SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
 número21FUNCIONALIDAD FAMILIAR Y SU RELACIÓN CON LA AUTOESTIMA EN ADOLESCENTES DE LA CIUDAD DE AMBATOINTELIGENCIA EMOCIONAL Y RENDIMIENTO ACADÉMICO EN ESTUDIANTES DE UNA UNIVERSIDAD ECUATORIANA índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

Links relacionados

  • No hay articulos similaresSimilares en SciELO

Compartir


Revista Chakiñan de Ciencias Sociales y Humanidades

versión On-line ISSN 2550-6722

Revista Chakiñan  no.21 Riobamba sep./dic. 2023

https://doi.org/10.37135/chk.002.21.08 

Artículo de Investigación

INTELIGENCIA EMOCIONAL Y ADAPTACIÓN CONDUCTUAL EN ADOLESCENTES DE ACOGIMIENTO INSTITUCIONAL Y APOYO ESCOLAR: ESTUDIO COMPARADO

EMOTIONAL INTELLIGENCE AND BEHAVIORAL ADAPTATION IN ADOLESCENTS IN INSTITUTIONAL CARE AND SCHOOL SUPPORT: A COMPARATIVE STUDY

María Belén Parreño1 
http://orcid.org/0000-0002-3704-4467

Ana del Rocío Martínez2 
http://orcid.org/0000-0001-5436-8845

1Pontificia Universidad Católica del Ecuador, Psicología, Postgrado, Ambato, Ecuador, email: mbparreno@pucesa.edu.ec

2Pontificia Universidad Católica del Ecuador, Psicología, Postgrado, Ambato, Ecuador, email: rmartinez@pucesa.edu.ec


RESUMEN

La adolescencia, etapa vulnerable en el desarrollo humano, requiere contar con adecuados procesos de adaptación para enfrentar los cambios que se presentan. Se realizó una investigación con el objetivo de comparar la inteligencia emocional y la adaptación conductual entre adolescentes de acogimiento institucional y adolescentes del área de refuerzo escolar de la Fundación Proyecto Salesiano Ecuador Granja Don Bosco, fundamentada en el paradigma positivista, bajo un diseño no experimental de corte transversal, con enfoque cuantitativo de tipo descriptivo y metodología comparativa. Participaron 85 adolescentes de 12 a 18 años a quienes se aplicó el test de Inteligencia Emocional Bar On Ice Na, el Inventario de Adaptación Conductual (IAC) y una ficha sociodemográfica. Los resultados reflejan que el 50,9 % de adolescentes en acogimiento institucional presenta problemas de conducta, además, en el análisis comparado no se encontraron diferencias significativas entre los grupos (p>0.5). En la correlación, se observó significancia estadística moderada del estado de ánimo con el manejo del estrés (rs= ,662**), en el grupo de refuerzo escolar, mientras que en el grupo de acogimiento institucional una correlación baja negativa rs= -,347* de adaptabilidad, con adaptación social.

PALABRAS CLAVE: Adaptación conductual; adolescentes; análisis comparativo; inteligencia emocional

ABSTRACT

Adolescence, a vulnerable stage in human development, requires adequate adaptation processes to face changes. The research was carried out to compare emotional intelligence and behavioral adaptation between adolescents in institutional care and adolescents in the school support area of the Proyecto Salesiano Foundation Ecuador Granja Don Bosco, based on the positivist paradigm, under a non-experimental cross-sectional design, with a descriptive quantitative approach and a comparative methodology. Eighty-five adolescents between 12 and 18 years of age participated in the research. They were administered the Emotional Intelligence test Bar On Ice Na, the Bell's Adaptation Inventory (BAI), and a sociodemographic form. The results show that 50.9% of adolescents in institutional care have behavioral problems, and in the comparative analysis, no significant differences were found between the groups (p>0.5). In the correlation, the moderate statistical significance of mood with stress management (rs=,662**) was observed in the school reinforcement group. In contrast, in the institutional foster care group, there was a low negative correlation rs= -.347* of adaptability with social adaptation.

KEYWORDS: Behavioral adjustment; adolescents; comparative analysis; emotional intelligence

INTRODUCCIÓN

El estudio y comprensión de la Inteligencia Emocional (IE) y la Adaptación Conductual (AC) en la última década ha cobrado mayor notoriedad, especialmente en edades tempranas, donde el desarrollo de capacidades y aptitudes se vuelve primordial para las siguientes etapas de la vida. El término IE comienza a ser estudiado a mediados del siglo XX, donde se precisa la necesidad del ser humano para comprender sus emociones y gestionarlas en función de convertirlas en significativas para su vida (Extremera & Fernández-Berrocal, 2013).

A su vez, Bar-On et al. (2003) definen a la IE como un componente no cognitivo, desarrollador del éxito en procesos más complejos (Ozáez, 2015). También se concibe como el autoconocimiento emocional que permite evaluar los sentimientos propios y ajenos de desde la perspectiva de Goleman (1995), autor clásico para la psicología, que brinda la capacidad de controlar impulsos, reconocer las emociones y afrontar adecuadamente las respuestas del otro, lo que a su vez permite una homeostasis con su medio social.

Según Hasan & Zhao (2021), la IE coadyuva a los docentes a comprender y correlacionar el entorno educativo, ya que esta habilidad afecta al éxito del individuo.

De acuerdo con Pérez (2017) los componentes a evaluar en la IE son:

  1. Habilidad intrapersonal: autoconciencia y respeto personal.

  2. Habilidad interpersonal: relación con los demás y empatía.

  3. 3) Adaptabilidad: evaluación de la realidad, flexibilidad y capacidad para resolver problemas.

  4. 4) Manejo del estrés: tolerancia y control de impulsos.

  5. 5) Estado de ánimo general: optimismo y alegría.

En tal sentido, un estudio realizado en España por González, Souto & Fernández (2015), en el cual participaron 1071 adolescentes escolarizados, identificó relación entre niveles altos de IE y conductas sociales positivas y adaptativas, las cuales constituyen habilidades necesarias para el buen funcionamiento de la persona. En efecto, la IE cobra sentido cuando el individuo maneja sus emociones y establece conexiones interpersonales eficaces.

Por su parte, la AC puede ser vista como un proceso innato al ser humano, mediante el cual responde a demandas y necesidades del entorno (Medellín, 2019); o como un proceso de equilibrio que ayuda a sobrellevar los cambios en los adolescentes (Gómez, 2017, como se citó en Martínez & Almeida, 2021).

A su vez, Martínez et al. (2018) señalan que la IE actúa como regulador cognitivo de las emociones en situaciones de estrés, lo cual favorecería la adaptación dentro del contexto del individuo, criterio que consideran en la construcción del Cuestionario de Habilidades de Adaptación Conductual dirigido a adolescentes de 14 a 18 años de edad. Puesto que, constituye un factor cognitivo regulador que permite reconocer, identificar, controlar y expresar sentimientos o pensamientos (Gallego, 1999).

Saldaña (2020, p. 7) clasifica a los factores de la AC en: “

factor personal, factor social, factor familiar y factor escolar

”. El personal indica la relación del adolescente con su cuerpo, lo cual manifiesta una adecuada estima de sí mismo; el escolar determina si el adolescente se siente conforme con su estadía en el colegio, con sus profesores y compañeros. La adaptación familiar indica si el adolescente disfruta de la compañía de sus padres y del resto de su familia, cómo resuelven las dificultades de la convivencia y si respeta los acuerdos y reglas.

Esto coincide con lo expuesto por Saavedra, (2020) quien establece cuatro áreas para el desarrollo de la AC: personal, familiar, social y escolar. La AC forma parte del proceso de construcción del individuo, y en la adolescencia es importante educar, con la finalidad de crear conductas adaptativas aceptables y particularmente en adolescentes a los que le han sido vulnerados sus derechos o que provienen de ambientes conflictivos.

Por su parte, para Fonseca et al. (2020) existe relación entre las dificultades emocionales y las dificultades conductuales, lo cual corrobora mediante el cuestionario de Dificultades y Capacidades SDQ, a partir del cual encontró que, al aumentar la capacidad de AC, disminuyen las dificultades emocionales.

De acuerdo con Lechner et al. (2022), las habilidades emocionales y conductuales se desarrollan a través de la construcción de relaciones interpersonales, es decir, cuando el individuo sabe gestionar sus emociones y conductas.

Bajo este contexto, la situación problémica que se analiza en el presente estudio parte de observaciones no sistematizadas en un grupo de adolescentes bajo medida de acogimiento institucional y otro que recibe apoyo escolar, en quienes se identifica problemas en el control de emociones, reacciones agresivas, comportamiento impulsivo, dificultad para entender las emociones propias y de otros, labilidad emocional, entre otras características que, al parecer, están relacionadas con dificultades en la IE.

Estos síntomas podrían entenderse como resultado de una carencia de IE, lo cual, como se ha explicado anteriormente, corresponde a un déficit de habilidades para gestionar los sentimientos propios y aplicarlos de una manera apropiada en la respuesta conductual, conjuntamente con la identificación de los estados de ánimo y necesidades propias (Dueñas, 2002). En este sentido, se reconoce que un bajo nivel de inteligencia emocional sería el resultado de la falta de percepción y autorregulación de las emociones y su posterior réplica conductual.

Cabe indicar que, este mismo grupo de adolescentes muestra también conflictos en las relaciones interpersonales, retraimiento, desacatamiento de normas institucionales, conductas evitativas, agresivas y tendencias a autolesionarse, lo que se acompaña de conflictos en el ámbito familiar, escolar y social; aspectos que se asocian a los problemas de AC.

Estos indicadores son mencionados por López et al. (2013, p. 307) en su definición de AC, precisada como “la capacidad de los individuos para ajustar la conducta propia a las diferentes demandas del medio”, con la finalidad de mantener una correlación adecuada y estable con los demás. De este modo, la AC resulta primordial para mantener la homeostasis emocional, generar autoestima, independencia, seguridad y una adecuada construcción del yo.

Por tanto, el término AC es entendido desde los estudios realizados por Charles Darwin (1958) quien refería que “

los organismos mejor adaptados tendrán más prevalencia de vida

” refiriéndose a la adaptación como método de supervivencia (como se citó en López et al., 2013, p. 306). En consecuencia, la AC ocurre producto de “

un equilibrio entre aprovechamiento y acomodación, cuyo valor es la misma proporción de la interacción sujeto-objeto

” (Piaget, 1991, como se citó en López et al., 2013, p. 306). Por consiguiente, es necesario que el individuo cree habilidades para adaptarse de una manera apropiada en su medio.

Así pues, en el proceso de adaptación conductual convergen aspectos personales y sociales, donde habilidades personales como la autonomía van de la mano con habilidades sociales como el uso apropiado del lenguaje, este doble proceso de acomodación contribuye a la independencia personal y social del sujeto (Chávez et al., 2013). Según Cortese (2010, como se citó en Vallejo, 2011) dicho proceso, en el cual el individuo acomoda sus condiciones internas a su realidad social, se esteblece en cuatro etapas.

La primera corresponde a la negación, la cual indica que todo cambio produce ansiedad y que el sujeto escoja mantenerse en el pasado; la segunda etapa es la defensa, aquí intervienen las costumbres y tradiciones para apartarse de la realidad, con las cuales se percibe ira o apatía. Sin embargo, aquí también existe una valoración de ventajas y desventajas sobre el cambio. La tercera etapa es la aceptación, en la que el cambio es percibido como una oportunidad de buscar soluciones y desarrollar habilidades; la última etapa es la de adaptación, una vez evaluadas las ventajas y el bienestar propio respecto al cambio, se crea una nueva idea de vida y acepta la evolución (Vallejo, 2011).

En Ecuador, una medida transitoria de protección dispuesta por la autoridad judicial protege a niños y adolescentes con derechos vulnerados, los que se mantienen en centros de acogimiento institucional para precautelar su integridad, y otro grupo recibe únicamente apoyo escolar, manteniéndose un seguimiento constante de su entorno socio familiar (Morales, 2016).

A través de la situación problémica de las observaciones no sistematizadas en el grupo de adolescentes en acogimiento institucional y aquellos que reciben apoyo escolar, se identifica: dificultades en el control de emociones, agresividad, acciones de impulsividad, conflicto para entender las emociones propias y de los otros, fragilidad emocional, entre otras características que, al parecer, se relacionan con dificultades en la inteligencia emocional.

A su vez, denotan problemas en las relaciones interpersonales, incomunicación, desobediencia a las reglas de convivencia e inclinación a auto-lesionarse, acompañados de conflictos en el ámbito familiar, escolar y social, aspectos asociados a los problemas de AC.

La inteligencia emocional supone la capacidad de percibir, valorar y expresar emociones, lo que impacta significativamente en el desarrollo y logros personales y académicos de los adolescentes. Las dificultades de AC repercuten en el grado de satisfacción de las necesidades primordiales, como, por ejemplo: alimentación, higiene y vestido; además de sujetar un componente social que le brinda la capacidad al ser humano de interactuar en sociedad.

De tal manera, si no se trabaja en estas habilidades emocionales y conductuales podría existir evasión del acogimiento y riesgo de callejización, lo que resulta en problemas personales, familiares, escolares y sociales. Por lo tanto, se presenta la siguiente interrogante de investigación: ¿Cuál es la diferencia de la IE y la AC entre adolescentes de acogimiento institucional y de apoyo escolar de la Fundación Proyecto Salesiano Ecuador, Granja Don Bosco?

METODOLOGÍA

El presente artículo de investigación se fundamenta en el paradigma positivista, el cual según Ricoy (2006) busca demostrar una hipótesis por medios estadísticos o cuantitativos, usando parámetros racionalistas. En tanto, un diseño de investigación no experimental de corte transversal posibilita al investigador recoger datos en un momento dado y en un tiempo único, sin realizar alguna intervención a la población escogida (Hernández & Mendoza, 2018).

El alcance de la investigación es comparativo, dado que se analiza las variables con el fin de identificar si existe entre ellas diferencias o similitudes (Hernández et al., 2010). Por lo tanto, en este estudio se compara la IE y la AC en adolescentes de acogimiento institucional y apoyo escolar y a su vez se establece una relación de las variables en cada grupo de participantes.

La hipótesis planteada en el estudio fue: Existen diferencias en la IE y la AC en los adolescentes de acogimiento institucional y apoyo escolar de la Fundación Proyecto Salesiano Ecuador, Granja Don Bosco.

Para la comprobación de la hipótesis fue necesario ejecutar los siguientes pasos:

  1. Profundizar los referentes teóricos y metodológicos de la IE y la AC.

  2. Evaluar la IE y la AC en adolescentes de acogimiento institucional y adolescentes de apoyo escolar de la Fundación Proyecto Salesiano Ecuador, Granja Don Bosco.

  3. Realizar un análisis estadístico descriptivo y comparativo de la IE y la AC, entre adolescentes de acogimiento institucional y adolescentes de apoyo escolar de la Fundación Proyecto Salesiano Ecuador, Granja Don Bosco.

La secuencia de pasos a seguir está sustentada en el trabajo de Pallo (2020), quien que realizó un estudio comparado de la AC en adolescentes de instituciones privadas y públicas, entonces para la recolección de datos se aplicó la técnica de la encuesta mediante una ficha sociodemográfica. Además, la técnica psicométrica: “

test o pruebas que se aplican en la evaluación de variables psicológicas

” (Nuván et al., 2018, p. 8) como el de la inteligencia emocional a través del Inventario de Inteligencia Emocional Bar On ICE: NA y la AC con el Cuestionario de Adaptación Conductual IAC. A continuación, se describe las técnicas e instrumentos utilizados en orden secuencial y lógico.

El primer instrumento aplicado fue la Ficha Psicológica Ad Hoc, con 7 preguntas cerradas de información general que incluyen aspectos sociodemográficos, dirigida a los adolescentes de la muestra, con el fin de conocer criterios relevantes sobre el desarrollo familiar, escolar, social y antecedentes que sean notables para el estudio de los procesos de adaptación y el tipo de relación con sus pares. La ficha se realizó con el programa Google Forms, la cual guarda los datos e inmediatamente arroja resultados en una hoja de cálculo.

Seguidamente se trabajó con el Inventario de Inteligencia Emocional Bar On ICE: NA. En su referencia completa, constituido por 60 preguntas separadas en 6 escalas: intrapersonal, interpersonal, adaptabilidad, manejo de estrés, estado de ánimo en general e impresión positiva, con una escala de valoración de tipo Likert (muy rara vez, rara vez, a menudo y muy a menudo). Encaminado a todos los adolescentes de la muestra para medir habilidades y aptitudes de la IE y social (Pérez, 2017). En cuanto a la fiabilidad del test, en 2002, mediante una estandarización peruana del Bar On ICE: NA, se obtiene un índice entre 0.60 y 0.80 al Alfa de Cronbach para una muestra de 3374, comprobándose que es confiable y que los ítems mantienen homogeneidad entre sí (Paredes, 2020).

Finalmente se administró el Inventario de Adaptación Conductual (IAC), que según De la Cruz y Cordero (1981) fue diseñado para adolescentes de 12 a 18 años de edad, formado por 123 frases con tres tipos de respuestas (si, no, ?), evalúa la adaptación conductual en 4 áreas: 30 personales, 30 familiar, 33 social y 30 escolar. En relación con el Alfa de Cronbach, después de un estudio realizado por Ruiz en 2003 a 252 adolescentes, se obtuvo un alfa de 0,94, lo que indicó buena consistencia y adaptación global (como se citó en Chan & Quezada, 2013).

Para el procesamiento de datos se utilizó el software Statistical Package for Social Sciencies (SPSS), en su versión 25. El análisis comprende estadísticos descriptivos, de frecuencia, porcentaje, medidas de tendencia central y de dispersión, mientras que el análisis comparativo se efectúo con la prueba t de student y adicional el cálculo del coeficiente de Spearman para determinar la correlación entre las variables, y así aceptar o rechazar la hipótesis propuesta.

La población objeto de estudio fue controlada, limitada, accesible y ajustada a los elementos de la investigación. Se trabajó con toda la población, conformada por 85 adolescentes de la Fundación Proyecto Salesiano Ecuador, Granja Don Bosco, de entre 12 a 18 años, de los cuales 42 se encontraban institucionalizados y 43 recibían refuerzo escolar.

En suma, se solicitó la autorización oportuna del coordinador del centro de acogida, se socializó los objetivos de la investigación y se planteó los principios de confidencialidad y anonimato con el consentimiento informado, entregado a los representantes legales. En el caso de los adolescentes bajo acogimiento institucional, el que otorgó la aprobación fue el coordinador y en el caso de los adolescentes de apoyo escolar la aprobación fue de la tutora a cargo.

Seguido de la recolección de datos a través de la aplicación de los instrumentos psicométricos, la información obtenida fue agrupada en tablas para su comprensión. El procesamiento se realizó utilizando el programa estadístico SPSS y se finalizó con el análisis de los datos cuantitativos, aplicando la estadística descriptiva, comparativa y correlacional mediante la interpretación de los porcentajes obtenidos de los resultados.

La presente investigación de tipo descriptiva

Utilizó el método analítico-sintético, “cuyo

Objetivo principal es recopilar datos e

informaciones” (Esteban 2018:2), para de esta

manera tomar decisiones y formular propuestas

que mejoraran el sector bajo estudio.

La presente investigación de tipo descriptiva

utilizó el método analítico-sintético, “cuyo

objetivo principal es recopilar datos e

informaciones” (Esteban 2018:2), para de esta

manera tomar decisiones y formular propuestas

que mejoraran el sector bajo estudiolllkj

RESULTADOS Y DISCUSIÓN

Después de aplicar la metodología para la recaudación de datos, seguido del análisis de las respuestas brindadas por los adolescentes a través de las mediciones estadísticas, se establece la interpretación de los resultados para la comprobación de la inteligencia emocional y la adaptación conductual, además de identificar las características sociodemográficas de la muestra.

RESULTADOS DE LA FICHA SOCIODEMOGRÁFICA

El análisis de los datos sociodemográficos de los adolescentes se representa en la Tabla 1, la cual se sustenta mediante la estadística cuantitativa a través de las equivalencias de porcentaje para su mayor comprensión.

Tabla 1: Análisis estadísticos de datos sociodemográficos 

Tomándose en cuenta la categorización de los datos en dos grupos, el primero corresponde a refuerzo escolar, mientras que el segundo a los adolescentes en modalidad de acogimiento institucional, es decir, que no viven con sus padres, sino en las instalaciones de la institución. Como resultado de la categoría sobre el lugar de domicilio, correspondiente a refuerzo escolar, el sector de domicilio tiene una prevalencia de domicilio en el sector rural (31,6 %) y el 56,1 % de la muestra corresponde al sector de domicilio urbano.

Mientras que en el grupo de casa de acogida tiene un porcentaje de 68,4 % en el domicilio rural y uno de 43, 9% en el domicilio urbano. Interpretándose que, los estudiantes de refuerzo escolar pertenecen más al área urbana y los que se encuentran en casa de acogida pertenecen en su mayoría al sector rural.

En cuanto a la categoría sobre el tipo de vivienda, en el grupo de refuerzo escolar, casa propia tiene un valor (58,3 %), arrendada (37,5 %), prestada (51,2 %); mientras que en el grupo de acogida los adolescentes que viven en casa propia representan un valor (41,7 %), arrendada (62,5 %), prestada (42,9 %) y otro (48,8 %). Interpretando que las mejores condiciones de vivienda las tienen los adolescentes del grupo de refuerzo escolar a diferencia de los del grupo de acogida.

La siguiente categoría es identificación étnica, donde la identificación mestiza tiene un valor (50,6 %) para el grupo de refuerzo escolar y un valor (49,4 %) para el grupo de acogida; 2 de los 85 encuestados afirmaron ser indígenas. Estos valores señalan que la mayoría de los encuestados sean del grupo de refuerzo escolar o de casa de acogida son mestizos.

La categoría: antecedentes personales, muestra un 100 % para el ítem de abuso sexual en el grupo de refuerzo y 0 % para casa de acogida; en la opción de callejización existe un 50 % para refuerzo escolar y otro 50 % para casa de acogida; para la opción de consumo de sustancias existe un 73,3 % en refuerzo escolar y 26,7 % en casa de acogida.

A lo que respecta a enfermedades físicas y psicológicas, en refuerzo escolar existe un porcentaje de 34,5 %, mientras que en casa de acogida es de 65,5 %; por último, en los conflictos con la ley existe un 100 % en refuerzo escolar y 0 % en casa de acogida. Mediante estos datos se puede entender que existen más antecedentes personales en el grupo de refuerzo escolar.

En la categoría de estado civil de los padres, en el grupo de refuerzo escolar los padres casados representan un 61,8 % y en la muestra de casa de acogida representan el 38,2 %. Los padres divorciados de los adolescentes de refuerzo escolar representan el 24 % y los de casa de acogida el 76 %. Los padres en unión libre de los estudiantes de refuerzo escolar corresponden a un 58,3 % y los de casa de acogida a un 41,7 %.

Adicionalmente, dos encuestados de refuerzo escolar mencionaron tener padres viudos. En consecuencia, los adolescentes de refuerzo escolar en un mayor porcentaje tienen a sus padres juntos, mientras que los adolescentes de casa de acogida tienen un mayor porcentaje de padres divorciados.

Al observar los datos de la sexta categoría sobre antecedentes familiares, en el grupo de refuerzo escolar no se presentan datos de abuso sexual, mientras que en el grupo de acogida se presentan dos casos de abuso sexual. En lo referente a conflictos con la ley, un 46,4 % pertenece al grupo de refuerzo escolar y un 53,6 % al grupo de acogida.

En el ítem de consumo de sustancias, un 50 % de las respuestas corresponde a refuerzo escolar y el otro 50 % al grupo de acogida. Finalmente, en la opción de problemas psicológicos, el 55,3 % pertenece a refuerzo escolar y el 44,7 % al grupo de acogida. Por lo tanto, existen más antecedentes familiares en los adolescentes de casa de acogida que en los de refuerzo escolar.

En la categoría relación del adolescente con sus compañeros, la encuesta arrojó los siguientes datos: los adolescentes que respondieron que tienen una relación buena corresponden al 66, 7% de refuerzo escolar y al 33,3 % de casa de acogida.

Las personas que respondieron que la relación con sus compañeros es regular, un 49,1 % pertenece al refuerzo escolar y un 51,8 % a casa de acogida y quienes respondieron que su relación es mala, un 48 % corresponde a refuerzo escolar y un 50,9 % a casa de acogida, por lo que la relación con los compañeros es mejor entre los adolescentes de refuerzo escolar en comparación con los de casa de acogida.

RESULTADOS DE LA COMPARACIÓN TEST BAR ON ICE NA

Tabla 2: Análisis comparativo Bar On Ice Na 

Los resultados del test Bar On Ice Na en torno al grupo de refuerzo escolar, que se observan en la tabla 2, muestran la escala de adaptabilidad con una media de M= 28,34, una desviación estándar de Ds= 3,16 y en el grupo de acogimiento institucional con una M= 28,64, una desviación estándar de Ds= 2,59, la media del factor de adaptabilidad del test es M= 20, lo cual indicaría que los adolescentes están por sobre la media y que, a mayor puntuación, mayor adaptabilidad.

En el área intrapersonal existe una M= 16,16 y una Ds= 2,33 en el grupo de refuerzo escolar y una M= 16,23 y una Ds= 1,77 en el grupo de acogida, al compararla con la media del test M= 12, esto indica que la mayoría de adolescentes está por sobre la media del área intrapersonal, es decir, tiene buena relación consigo mismo; en la parte interpersonal existe una M= 25,23; Ds= 2,85 en el grupo de refuerzo y una M= 24,73; Ds= 2,11 en acogimiento.

Al ser comparado con la media del test M= 24 indica que en esta área los adolescentes están alrededor de la media, por lo que deben desarrollar aún más la empatía para con sus compañeros y su entorno. En relación con el manejo del estrés se muestra M= 34,55 y Ds= 2,61 y M= 34,35 y Ds= 2,57 para refuerzo escolar y acogimiento institucional, respectivamente, la media del test para esta área es M= 24, al parecer los estudiantes tiene un nivel alto para manejar el estrés, en otras palabras, controlan los impulsos.

En cuanto al estado de ánimo se muestra una M= 41,90 y Ds= 4,73 y M= 42,78 y Ds= 4,71 para refuerzo escolar y acogimiento institucional respectivamente, la media del test para esta área es M= 28, estos resultados pueden indicar que hay una respuesta positiva a un ánimo general de los adolescentes.

Finalmente se tiene la impresión positiva con una M= 16,32 y Ds= 2,31 para refuerzo escolar y M= 16,15 y Ds= 2,65 para casa de acogida y la media del test es M= 12,5 esto señala que la impresión positiva de sí mismos es alta. Así también, en el estudio de Pérez (2017) se hallaron resultados similares en cuanto a la media de los factores del test BarOn siendo adaptabilidad M= 14,32, interpersonal M= 36,78, intrapersonal M= 14,32, manejo del estrés M= 29,68 y estado de ánimo M= 44,30.

RESULTADOS DE LA COMPARACIÓN TEST IAC

Tabla 3: Análisis comparativo de IAC  

Los resultados de la estadística descriptiva del inventario de adaptación conductual (IAC), reflejados en la Tabla 3, señalan en el grupo de refuerzo escolar cuatro factores: el primero es el personal con una M= 8,23 y Ds= 2,16, en el grupo de acogimiento institucional se encontraron valores bastante similares con una M= 8,88 y Ds= 2,43, la media del factor personal del test es de 15 puntos, lo cual muestra que los adolescentes en su mayoría tienen una adaptación de nivel medio en el ámbito personal. Este resultado se puede comparar con Paredes (2020) en su estudio de test de inteligencia y adaptación conductual, donde se obtuvo una M= 8,49 y Ds= 4,21 con un punto de corte de 20, lo que indica que los adolescentes no tienen una alta adaptación personal.

El segundo factor es el familiar que muestra una M= 12,95 y Ds= 2,50 para el grupo de refuerzo escolar y M= 13,66 y Ds= 1,84 para el grupo de casa de acogida, siendo la media del factor familiar de 15 puntos, lo que puede dar a entender que los adolescentes están mayormente adaptados en el ámbito familiar.

El tercer factor es el escolar con una M= 14,53 y Ds= 1,75, para el primer grupo y M= 14,47 y Ds= 2,76 para el segundo grupo y la media del factor personal del test es de 16,5 puntos lo que significaría que tienen una alta adaptación escolar. Otro factor importante es el social con una M= 14,30 y Ds= 2,53, para refuerzo escolar M= 14,30 y Ds= 2,53 para casa de acogida, teniendo como media del test en el factor social de 15 puntos, esto indica que los adolescentes tienen una buena adaptación social.

En cuanto al análisis comparado no se encontraron diferencias significativas en los factores del inventario IAC entre el grupo de refuerzo escolar y casa de acogida, pues en el factor personal tiene una significancia (0,198) lo que es mayor a alfa (0,05), igual caso sucede en el resto de factores.

Estos resultados fueron similares a los encontrados en España por Pérez (2017), quien realizó el estudio sobre la relación existente entre la inteligencia emocional y el rendimiento académico a 345 estudiantes de secundaria, hallando que no existen diferencias significativas entre estas dos variables, lo que ha llevado a suponer que la inteligencia emocional una vez que se establece en el individuo es muy difícil que cambie con respecto a otras variables o categorías, como en este estudio que se distinguió entre dos grupos, el de los estudiantes suspensos y los estudiantes aprobados.

Estos hallazgos son muy similares a los encontrados en la presente investigación, pues tampoco se encontró diferencia significativa de la inteligencia emocional con respecto a la adaptación conductual; entonces, se puede inferir que se debe a la misma situación que la IE está establecida de manera permanente en los estudiantes de refuerzo escolar y acogimiento institucional.

PRUEBA DE HIPÓTESIS

H1: Existen diferencias en la inteligencia emocional y la adaptación conductual en los adolescentes de acogimiento institucional y apoyo escolar de la Fundación Proyecto Salesiano Ecuador, Granja Don Bosco.

H0: No existen diferencias en la inteligencia emocional y la adaptación conductual en los adolescentes de acogimiento institucional y apoyo escolar de la Fundación Proyecto Salesiano Ecuador, Granja Don Bosco.

Como se puede observar en las tablas 2 y 3, la significancia bilateral de los factores del tes BarOn son mayores al p-valor (0,05), así mismo se observa que la significancia bilateral de los factores del test IAC son mayores a 0,05, lo que indica que no hay diferencias significativas. En conclusión, se rechaza la hipótesis alternativa, es decir, no existen diferencias entre los resultados del test de inteligencia emocional y los resultados de la adaptación conductual en los adolescentes de acogimiento institucional y los de refuerzo escolar.

Al igual que en el estudio de Ugarriza & Pajares, efectuado en Perú: “

La evaluación de la inteligencia emocional por medio del inventario de BarOn ICE:NA, en una muestra de niños y adolescentes

” (Ugarriza & Pajares 2005:1), la muestra constituyó en 3375 individuos comprendidos entre 7 a 18 años, el estudio halló que la inteligencia emocional es diferente de la depresión.

Estos hallazgos son similares a los de esta investigación, pues se dividió en dos grupos para realizar la comparación, sin embargo, la categorización fue diferente, los grupos fueron divididos por género (hombre-mujer); donde al realizar la prueba t de student no hubo una diferencia significativa entre los factores de la inteligencia emocional. Además, el estudio asevera que no hay un instrumento que mida de manera absoluta los factores de un test, ya que siempre puede haber sesgo en las respuestas.

La investigación de Pallo (2020) realizada en Ecuador mostró un análisis comparativo de la adaptación escolar, donde participaron 200 adolescentes de entre 15 a 18 años de edad; demostrando que existen diferencias significativas de la adaptación escolar entre estudiantes de bachillerato de instituciones públicas y privadas con una significancia de 0,01, esto hace que los estudiantes se relacionen de distinta manera dependiendo del contexto, resultado que se contrapone con los resultados de la presente investigación. En lo que respecta a la adaptación conductual la significancia no permitió estipular que hay diferencias significativas.

RESULTADOS DE LA CORRELACIÓN DEL TEST BAR ON ICE NA -IAC

Tabla 4 Análisis correlacional de IAC y BarOn del grupo de refuerzo escolar 

Simbología: EA: Estado de ánimo; A: adaptabilidad; ME: Manejo del estrés; ITE; interpersonal; IT: Intrapersonal; AP: adaptación personal; AF: adaptación familiar; AE: Adaptación escolar; AS: adaptación social. r s: Rho de Spearman

Nota: 85 observaciones *p<0,05; **p<0,01

En la tabla 4 el estado de ánimo (EA) se correlaciona positivamente con la adaptabilidad (A) en una correlación moderada rs= ,831; **p<0,01, lo que indica que, a mayor estado de ánimo, mayor adaptabilidad de la persona. Además, esta dimensión también correlaciona de manera positiva y moderada con el manejo del estrés, es decir, que a medida que aumenta el estrés, este le va a afectar al estado de ánimo, siendo una correlación directa positiva con un rs= ,662; **p<0,01 y con los factores interpersonal e intrapersonal se muestra rs= ,771; rs= ,718; **p<0,01.

Estos valores indican valores positivos cercanos a 1 lo que señala que existe una correlación positiva alta. En cuanto al estado de ánimo con el factor de adaptación personal tiene r s= - ,248 lo que indica una correlación baja y de dirección negativa, el estado de ánimo con el área de adaptación familiar rs= ,29 que indica una correlación positiva muy baja; el estado de ánimo y la adaptación escolar tiene un valor rs= ,170 que indica una correlación positiva muy baja; con el factor de adaptación social rs= ,057 que indica una correlación positiva muy baja.

Tabla 5 Análisis correlacional de IAC y BarOn del grupo de casa de acogida 

Simbología: EA: Estado de ánimo; A: adaptabilidad; ME: Manejo del estrés; ITE; interpersonal; IT: Intrapersonal; AP: adaptación personal; AF: adaptación familiar; AE: Adaptación escolar; AS: adaptación social. rs: Rho de Spearman

Nota: 85 observaciones *p<0,05; **p<0,01

Algo muy similar sucede en el grupo de casa de acogida (Tabla 5) donde los valores de estado de ánimo con adaptabilidad tienen un rs= ,866; **p<0,01 lo que indica una correlación positiva alta; no obstante, existen valores que indican correlación media y baja como es el caso del estado de ánimo y manejo del estrés; manejo del estrés e interpersonal rs= ,316; rs=,333; *p<0,05; y manejo del estrés con intrapersonal con un rs= ,195. Entre la dimensión de intrapersonal e interpersonal hay una correlación moderada rs= ,613 **p<0,01.

La dimensión de adaptabilidad con la dimensión de adaptación social tiene una correlación baja negativa rs= -,347; *p<0,05, esto indica que mientras, en el grupo de refuerzo escolar se encuentra una correlación positiva con la mayoría de las dimensiones, en el grupo de casa de acogida presenta correlaciones bajas negativas.

Tanto en refuerzo escolar como en casa de acogida los valores de rho de Spearman se encuentran en un rango de correlación moderada, baja y muy baja con dirección positiva y dirección negativa, lo que da a entender que no hay una correlación significativa entre los factores del test BarOn y los factores del test IAC.

Todos estos datos permiten concluir que entre factores de los dos test IAC y BarOn existe una correlación muy baja; así mismo entre los mismos factores del test de IAC existe una correlación muy baja y solamente entre los factores del test BarOn existe correlación alta entre sus ítems.

Así también, al contrastar el p valor de la investigación con el alfa = 0,05 se encontró que el p valor o significancia bilateral es mayor que 0,05 por lo que se acepta la hipótesis nula (H0) y se rechaza la hipótesis alternativa (H1), es decir H0 corresponde a que no hay diferencias entre los factores de la inteligencia emocional con los de la adaptación conductual.

Al verificar el estudio de Poulou (2017) se halló que las correlaciones que existen entre las variables de habilidades emocionales no muestran una relación significativa, lo que indica los valores altos para las habilidades emocionales y sociales tienen valores bajos en el aspecto conductual.

Así mismo, en Ecuador, Paredes (2020) realizó el proyecto de investigación sobre la inteligencia emocional y la adaptación conductual en adolescentes con riesgo de callejización, a través de un análisis correlacional, donde se evidenció una correlación baja positiva (0,247*) entre los componentes de los dos inventarios. Estos resultados son similares con los obtenidos en la presente investigación, en el cual la correlación en la mayoría de los factores de los dos inventarios fue de correlación baja positiva, lo que deja suponer que los inventarios son independientes y sus resultados no se afectan entre sí.

Las limitaciones en el método pudieron ser; el tamaño de la muestra que es igual a la población, por otra parte, al momento de la aplicación de los inventarios el tiempo de la aplicación pudo no ser suficiente para que las contestaciones sean totalmente fidedignas. Sería recomendable entonces, que para futuras investigaciones la muestra pueda derivarse de un universo más grande; que el tiempo de aplicación de los test sea más amplio y que se pudiera utilizar otras pruebas estadísticas para contrastar los resultados comparativos y correlacionales.

CONCLUSIONES

En el aspecto metodológico se evaluó a los adolescentes de la fundación Proyecto Salesiano Ecuador, Granja Don Bosco a través de la aplicación del test de Bar On ICE: NA para obtener los valores del promedio de las medias de los factores: estado de ánimo (42,34), adaptabilidad (28,49), manejo del estrés (34,45), intrapersonal (16,19) e interpersonal (24,98); y el inventario de adaptación conductual (IAC), que abarca cuatro factores a tomar en cuenta, familiar (13,30), social (14,61), escolar (14,5) y personal (8,55) divididos en dos grupos, los de acogimiento institucional y los de apoyo institucional.

Además, se realizó la encuesta sociodemográfica para tener la información con respecto a siete aspectos. Estos resultados fueron tabulados en dos grupos, donde se concluyó que la mayoría de los adolescentes de refuerzo escolar viven en la zona urbana (56,1 %) y la mayoría de acogimiento institucional vive en la zona rural (68,4 %).

En cuanto a vivienda, los más favorecidos en tener casa propia son los de refuerzo escolar (58,3 %); la identificación étnica no difiere demasiado entre los dos grupos, pues la mayoría son mestizos; en antecedentes personales existen diferencias, debido a que el grupo de refuerzo escolar tiene mayor porcentaje en asuntos como el abuso sexual y el consumo de sustancias (73.3 %).

En los antecedentes familiares no hay gran diferencia entre los grupos, puesto que se muestran porcentajes similares en conflictos con la ley (46,4 %), consumo de sustancia (50 %) y problemas psicológicos (55,3 %), en lo que difiere es en abuso sexual que ahora, el mayor porcentaje, lo tiene el grupo de acogida. En el estado civil de los padres, el grupo con el mayor porcentaje de padres divorciados son los de acogimiento institucional (76 %).

Finalmente, la relación con los compañeros está a la par en una relación regular y mala, sin embargo, una relación buena en mayor porcentaje lo tienen los de refuerzo escolar (66,7 %). Esta información ha permitido entender que los del grupo de acogimiento institucional tienen condiciones más difíciles a sobrellevar en torno a su aspecto personal y familiar y por ello mismo la institución los acoge y les proporciona ayuda psicológica.

En cuanto al análisis estadístico se realizó una prueba de comparación de medias, a través de la prueba t student con alfa de 0,05, en donde se encontró que la significancia de todos los factores es mayor al alfa: adaptabilidad (0,641), intrapersonal (0,868), interpersonal (0,368), manejo del estrés (0,722) y estado de ánimo (0,394), concluyendo que no existe relación entre los factores de la inteligencia emocional.

De igual modo sucede con los valores de IAC: adaptación personal (0,198), familiar (0,140), escolar (0,907) y social (0,291). Por lo tanto, se cumplió el objetivo de comparar la inteligencia emocional y la adaptación conductual entre el grupo de acogimiento y el grupo de refuerzo, por lo que se rechazó la hipótesis planteada de que si existen diferencias entre los dos test (BarOn ICE:NA e IAC). Para reconfirmar la información se realizó adicionalmente otra prueba estadística, el cálculo del coeficiente de correlación de Spearman, donde no se halló una correlación significativa alta, lo que permitió entender que los dos grupos tienen características similares en su inteligencia emocional y su adaptación conductual

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Bar-On, R., Tranel, D., Denburg, N. & Bechara, A. (2003). Exploring the neurological substrate of emotional and social intelligence. Brain, 126(8), 1790-800. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/12805102/Links ]

Chan, L. & Quezada, Z. (2013). Baremos de pruebas psicológicas: niños y adolescentes. UNIFÉ. [ Links ]

Chávez, M., Contreras, O. y Velázquez, M. (2013). Adaptación y pensamiento constructivo en estudiantes universitarios. Psicogente, 16(30), 311-323. https://www.redalyc.org/pdf/4975/497552364006.pdfLinks ]

De la Cruz, V. y Cordero, A. (1981). Manual del Iac Inventario de Adaptación de Conducta. TEA Ediciones. [ Links ]

Dueñas, M. L. (2002). Importancia de la inteligencia emocional: un nuevo reto para la orientación educativa. Educación XX1, (5), 77-96. http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=70600505%0ACómoLinks ]

Extremera, N. y Fernández-Berrocal, P. (2013). Inteligencia emocional en adolescentes. Revista Padres y Maestros, 352, 34-39. https://revistas.comillas.edu/index.php/padresymaestros/article/view/1170/993Links ]

Fonseca, E., Díez, A., Enesco, C. S. & Pérez, A. (2020). Comprensión de las dificultades emocionales y conductuales y el comportamiento prosocial desde el prisma del análisis de redes. Redes: revista hispana para el análisis de redes sociales, 31(1), 19-29. https://raco.cat/index.php/Redes/article/view/371074Links ]

Gallego, D.J., Alonso, C.M., Cruz, A. y Lizama, L. (1999). Implicaciones educativas de la inteligencia emocional. U.N.E.D. [ Links ]

Goleman, D. (1995). Emotional Intelligence. Bantam Books. [ Links ]

González, R., Souto, A. & Fernández, R. (2018). Perfiles de regulación emocional y estrés académico en estudiantes de fisioterapia. European Journal of Education and Psychology, 10(2), 57. https://doi.org/10.30552/ejep.v10i2.123 [ Links ]

Hasan, A. & Zhao, W. (2018). Emotional Intelligence and Academic Achievement. Liceo Journal of Higher Education Research, 13(2), 2-21. https://doi.org/10.7828/ljher.v13i2.1056 [ Links ]

Hernández, R., Fernández, C. & Baptista, P. (2010). Metodología de la Investigación. McGraw-Hill / Interamericana Editores, S. A. [ Links ]

Hernández, R. & Mendoza, C. (2018). Metodología de la Investigación : Las rutas cuantitativa, cualitativa y mixta. McGraw-Hill Editores S. A. [ Links ]

Lechner, C. M., Knopf, T., Napolitano, C. M., Rammstedt, B., Roberts, B. W., Soto, C. J. & Spengler, M. (2022). The Behavioral, Emotional, and Social Skills Inventory (BESSI): Psychometric Properties of a German-Language Adaptation, Temporal Stabilities of the Skills, and Associations with Personality and Intelligence. Journal of Intelligence, 10(3), 1-39. https://doi.org/10.3390/jintelligence10030063 [ Links ]

López, M., Jiménez, M. & Guerrero, D. (2013). Estudio de la relación entre el bienestar personal y la adaptación de conducta en el marco de la escuela salugénica. Educar, 49/2(49), 303-320. http://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=4407597Links ]

Martínez, A., Almeida, L., Santamaría, E. & Villegas, N. (2018). Diseño de un cuestionario de habilidades de adaptación conductual para adolescentes. Psychologia, 12(1), 59-69. https://doi.org/10.21500/19002386.3049 [ Links ]

Martínez, A. & Almeida, L. (2021). Relación entre las habilidades de adaptación conductual y las dificultades emocionales y comportamentales en adolescentes. Uniandes EPISTEME Revista digital de Ciencia, Tecnología e Innovación, 8(3), 364-378. https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/8298153.pdfLinks ]

Medellín, F. (2019). La adaptación biológica: rastreando ideas en los discursos de Jean Baptite Lamarck y Charles Darwin [Tesis de maestría. Universidad Pedagógica Nacional]. Repositorio de la Universidad Pedagógica Nacional. http://repository.pedagogica.edu.co/handle/20.500.12209/10647Links ]

Morales, J. (2016). La resiliencia desde la perspectiva del trabajo social en niños, niñas y adolescentes en acogimiento institucional. Universidad de Cuenca. http://dspace.ucuenca.edu.ec/handle/123456789/23924Links ]

Nuván, I., Rivera, D., Carrillo, S., Forgiony, O., Bonilla, N. & Rozo, A. (2018). Diferencias en la calidad psicométrica de test construidos mediante la estrategia pedagógica audiovisual y las estrategias pedagógicas tradicionales. Revista Espacios, 39(25), 7-28. https://bonga.unisimon.edu.co/bitstream/handle/20.500.12442/2310/Diferencias en la calidad psicométrica.pdf?sequence=1&isAllowed=yLinks ]

Ozáez, M. T. (2015). Inteligencia emocional en educación primaria. Revista Internacional de Apoyo a La Inclusión, Logopedia, Sociedad y Multiculturalidad, 1(3), 51-60. http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=574661396005Links ]

Pallo, M. L. (2020). Análisis comparativo de la adaptación escolar en estudiantes de bachillerato que asisten a instituciones pública y privadas [Tesis de pregrado, Pontificia Universidad Católica del Ecuador sede Ambato]. Repositorio de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador sede Ambato. https://repositorio.pucesa.edu.ec/bitstream/123456789/2985/1/77161.pdfLinks ]

Paredes, K. V. (2020). Inteligencia emocional y adaptación conductual en adolescentes con riesgo de callejización [Tesis de pregrado, Pontificia Universidad Católica del Ecuador sede Ambato]. Repositorio de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador sede Ambato. https://repositorio.pucesa.edu.ec/bitstream/123456789/2957/1/77137.pdfLinks ]

Pérez, A. (2017). Estudio sobre las relaciones entre la inteligencia emocional y el rendimiento académico en alumnos de educación secundaria obligatoria [Tesis de Maestría. Universidad de Zaragoza]. Repositorio de la Universidad de Zaragoza. https://zaguan.unizar.es/record/62479/files/TAZ-TFM-2017-132.pdfLinks ]

Poulou, M. S. (2017). The Relation of Teachers’ Emotional Intelligence and Students’ Social Skills to Students’ Emotional and Behavioral Difficulties: A Study of Preschool Teachers’ Perceptions. Early Education and Development, 28(8), 996-1010. https://doi.org/10.1080/10409289.2017.1320890 [ Links ]

Ricoy, C. (2006). Contribución sobre los paradigmas de investigación. Revista del Centro Educativo, 31 (1), 11-22. [ Links ]

Saavedra, L. E. (2020). Diferencias en la prosocialidad y adaptación conductual en adolescentes vinculados y no vinculados al Movimiento Scout [Tesis de pregrado. Pontificia Universidad Católica del Ecuador sede Ambato]. Repositorio de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador sede Ambato. https://repositorio.pucesa.edu.ec/bitstream/123456789/3016/3/77188.pdfLinks ]

Saldaña, L. M. (2020). Adaptación conductual a las clases virtuales en estudiantes de secundaria de instituciones educativas de Lima metropolitana [Tesis de pregrado. Universidad San Ignacio de Loyola]. Repositorio de la Universidad San Ignacio de Loyola. https://repositorio.usil.edu.pe/server/api/core/bitstreams/4dd09c31-f0d9-4790-ae46-da4194a210d9/contentLinks ]

Ugarriza, N. & Pajares, L. (2005). La evaluación de la inteligencia emocional a través del inventario de BarOn. Persona, 8(1), 11-58. https://www.redalyc.org/pdf/1471/147112816001.pdfLinks ]

Vallejo, O. (2011). Adaptación laboral: Factor clave para el rendimiento y la satisfacción en el trabajo. Cultura, Educación y Sociedad, 2(1), 171-175. https://revistascientificas.cuc.edu.co/culturaeducacionysociedad/article/view/946Links ]

Recibido: 22 de Diciembre de 2022; Aprobado: 22 de Abril de 2023

Creative Commons License Este es un artículo publicado en acceso abierto bajo una licencia Creative Commons