominante, por ello uno de los aspectos que centra especial interés radica en la búsqueda de espacios comunes para el encuentro, el dialogo de saberes y lugares para el intercambio cotidiano entre los habitantes, así como su manifestación en los distintos sectores que constituyen la vida en sociedad. Desde el punto de vista formativo, la educación intercultural juega un rol de especial importancia para la puesta en práctica de diversas propuestas centradas a desarrollar alternativas para la consolidación de la integración educativa res- petando las distintas culturas de origen.

Una de estas estrategias desde lo pedagógico es la propuesta del uso del ajedrez como vía de interacción para el entendimiento social considerando aportes como: la riqueza cultural, la creatividad y múltiples oportunidades para el diálogo intercultural, para ello se selecciona el sector universitario pues se considera que en este sector se realizan en los actuales momentos una serie de transformaciones. El Colegio Universitario Francisco de Miranda recientemente fue transformado en la Universidad Experimental de Caracas (UNEXCA- Sede Altagracia), por ello este estudio resulta pertinente dentro del marco de las transformaciones internas e institucionales.

Palabras clave: Ajedrez; estrategia pedagógica; interculturalidad; educación intercultural.

Abstract

In the current societies the interculturality is a predominant shot, thus, one of the appearances that centers special interest roots in the researches of common spaces for the meeting, the have a con- versation of knowledges and places for the daily exchange between the inhabitants, as well as his demonstration in the distinct sectors that constitute the life in society, From the educational point of view the intercultural education plays a role of particular importance for the put in practice of diverse proposals centered to develop alternatives for the consolidation of the educational integration respecting the distinct cultures of origin.

One of these strategies from the pedagogical is the proposal of the use of the chess like road of interaction for the social understanding considering contributions such as: the cultural wealth, the creativity and multiple opportunities for have a conversation intercultural, for this selects the university sector considering that in this sector make in the current moments a series of transformations, The University School Francisco of Miranda recently was transformed in the Experimental University of Caracas(UNEXCA- Calm Altagracia), thus in the frame of the transformations that give to the internal of this institution this study results of relevance.

Keywords: Chess; pedagogic strategy; interculturality; intercultural education.

“El Ajedrez es un juego por su forma, un arte por su contenido y una ciencia por su dificultad. Pero si usted aprende a jugar bien, sentirá entonces una gran alegría”.

T. Petrosian, ex-Campeón Mundial

Introducción

Muchos son los beneficios que a lo largo de la historia se le atribuyen al ajedrez, así encontramos que en tiempos inmemoriales fue utilizado como juego para la práctica bélica. En otras ocasiones, como deporte de alta competición por el nivel de concentración, práctica y estudio que requiere, además de planificación y conocimiento. Sin embargo, es en sus potencialidades en el ámbito educativo en que se fundamenta el presente artículo, como espacio para definir estrategias pedagógicas, bien sea para desarrollar la paciencia, la inteligencia y la disciplina, así como para uso de códigos y un lenguaje en común que permita la interacción entre distintas culturas de origen a través de su práctica, el entendimiento y el encuentro de espacios comunes.

Con respecto a la interculturalidad es considerada una de las características predominantes en las socie- dades contemporáneas, entendida como la interrelación cotidiana entre personas de diversas culturas, en ocasiones surgen elementos implícitos dentro de la convivencia que requieren de la búsqueda de espacios comunes como lo constituyen; la necesidad de llegar acuerdos, el conocer al otro, el respeto e incluso un lenguaje común para hallar puntos de encuentro.

Para Rehaag (2007) “la interculturalidad se manifiesta en un movimiento que traspasa fronteras, nunca se queda quieta, esquiva al control porque todo el tiempo está cambiando de perspectiva” (p.17). Por otra parte, desde el ámbito educativo debe ser asumida como un valor en la educación superior.

Este rasgo le impone a la educación superior el gran desafío de contribuir a diseñar proyectos que permitan el desarrollo humano, que sean sustentables y que consideren el incremento progresivo de la pluralidad cultural en todas sus dimensiones. Es por ello, que la demanda de educar en el conocimiento, comprensión y respeto de las diversas culturas de la sociedad en la que vive el hombre, se hace indispensable dentro del rol docente, por lo cual, la interculturalidad constituye un principio educativo general de la formación de todos ciudadanos en la actualidad. Por lo cual se plantean las siguientes interrogantes:

  • ¿Qué referentes teóricos metodológicos sustentan la estrategia pedagógica para el uso del ajedrez desde la educación intercultural dentro de la Universidad Experimental de Caracas (UNEXCA- Sede Altagracia)?

  • ¿Cuál es la situación actual que presenta el ajedrez y la educación intercultural dentro de la Universidad Experimental de Caracas (UNEXCA- Sede Altagracia)?

  • ¿Cuáles componentes deben integrar la estrategia pedagógica para el uso del ajedrez desde la educación intercultural dentro de la Universidad Experimental de Caracas (UNEXCA Sede Altagracia)?

La investigación se centra en destacar la importancia del uso del ajedrez como una estrategia pedagógica que favorezca la educación intercultural dentro de la educación superior, para ello se tienen los siguientes objetivos:

Proponer una estrategia pedagógica para el uso del ajedrez desde la educación intercultural dentro de la Universidad Experimental de Caracas (UNEXCA- Sede Altagracia).

Establecer los referentes teóricos metodológicos que sustentan la estrategia pedagógica para el uso del ajedrez desde la educación intercultural dentro de la educación superior. Además de caracterizar la situación actual que presenta el ajedrez y la educación intercultural dentro de la Universidad Experimental de Caracas (UNEXCA- Sede Altagracia).

Asimismo, determinar los componentes que deben integrar la estrategia pedagógica para el uso del ajedrez desde la educación intercultural dentro de la Universidad Experimental de Caracas (UNEXCA- Sede Altagracia).

Para el logro de los objetivos anteriormente señalados se estructura la presente investigación en una primera fase destinada a la revisión de las distintas teorías que permitirán el estudio y comprensión des- de una perspectiva pedagógica. Así como una segunda fase que comprende el establecimiento de los parámetros metodológicos necesarios que permitirán realizar el diagnóstico y posterior caracterización del estado actual tanto del uso del ajedrez como la interculturalidad en la educación superior.

Esta información permitirá plantear la tercera fase integrada por las acciones específicas para el di- seño de una estrategia pedagógica en el uso del ajedrez desde la educación intercultural dentro de la educación superior. Información imprescindible para establecer los componentes que deberán con- formar la estrategia pedagógica propuesta.

Para el momento de la elaboración de este artículo esta investigación se encuentra en la fase de recolección de la información por lo cual se presentan avances en el desarrollo de la misma.

La globalización como escenario Intercultural

Al referirnos a la globalización se debe tomar en cuenta una serie de factores que intervienen en este fenómeno, según Giusti (s/f) es un proceso principalmente económico que ha ido imprimiendo relaciones sistémicas en todo el mundo, a la par de restarle atribuciones políticas a los estados a nivel nacional, por lo cual, resulta cada vez más complejo la participación democrática e igualitaria en las decisiones políticas, económicas y sociales.

Al respecto Pasek (2004) señala que la globalización tiene como principal característica la inmediatez en la información, así como la interdependencia política y económica, la transculturización y homogenización cultural, las desigualdades y asimetrías, el mercado global competitivo, las situaciones bélicas y los conflictos sociales, la competencia individual como incentivo y la hegemonía de los grandes grupos económicos a nivel mundial.

El fenómeno de la globalización debe ser analizado desde una multiplicidad de factores que inciden en su abordaje y consideración; conlleva a una visión diferente de nuestras sociedades, tales como: migraciones, desplazados, vinculación con personas de distintos lugares, costumbres, modos de vida, culturas, tradiciones, entre otros.

Así coincidimos con lo señalado por González (2005) cuando refiere: frente a la tendencia neoliberal de la globalización, se exige trabajar en aras de una globalización entendida como comunicación, intercambio, salirse de la exclusividad de las regiones y países para abrirse a la comunidad internacional mediante la cual se produzcan relaciones interfecundantes como un fenómeno positivo y expresivo de las posibilidades del hombre para establecer relaciones colaborativas que lo conduzcan a su crecimiento humano.

Es decir, una globalización entendida como respeto a la pluralidad cultural y reconocimiento a la identidad de las verdaderas condiciones de existencia de los pueblos sobre la base del interculturalismo, al decir de Bello (2004), de un proceso activo de comunicación e interacción entre culturas para su mutuo enriquecimiento. Debido a que la interculturalidad constituye un principio educativo general de la formación de todo ciudadano en las sociedades contemporáneas.

Al respecto la UNESCO (2003) señala:

“La era de la globalización impone desafíos comunes a la biodiversidad y a la diversidad cultural, así como a la relación especial entre ellas. La creciente autonomía de los procesos mercantiles (en combinación con las tecnologías de gran impacto) representa riesgos imprevistos para la biodiversidad y la seguridad del medio ambiente. Al mismo tiempo, la globalización en sus aspectos culturales más sometidos a las leyes del mercado amenaza con erosionar y menoscabar las formas culturales locales e históricamente más vulnerables, tanto dentro de cada sociedad como entre ellas” (p. 15).

Por consiguiente, al referirnos a la interculturalidad haremos referencia a una relación dinámica y para nada contemplativa donde por medio de los valores, derechos humanos, conocimiento y reflexión se sientan las bases para la construcción de sociedades tolerantes y que promuevan la integración.

La interculturalidad reto educativo en las sociedades actuales

La interculturalidad como expresión de la interacción entre sujetos de culturas de origen diversas deviene en objeto de la educación en valores, constituyendo una alternativa para el tránsito hacia una sociedad inclusiva y promotora de la integración y la equidad a través del diálogo en las relaciones interpersonales.

La interculturalidad debe ser desarrollada en todos los aspectos de la sociedad. Específicamente dentro del ámbito educativo, debe tomar en cuenta la educación en valores. Acota Escarbajal (2011) con respecto a la interculturalidad se debe reconocer y aceptar el pluralismo cultural, además de contribuir a la sociedad basada en la igualdad de derechos. Es importante instruir dentro de las líneas educativas considerando la complejidad de las relaciones tanto en la escuela como a nivel de la sociedad.

Por los cual se deben garantizar las condiciones que permitan la posibilidad de acciones destinadas a viabilizar los temas transversales, es preciso que estas actividades sean sistemáticas y respaldadas por un plan de trabajo diseñado para este fin.

Al respecto Sales y García (1997) destaca que la interculturalidad desde el ámbito educativo “propicia el enriquecimiento cultural de los ciudadanos, partiendo del reconocimiento y respeto a la diversidad, a través del intercambio y el dialogo, en la participación activa y critica para el desarrollo social” (p. 46).

La educación en valores: eje fundamental en la educación intercultural

La educación es una práctica social vinculada al contexto histórico y cultural en el que se inscriben en la actualidad las sociedades, donde es imperativo estimular la educación global que desarrolle en los estudiantes la capacidad para comprender y resolver situaciones desde una perspectiva multifactorial.

Las políticas educativas como vía para la práctica pedagógica buscan fomentar el pensamiento de igual- dad entre las culturas, así como los derechos y oportunidades para el acceso a la educación, por lo tan- to, se deben establecer estrategias que posibiliten el acceso en igualdad de condiciones para todos los ciudadanos. Destaca Escarbajal (2001) la educación, como proclamó la UNESCO (2003) debe educar para vivir en común, teniendo en cuenta, naturalmente, la complejidad de las relaciones entre la propia educación y la sociedad y entre todas las dimensiones de la reflexión y la acción educativa.

La educación debe reconocer la pluralidad en las sociedades contemporáneas y desde esta óptica crear y permitir estrategias que favorezcan la participación y reconocimiento de la diversidad como rasgo característico e imprescindible dentro de los retos educativos a fin de facilitar las relaciones interculturales y la comprensión del mundo.

La educación en valores debe ser considerada no solo desde el contenido y objetivo de las asignaturas, unidades curriculares y malla curricular como eje transversal, sino también desde la práctica educativa. Al ser incorporada de una manera integral permitirá el desarrollo de actitudes y conductas que propicien el trabajo en equipo.

Es por ello que la educación en valores, es intencional, multifactorial e integrado en la formación educativa formal y no formal, a través de la cotidianidad y del proceso pedagógico se garantiza la formación y desarrollo de la personalidad consciente, se concreta en toda la vida universitaria organizándose mediante el proyecto educativo.

Los valores no son absolutos, se crean, transforman o desaparecen según el hombre interacciona con la sociedad, está en constante revisión, desde y para la misma sociedad. Estos valores no solo deben ser promovidos desde la escuela, sino que deben institucionalizarse, valores que fomenten la validación del otro, el tratamiento de las distintas culturas, el respeto y el reconocimiento, el dialogo de saberes y la comunicación entre distintas culturas como un espacio para el aprendizaje y el conocimiento, conservando siempre la identidad y dignidad particular.

Para Banks (1986, citado por Muñoz Sedano, 2001) la educación intercultural hace énfasis en la necesaria aportación de la escuela a la construcción social implicando a sus estudiantes en el análisis crítico de la realidad social y proyectos desde la escuela que permitan la lucha contra las desigualdades sociales.

A este planteamiento acota Escarbajal (2001) la educación intercultural constituye una excelente alternativa para aceptar y considerar la complejidad humana y por ende de su cultura. Teniendo así, que el currículo debe dar la posibilidad de enseñar habilidades para la contribución del conocimiento, así encontramos: el multiculturalismo verde, proyecto educativo global, educar para la ciudadanía en la sociedad multicultural, entre otros.

Siguiendo lo planteado por la Cruz Roja (2013) la diversidad cultural puede aportar una serie de elementos positivos como la capacidad de adaptación, la creatividad, el espíritu innovador, el compromiso, el dinamismo, la responsabilidad, el conocimiento y las experiencias.

Bajo esta propuesta la escuela debe propiciar vivir en una sociedad donde la diversidad cultural se reconoce desde su aspecto positivo y sirve de punto de partida para un aprendizaje inclusivo, una construcción conjunta, donde las diferencias culturales se consideran una riqueza común, siendo válida para toda la población y no solo para grupos focalizados. Entre los períodos que deben incorporarse en una educación intercultural están: reconocer y aceptar el pluralismo cultural como realidad social, contribuir a la instauración de una socie- dad de igualdad de derechos y de equidad y contribuir al establecimiento de relaciones interétnicas armónicas.

En este sentido, uno de los retos que enfrenta la pedagogía actual es la educación intercultural, como tema referente en la educación en valores dentro de las instituciones educativas y una de las líneas de las políticas educativas de cualquier país en los diferentes niveles de educación.

Considerando lo planteado por Muñoz Sedano (2001) la educación intercultural designa la formación sistemática de todo aprendiz, en la compresión de diversidad cultural en el aumento de la capacidad de comunicación entre personas de distintas culturas, lo cual fomenta las actitudes favorables hacia la interacción. Bajo esta perspectiva la educación intercultural podría ser no solo una opción para la atención de las minorías, los inmigrantes, y pasar a ser considerada como una dimensión relevante para la educación integral y esencial de los ciudadanos, los grupos y las comunidades. Es decir, un sistema educativo que se corresponda con las exigencias y retos actuales que se le confiere a la educación en cuanto a la diversidad cultural, un sistema educativo que responda a exigencias tales como: La integración social, las necesidades de las distintas culturas, el respeto en igualdad de condiciones para todos los que conforman la sociedad, así como considerar las temáticas dentro del ámbito escolar clasificadas como temas transversales.

En palabras de González Lucini (2000) los temas transversales son fundamentales para tratar los valores debido a que responden a problemas propios del ámbito social y requieren de respuestas y tratamientos desde el plano educativo, de allí la importancia de los mismos para el desarrollo integral de la personalidad y de su conexión con el entorno.

El rol de las instituciones educativas ante los temas transversales consiste en contribuir y fomentar ámbitos prioritarios de preocupación social. Entre los ámbitos determinados como situaciones que la sociedad observa desde la perspectiva de temas transversales tenemos la educación en valores, educación para la paz, educación ambiental, educación para la salud, educación para la igualdad de oportunidades de ambos sexos, la educación intercultural, entre otros. En este contexto se deben incorporar dentro del proceso educativo mecanismos que faciliten la interacción de las personas de diferentes culturas y permitan mantener su identidad a fin de garantizar el desarrollo pleno individual y colectivo. Partiendo de las necesidades presentes en las sociedades actuales.

La educación intercultural debe sobrepasar la concepción de una educación para las distintas culturas, debe considerarse bajo una visión de integración, como componente necesario para alcanzar las demandas actuales en las sociedades contemporáneas que permitan la interacción y entendimiento colectivo bajo los principios de identidad y respeto individual. Dentro de las estrategias que se deben tener presente en toda educación intercultural están:

  • Respetar y aceptar las diversas culturas de origen que componen la actual sociedad, las personas concretas y pueblos que las representan.

  • Reconocer y respetar los modos de vida, costumbres, historia y tradiciones de las distintas culturas.

  • Establecer o estar dispuesto a establecer relaciones pacíficas, comprensivas y solidarias con personas de cualquier cultura de origen.

  • Rechazar y combatir prejuicios y manifestaciones relacionados con la discriminación racial.

  • Promover el entendimiento, la tolerancia y la amistad entre personas de culturas de origen diversas.

  • Comunicar características personales y elementos de sus culturas de origen, integrando las significaciones propias de los contextos sociales interculturales a su identidad.

  • Solución pacífica y desarrolladora de conflictos interculturales.

  • Uso de la mediación intercultural como vía para la conciliación y resolución de conflictos interculturales.

Es por ello que la diversidad de la cultura se convierte en una manera de abordar el mejoramiento de la vida en común, fundamentado en la aceptación de una visión plural del mundo.

En el año 2003, la UNESCO conceptualizó la diversidad cultural como patrimonio común de la humanidad, mediante la cual la cultura adquiere formas a través del tiempo y del espacio. Esta diversidad se manifiesta en la originalidad y la pluralidad de las identidades que caracterizan los grupos y las sociedades que componen la humanidad. Fuente de intercambios, de innovación y de creatividad, la diversidad cultural es, para el género humano, tan necesaria como la diversidad biológica para los organismos vivos.

Aspira a preservar ese tesoro vivo, y por lo tanto renovable, que es la diversidad cultural, diversidad que no cabe entender como patrimonio estático sino como proceso que garantiza la supervivencia de la humanidad; aspira también a evitar toda tentación segregacionista y fundamentalista que en nombre de las diferencias culturales sacralice esas mismas diferencias y desvirtúe así el mensaje de la Declaración Universal de Derechos Humanos.

La Declaración Universal sobre diversidad cultural de la UNESCO (2003), se constituye en un instrumento jurídico para defender la dignidad de las personas, a la vez que permite establecer lineamientos para garantizar el respeto a la igualdad y a la diversidad. En sus artículos 7 y 8 señala que tiene como objetivo concienciar sobre la importancia de la diversidad de la cultura de origen, así como de la formulación de métodos pedagógicos que permitan preservar la transmisión de saberes.

Una estrategia interesante para promover la diversidad cultural en el ámbito académico está planteada en esta Declaración, la cual consiste en la implementación de tres ejes:

  • Eje del ver: tiene como intención colaborar para modificar la percepción imágenes de otras culturas implica la socialización mediante la promoción de la diversidad cultural en la enseñanza académica.

  • Eje del creer: se busca un mejor conocimiento de las culturas, modos de vida, sistemas de valores a fin de promover la diversidad cultural desde la visión de enriquecimiento e intercambio cultural.

  • Eje del poder: entendido como una capacidad de actuar, dado que se trata de organizar la diver- sidad cultural, en todos los niveles, y respetar en el plano constitucional y político el derecho a la diversidad cultural.

Garantizar estos postulados requiere el abordaje y participación colectiva a fin de integrar a toda la sociedad en acciones que permitan articular la puesta en práctica de actividades y estrategias con esta intención.

En el ámbito educativo incorporar contenido que validen el uso del ajedrez para reforzar las acciones positivas de la educación intercultural es una vía garantizada para el logro de una sociedad inclusiva, ajustada a las demandas y retos de los tiempos actuales y que confirme en su quehacer diario la no discriminación no solo en los postulados sino en acciones concretas que favorecerán una sociedad más equitativa y con sentido de justicia social.

Contextualización institucional

El Colegio Universitario Francisco de Miranda es una institución de educación superior, ubicada en la Caracas, capital venezolana, donde se dictan carreras técnicas profesionales en correspondencia con las demandas y necesidades del mercado laboral centrándose en tres grandes áreas: Administración, Contaduría e Informática.

Para el año 2009 se aprueba impartir los Programas Nacionales de Formación (PNF) modalidad educativa enmarcada en la misión educativa Alma Mater cuyas características esenciales son: la formación humanista, vinculación con la comunidad, modalidad curricular flexible, definición del sistema de evaluación, acreditación de experiencia.

En febrero del año 2018 el Colegio Universitario Francisco de Miranda, fue transformado en Universidad Experimental de Caracas (UNEXCA- Sede Altagracia) a fin de dar respuesta a las necesidades educativas caracterizadas por la inclusión y desarrollo de las políticas educativas vigentes a nivel mundial.

La senda metodológica

La investigación, que se pretende desarrollar es de tipo predictiva, siguiendo la clasificación de Hurtado de Barrera (2010), este tipo de investigación: “(…) se interesa por anticipar situaciones futuras a partir del conocimiento de las condiciones previas y la comprensión de los procesos explicativos” (p. 49). La investigación de tipo predictiva es pertinente en la medida que propone como una alternativa creativa al uso de herramientas pedagógicas que permitirán alcanzar los objetivos programados. Por otra parte, la investigación se plantea realizarse en varios momentos desglosándose de la siguiente manera en:

  1. Recolección simultánea de información cualitativa y cuantitativa

  2. Empleo de instrumentos cualitativos de recolección de información y se aplica un instrumento que recolecta información cuantitativa.

  3. En el análisis de datos con predominio en el análisis de contenido cualitativo y se incluye procesa- miento estadístico de datos, los cuales se mezclan en el análisis integral de la realidad.

El ajedrez como estrategia pedagógica

“Estrategia es política (...) y (...) política es el arte de asegurar al hombre el goce de sus facultades naturales en el bienestar de la existencia (...) es sobre todo arte de precisión”.

José Martí

El ajedrez es un juego apasionante cuyo valor formativo es apreciado por distintas disciplinas tales como: psicólogos y educadores sus beneficios son reconocido nivel mundial. Al respecto AEDUCARD (2012) destaca:

“El ajedrez es una poderosa herramienta para satisfacer las necesidades educativas en el proceso enseñanza-aprendizaje, proporcionando alternativas importantes en el desarrollo de las potencialidades del niño/a o joven, enseñando a discernir, a analizar, a pensar con un enfoque de criticidad, adiestrando el área cognitiva y afectiva del individuo, y al mismo tiempo otorgando lugar preponderante para los va- lores cívicos y morales. Es por eso su importancia.” (p. 2).

Es por ello, que el ajedrez nos invita al estudio, preparación y evaluación permanente como vía al logro y perfeccionamiento individual. AEDUCARD (2012) refiere:

“(…) el ajedrez contribuye a la formación integral de la persona mediante el aporte de una serie de valores y pautas de conducta que dan al individuo la capacidad de pensar y valerse por sí mismo en el cambiante mundo que nos rodea. Da una pauta ética en el momento propicio para la adquisición de valores morales que debido a sus múltiples ventajas contribuyen a la formación de mejores ciudadanos”. (p. 9-10).

En este sentido, destaca Kasparov (2016) la memorización, la precisión en el cálculo y la aplicación de la lógica son esenciales. Entre los valores que se pueden desarrollar con la práctica del ajedrez encontramos: responsabilidad, respeto, fuerza de voluntad, acatar normas, cortesía, aprender a ganar o perder, perseverancia, disciplina - tenacidad, paciencia - autocontrol, tolerancia - amistad, superación personal, honradez y humildad.

Los siguientes autores Borrell (1975), Panov y Estrin (1988), Grau (2000), AEDUCARD (2012) coinciden en señalar que, el ajedrez está animado por elementos fundamentales, tales como: el tiempo, el espacio y la fuerza, además, evoluciona y se transforma como todas las cosas, desde esta perspectiva se convierte en una herramienta por excelencia para reforzar valores necesarios para la formación y comprensión social. Permite el desarrollo de ideas estratégicas abstractas y análisis concretos. Por ello, colocar el ajedrez al servicio de la educación no sólo tiene como finalidad desarrollar el arte de pensar sino también cultivar valores.

En este sentido, Kasparov (2016) argumenta que, el ajedrez permite la habilidad de combinar la creatividad y el cálculo, el arte y la ciencia, en un todo que es mucho más que la suma de sus partes. Es un nexo cognitivo único, un lugar donde el arte y la ciencia se unen en la mente humana mejorado por la experiencia. Es el único juego que pertenece a todas las personas y a todas las épocas, permite además establecer un código, un lenguaje común para sus jugadores indistintamente de las diferencias culturales, este autor acota, además, que entre las fortalezas del ajedrez encontramos: combina el análisis y la investigación con el pensamiento creativo, ayuda poseer un vocabulario común con el que trabajar y proporciona un modelo muy versátil acerca de la toma de decisiones.

Por ello, es necesario considerar como un aspecto esencial las potencialidades que presenta su incorporación dentro del currículo. El ajedrez como estrategia pedagógica permite garantizar un espacio para el desarrollo de acciones para el aprendizaje lúdico, creativo mediante valores, compromiso y estudio.

Coincidimos con La Rosa (2009) quien refiere que el ajedrez es importante en la promoción de la toma de conciencia puesto que permite la apertura de espacios para la reflexión imprescindibles en la formación de la criticidad de la mente, el trabajo del cerebro y sus funciones

Ajedrecistas instructores de la Academia Nacional de Ajedrez de Venezuela (A.N.A.) destacan que el ajedrez y su evolución es reflejo no solo de las necesidades sociales sino del avance del momento histórico de allí el poder comprender el cambio en los movimientos, estrategias, tiempo de duración en las partidas y jugadas de implementos y artefactos como la medición del tiempo en las partidas e incluso aparición, funciones y significación de las diferentes piezas. De igual manera destaca que el ajedrez debe abordarse desde múltiples visiones y en especial desde su belleza (creatividad), desde su lógica matemática y desde su valor moral.

En cuanto al concepto de estrategia coincidimos con lo señalado por Valle (2007) al definir la estrategia como: “…un conjunto de acciones secuenciales e interrelacionadas que partiendo de un estado inicial (…) permiten dirigir el paso a un estado ideal consecuencia de la planeación (p. 91).

Desde el punto de vista pedagógico Gutiérrez (s/f) plantea para la elaboración de una Estrategia Pedagógica cuatro pasos metodológicos

  • El diagnóstico de necesidades educativas.

  • La elaboración de la estrategia Pedagógica.

  • La ejecución de la estrategia Pedagógica.

  • La evaluación.

A continuación, se presenta el siguiente gráfico, donde se contemplan los componentes mencionados:

Figura 1 Modelo de Estructura para la elaboración de Estrategias  

Se pretende el abordaje desde la estructura anteriormente señalada para la elaboración de una estrategia pedagógica que permita el desarrollo desde la educación intercultural del ajedrez como lenguaje común, como un espacio para el diálogo intercultural entre distintas culturas de origen.

Siguiendo a Escalona (2009) desde la óptica intercultural se debe considerar la importancia de relacionarnos con el otro través de la comprensión y articulación de los pensares y saberes fomentando valores que tributen a la no discriminación, la justicia social, la igualdad de oportunidades y la inclusión. Cabe destacar, que una vez realizado el diagnostico de esta investigación se valorara para el diseño de la estrategia pedagógica que se pretende proponer los componentes a los cuales se ha hecho referencia.

Consideraciones finales

La educación debe reconocer las pluralidades de la sociedad actual y que permita el desarrollo a través de distintas alternativas y estrategias de trabajo a fin de socializar la democracia participativa como paso previo la profundización de las responsabilidades inherentes a la organización dentro de las comunidades de base. La educación en la actualidad requiere de profesionales en la docencia no solo abiertos a nuevas realidades, sino capaz de incluir en su práctica pedagógica nuevas estrategias para el abordaje del conocimiento y la práctica cotidiana. Por otra parte, la cultura ofrece un carácter dinámico, cambian- te para lo cual la educación debe establecer puentes para el intercambio, el dialogo entre los distintos grupos culturales para el reconocimiento, identificación y entendimiento mutuo en aras de la armonía.

Las sociedades actuales deben propiciar valores que favorezcan la tolerancia, el respeto y la inclusión, sociedades multiculturales. En un mundo diverso, complejo se debe reconocer el conocimiento ancestral de las distintas culturas, así como sus aportes y contribuciones a la construcción colectiva.

La interculturalidad constituye un valor educativo que expresa la significación social dada a la interacción entre culturas diversas por su origen; deviniendo en aspecto importante dentro de la cultura de la organización educativa.

Es por ello, propiciar la práctica de la educación intercultural, es contribuir a la creación de un mundo solidario ecológico y tolerante transformándose en un factor importante en procura de la cohesión y la renovación social. Desde el punto de vista científico, es oportuno el uso de una estrategia pedagógica, puesto que permitirá solventar un requerimiento especifico, tal es el caso de propiciar espacios distintos y creativos para el diálogo intercultural, mediante un lenguaje en común en este caso del ajedrez.

Promover el ajedrez como una estrategia pedagógica para el fomento de la educación intercultural constituye una alternativa para la incorporación de nuevos contenidos, una visión integral y creativa para el abordaje de los desafíos educativos que requiere el mundo contemporáneo.

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Recibido: 09 de Noviembre de 2016; Aprobado: 08 de Diciembre de 2016

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