SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.2 issue2CONSERVATION OF THE DOCUMENTS: CASE STUDY PIO IX CHURCH OF THE CITY OF PORTOVIEJO, PROVINCE OF MANABÍ, REPUBLIC OF ECUADOR.THE ROLE OF THE GRADUATES OF LIBRARIANSHIP IN ROCAFUERTE CANTON FROM ETHICAL ISSUES IN INFORMATION MANAGEMENT author indexsubject indexarticles search
Home Pagealphabetic serial listing  

Services on Demand

Journal

Article

Indicators

Related links

  • Have no similar articlesSimilars in SciELO

Share


Revista de Ciencias Humanísticas y Sociales (ReHuSo)

On-line version ISSN 2550-6587

ReHuSo vol.2 n.2 Portoviejo May./Aug. 2017  Epub Aug 23, 2017

https://doi.org/10.33936/rehuso.v2i2.844 

Articles

EL BIBLIOTECÓLOGO COMO AGENTE DESARROLLADOR DE LA LECTURA EN LA BIBLIOTECA PÚBLICA DE LA CIUDAD DE CHONE, ECUADOR

THE LIBRARIAN AS AGENT DEVELOPER OF READING IN THE PUBLIC LIBRARY OF THE CITY OF CHONE, ECUADOR

Kasandra V. Saldarriaga Villamil1  

Mónica V. Solórzano Ponce2  

1 Profesora de la Facultad de Ciencias Humanísticas y Sociales de la Universidad Técnica de Manabí (UTM).

2 Egresada de la Carrera de Bibliotecología de la Facultad de Ciencias Humanísticas y Sociales de la UTM.


Resumen

Esta investigación se realizó en la Biblioteca Pública del Cantón Chone. Este estudio tiene como objetivo analizar la importancia que tiene un bibliotecólogo como agente desarrollador de la lectura. Tradicionalmente, Ecuador es considerado un país con pocos lectores. La mayor parte de personas que no leen indican que no tienen interés por hacerlo. Por ello, uno de los actores implicados en la promoción de la lectura es el bibliotecólogo. Este profesional lo hace a través de un espacio activo e inclusivo para fomentar el aprendizaje. Con el propósito de conocer las características que debe tener un programa de lectura se realizaron encuestas a 40 usuarios de la Biblioteca Pública de Chone. Ellos indicaron que este tipo de programas debe incentivar al interés hacia los libros. De esta forma, el bibliotecólogo se convierte en un agente desarrollador de lectura que se requiere en la provincia y el país.

Palabras clave: Bibliotecólogo; Biblioteca; Desarrollador lectura; Usuarios

ABSTRACT

The current research was carried out in the public library of the chon Canton. This study aims to analyze the importance having a librarian as a developer of reading agent. Traditionally, Ecuador is considered a country with few readers. The majority of people who do not read indicate that they have no interest in doing so. For this reason, one of the actors involved in the promotion of reading is the librarian. This professional makes it through an active and inclusive space for learning. Surveys were conducted with the purpose of knowing the characteristics that must have a reading program 40 users of the public library of Chone. They pointed out that such programmes should encourage interest in books. In this way, the librarian becomes an agent of the developer of reading required in the province and the country

Keywords: Librarian; Library; Developer reading; Users

Introducción

Cuando se habla de desarrollar la lectura, se está dando un enfoque directamente hacia los hábitos de lectura. Este criterio se ha entendido como cualquier acción o conjunto de acciones dirigidas a acercar un individuo o comunidad a la lectura, elevándola a un nivel superior de uso y gusto. “De esta forma es asumida como una herramienta indispensable en el ejercicio pleno de la condición vital y civil” (Osorio, 2007). Es decir, el incentivo hacia el agrado o gusto por la lectura, es lo que hace llamar a una persona “agente desarrollador de lectura”.

La promoción de la lectura se enfoca directamente hacia una labor escolar para niños y niñas estudiantes de sus primeros años de básica, cuando inician sus hábitos de lectura. Sin embargo, se deja atrás la idea de que también los docentes, padres, personas jóvenes y demás pueden ser parte de este incentivo, pues con la venida de la revolución tecnológica, donde parece haberse facilitado mucho la vida de las personas, se han dejado de lado actividades que antiguamente se realizaban con normalidad, siendo una de ellas el hábito de la lectura.

Las instituciones educativas son las principales llamadas a promover planes y programas de lectura. Además pueden incluirse campañas para promocionar libros y su lectura dinámica, por medio de la promoción de la biblioteca. Por ende, el encargado de hacerlo principalmente será el bibliotecólogo. Es a él a quien corresponde ser el administrador o agente que en base al uso de técnicas y métodos adecuados logre captar hacia el mundo de las letras tanto a niños, a los jóvenes y a los adultos.

En este contexto es preciso indagar en lo siguiente: ¿El bibliotecólogo puede convertirse en agente desarrollador de la lectura? Para responder a esta pregunta se realiza un estudio en el presente trabajo en la Biblioteca Nacional de Chone-Ecuador, con la idea de tomar una muestra de lectores frente a la labor realizada por el bibliotecólogo. Para discernir si realmente puede o no ser un agente activo de desarrollo e incentivo de la lectura, en la actualidad es necesario conocer cómo se está tomando el hábito de la lectura y cómo se lo puede incentivar desde el ámbito de la biblioteca.

El objetivo que se plantea en esta investigación es el siguiente:

• Analizar la importancia de la lectura y el rol del bibliotecólogo. Además se pretende visualizar el aporte de este profesional como como agente desarrollador de la lectura en la Biblioteca Pública de Chone.

1. Metodología

Para la ejecución de este artículo se realizó un estudio de tipo descriptivo. El enfoque adoptado es mixto, porque por un lado se encontraron los métodos cuantitativos (se definió los resultados encontrados de manera estadística) y cualitativos en base al uso de entrevistas, así como de descripción de tipo detallada y análisis objetivo sobre el bibliotecólogo, la lectura y su relación en la discusión de resultados.

Por otra parte, fue una investigación de campo porque se incluyó la entrevista al bibliotecólogo de la Biblioteca Nacional de Chone. Además, con la muestra obtenida de la frecuencia diaria de personas que acuden a la biblioteca se logró constatar que el bibliotecólogo es un actor de desarrollo o de incentivo a la lectura. Para este último aspecto se desarrolló una encuesta a cuarenta usuarios.

Además se realizó un estudio descriptivo porque se obtuvo información bibliográfica obtenida de fuentes de consulta como el INEC para visualizar los porcentajes y los hábitos de lectura existentes en el Ecuador. Además se observaron diferentes concepciones sobre la lectura, su importancia y la facultad del bibliotecólogo para fomentar la misma.

2. Desarrollo

2.1. Hacia una concepción de la ética profesional

La lectura es la acción de decodificar los textos y hacerlos parte del entendimiento. Al respecto se han dado muchas concepciones con respecto a la lectura, entre las cuales constan: “La lectura es la acción de interpretar y descifrar, a través de la vista, una serie de símbolos y códigos escritos, con valor fónico. Es decir, las letras, las palabras, las frases y su conjunto”, (Peralta, 2015). Esta concepción se fundamenta en la idea de que la lectura no solo abarca la interpretación, sino que el estudiante tiene que descifrar lo que dicen las palabras o frases que se le presentan en conjunto, siendo aún un concepto muy general.

En otra instancia, “la lectura es uno de los procesos informativos, sociales e históricos más importantes que la humanidad ha generado a partir del desarrollo del lenguaje, como producto de la evolución y del trabajo, del idioma o lengua y del invento de la escritura en su configuración como organización social civilizada” (Carvajal, 2013).

La lectura tiene relación con el texto escrito, porque se liga al proceso histórico de la humanidad y como proceso de tipo informativo, asociado por un lado a los mapas o ideas mentales y, por otra, basada en la representación de sonidos articulados y estructurados.

2.2. El hábito de la lectura en el siglo XXI

Según Robledo (2011), cada texto ofrece una experiencia de vida, una experiencia profundamente humana que le permite al niño no solo divertirse sino también reconocerse, relacionarse con otros seres imaginarios, sentirse parte de un mundo que es ancho, diverso, oscuro a veces, doloroso otras, pero que tiene siempre múltiples posibilidades de ser. Por ello es necesario saber que en la actualidad se ha diversificado el mercado potencial de personas a las que se las puede incentivar para la lectura a un segmento también de gente joven y adulta.

El hábito de la lectura puede ser adquirido también en épocas posteriores, solo hace falta que exista un buen actor de desarrollo, como lo puede ser un bibliotecólogo, pues es un profesional que ha dejado de ser un simple actor pasivo para convertirse en un maestro, guía, pedagogo y actor de la información. Se parte de la idea de que el conocimiento solo se logre con lectura, para que quien lea genere y establezca sus propias opiniones, criterios y deducciones sobre lo aprendido (adquirido) y sobre lo que puede aportar por su cuenta para formar nuevos y cada vez más variadas formas de conocimiento.

Entre las principales competencias que se puede lograr principalmente en los niños de primaria constan:

Tabla 1: Competencias que se adquieren con la lectura 

Elaboración: autoras de la investigación

2.2.1. Nuevo panorama de la biblioteca actual

Antiguamente la biblioteca era considerada únicamente un espacio de conjunto de libros nuevos y antiguos de diversas ciencias y saberes. Desde la perspectiva de Alberco (2004), la biblioteca ya no es considerada como un repositorio de libros en la que el bibliotecario espera tranquilo a que los usuarios se acerquen a él, es un ambiente apropiado para la lectura en el que se encuentran los materiales didácticos y recreativos para los niños. En este espacio el bibliotecólogo se encarga estimular y fomentar la lectura, porque esa es su misión para con la sociedad.

Se plantea un nuevo enfoque hacia el ambiente de la biblioteca, pues aunque no ha dejado de ser ese espacio de interacción entre el lector y los libros, hoy se ha vuelto más dinámica, ya que se puede encontrar materiales de acuerdo a la edad, incluso los niños pueden mantener el acceso a libros para sus intereses como cuentos, fábulas, y otros medios divertidos de entretenimiento. El bibliotecólogo tiene la misión de estimular la lectura como agente directo de la información y debe estar comprometido también con la sociedad.

2.2.3. Desarrollo de la lectura en el Ecuador

Ecuador es uno de los países latinoamericanos que menos lectores posee. De acuerdo con las estadísticas proporcionadas por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC):

El 52% de ecuatorianos leen un promedio de una o dos horas a la semana y apenas un libro por año. Las cifras mencionan también que el 57% de los ecuatorianos consideran a la lectura como una actividad aburrida y poco interesante, mientras que el 32% de la población no lee por falta de tiempo. Guayaquil y Ambato son las ciudades que tienen más lectores con un 77%, seguidas de Machala con un 76% y Quito con el 70% (Instituto Nacional de Estadísticas y Censos, 2012).

Lo anterior lleva a replantearse que se requiere realmente un incentivo mayor para la necesidad de afianzar la lectura. En este contexto, los bibliotecólogos están llamados a crear un espacio abierto de incentivo a la lectura, basados en su experiencia que debería ser transmitida a las actuales y futuras generaciones.

Debido al surgimiento de cada vez nuevas y más variadas tecnologías de la información, realizar una tarea escolar se ha vuelto tan sencillo como acceder al internet de un computador de escritorio o portátil, ingresar al buscador y reconocer la palabra de la que se busca, para acceder a un sinfín de información sobre la mayor parte de temáticas. Estas prácticas propician que la lectura quede un tanto apartada por este mal hábito de inclinarse por hacer lo que se conoce “un copy-page”, de textos de internet.

Con el fin de adentrarse un poco más hacia los resultados que han sido dados en el Ecuador, según sus hábitos de lectura, se hace mención al informe dado por el INEC (Instituto de Estadísticas y Censos del Ecuador), con respecto a los hábitos de lectura, realizado en octubre del 2012.

2.3. Bibliotecólogo como agente desarrollador de la lectura

Es necesario saber que el bibliotecólogo tiene una formación como agente profesional de la clasificación, recolección y organización de la información. No obstante, debido a la problemática de la falta de lectura, se puede ver en este profesional a un actor indispensable para promocionar la lectura.

Caber recalcar que el lector debe tener una interpretación correcta de lo que ha leído, para ello requiere de competencias. Según Naranjo (2014), estas competencias son: concentración, reflexión, comparación, observación, memorización, imaginación, capacidad de análisis y relación que le permitan aportar al texto sus experiencias previas, objetivos e ideas, de acuerdo con los intereses y necesidades que orienten la actividad.

Cabe mencionar además que la biblioteca, al igual que el hogar y la institución académica, son entidades que permiten el desarrollo político, económico, de tipo cultural, asociados con las buenas prácticas y mucho más a lo que respecta la lectura, como un hábito adquirido.

Quien lee ya sea una obra, un periódico, revista o cualquier medio escrito, debe estar entusiasmado sobre todo por llenar su vació de conocimiento, puesto que al utilizar cualquiera de estos medios de información le permitirá ampliar sus saberes. De acuerdo con Naranjo (2010), se parte de la idea de que en las unidades de información se llevan a cabo procesos para ordenar la información desde la selección, adquisición y organización física de los recursos, hasta el diseño de programas de formación para que se puedan hacer uso completo de los servicios.

La promoción de la lectura puede ser definido dentro de un nivel macro, porque se caracteriza por el conjunto de acciones que se pueden realizar para hacer que una sociedad se incentive por la lectura.

El bibliotecólogo entonces debe adaptar un programa inclusivo que le permita potencializar, fomentar y despertar el gusto por la lectura, según el tipo o nivel de área de conocimiento afín con la persona que realiza la investigación. Es preciso detallar los programas de formación de usuarios que deberían incluir los bibliotecólogos como agentes de desarrollo de la lectura y puedan aplicar las siguientes estrategias:

1) Debe mantener la importancia de aplicar métodos innovadores de enseñanza aprendizaje, para que los lectores puedan tener acceso a la construcción de su propio conocimiento. Esto hace alusión a un método pedagógico de tipo constructivista, el cual apunta a que el lector es el dueño de su propio conocimiento, él puede manipularlo cómo requiera.

2) Debe tener una formación en la que maneje recursos de tipo bibliográfico para el desarrollo de habilidades que hagan a los usuarios autónomos. Debido al avance tecnológico un usuario puede investigar dentro de los programas informáticos de biblioteca el libro que requiere. La labor del bibliotecólogo va más allá de la búsqueda y selección de libros, porque se lo podría llamar “el docente de la información” (Acero, 2012).

3) Saber que el bibliotecólogo tiene una responsabilidad social, ya que el uso de la información y su documentación tiene que ayudar y contribuir al desarrollo, sobre todo en el caso del Ecuador donde como se vio anteriormente existe muy poco interés por la lectura. De ello dependerá la sostenibilidad de las siguientes generaciones.

En base a lo anterior, el bibliotecólogo es el agente desarrollador de la lectura, donde se marca el inicio de un cambio de paradigmas culturales acomodados solo a lo que “dicen que sucede” para convertir a la sociedad ecuatoriana en agentes de cambio quienes argumentan su criterio en base a lo que leen y a su análisis propio.

Resultados de la entrevista al bibliotecólogo de la Biblioteca Nacional de Chone, y encuesta realizada a la muestra de personas que asisten a la misma

2.4. Entrevista aplicada al bibliotecólogo de la Biblioteca Pública de la ciudad de Chone, Ecuador

1) ¿Cree usted que el bibliotecólogo además de proporcionar libros, también ofrece un aporte como agente de la lectura? ¿Por qué?

Sí, porque debe proporcionar libros y brindar información para que el estudiante tenga todo el conocimiento y facultad para el aprendizaje.

2) ¿Piensa usted que un bibliotecólogo debe incentivarse por sí mismo a la lectura?

Sí, porque además de aprender más es el encargado de motivar al educando en el hábito de la lectura a través de actividades dinámicas y recreativas.

3) ¿Cómo un bibliotecólogo se puede convertir de una persona que proporciona libros en un verdadero agente de desarrollo de lectura?

Cuando no encuentre los libros el estudiante es necesario que busque estrategias, pero además lo ayude a fomentar en él la lectura y el interés por un determinado texto.

4) ¿Usted es un bibliotecólogo agente desarrollador de la lectura?

Sí, porque el rol de un bibliotecario es promover e incentivar a la lectura que mucha falta hace en la sociedad, además es el llamado a hacer que las bibliotecas se conviertan en un entorno motivador para la búsqueda de información.

2.4.1. Conclusión de la entrevista

El bibliotecólogo, Licenciado Raúl Ortiz, ha señalado que se requiere que se le encargue la tarea de promocionar la lectura en un ambiente dinámico, no solo enfocado a la búsqueda y el hallazgo de libros, sino que con esta actividad se convierta en un motivador constante al utilizar diversas estrategias.

2.5. Encuesta aplicada a 40 personas que asistieron a la Biblioteca Pública de Chone

Elaboración: autoras de la investigación

Gráfico 1 Segmento de Personas que Acuden a la Biblioteca 

Se observa que el 55% de personas que acuden a la biblioteca son jóvenes, por lo general estudiantes que requieren hacer consultas; el 37% son adultos, mientras que 5% son niños y el 3% discapacitados; la mayor parte de público de la Biblioteca Nacional de Chone es público joven.

Elaboración: autoras de la investigación

Gráfico 2 Consideración de Programa de Lectura siendo agente el bibliotecólogo 

El 90% de los encuestados indicaron que consideran que debe darse un programa de lectura por parte del bibliotecólogo como agente desarrollador, mientras que el otro 10% dice que no.

Elaboración: autoras de la investigación

Gráfico 3 Tipo de lectura que debe contener el programa de lectura 

El 48% de usuarios de la Biblioteca Nacional de Chone indicó que preferiría que el tipo de lectura que contenga el programa de desarrollo de lectura sea de todos los ámbitos del conocimiento, mientras que con la alternativa “lectura científica” está de acuerdo el 18% de los consultados, la opción “literatura” fue señalada por el 17%, lectura social el 10% y la lectura histórica el 7%.

Elaboración: autoras de la investigación

Gráfico 4 Alternativas de incentivo de lectura 

El 43% de los encuestados dijeron que las alternativas de incentivo de lectura serían la diversión, información, resolución de preguntas, tiempo libre. El 20% dijo que el incentivo debería ser la información, mientras que el 15% dijo que la lectura sería para la resolución de preguntas planteadas ya sea en el ámbito social o académico, el 12% dijo que la alternativa de incentivo para la lectura sería la diversión y el 10% dijo que sería factible solo ocupar su tiempo libre.

La mayor parte de encuestados indican que la alternativa para incentivar la lectura estaría en proponer un programa de diversión, informativo, de resolución de preguntas y que ocupe el tiempo libre de las personas. Es decir, en todos los ámbitos.

3. Conclusiones

Tanto el bibliotecólogo (en la entrevista realizada) como el usuario de la biblioteca (en las encuestas) estuvieron de acuerdo en que este tipo de profesional es el agente fundamental encargado de incentivar el desarrollo de la lectura. Esto se puede realizar volviendo a la biblioteca en un entorno dinámico, que se adapte a las necesidades de búsqueda de información de los usuarios. Además se debe brindar un valor agregado como la necesidad de fomentar programas de incentivo por la lectura de todas las áreas del conocimiento.

A su vez, dicho programa no puede excluir a ningún segmento de personas, pues debe integrar métodos de incentivo tanto para niños, jóvenes, adultos y personas con discapacidad. Este espacio debe incluir cada vez a más usuarios hacia el uso de la lectura, no como medio solo de satisfacción de preguntas académicas y trabajos enviados por docentes en los diferentes niveles educativos, sino también como parte del desarrollo sustentable de los pueblos.

El bibliotecólogo es necesariamente un agente desarrollador de la lectura, ya que pasó de ser un ente pasivo que solo ayudaba a la selección de libros y clasificación de los textos en la biblioteca, para convertirse entre otras cosas en “el docente informativo” como se lo describe en el presente trabajo. Además es necesario potencializar su rol protagónico de asesor y guía de información. Para ello es recomendable que se establezca un programa de lectura que puede ser llevado a cabo gracias al incentivo por aumentar el interés de los usuarios que asisten a la Biblioteca Nacional de Chone

Referencias Bibliográficas

Acero, E. (2012). La evaluación integral: una propuesta de enfoque en aras de la Excelencia. Bogotá: Libros y Libres [ Links ]

Alberco, V. (2004). Escribir, una competencia comunicativa. Lima: Alfa [ Links ]

Cárdenas, A. (2012). La biblioteca, modelo de lecturas. México DF:Universidad Autónoma de México [ Links ]

Carvajal, L. (2013). La lectura y sus aprendizajes. Lima: Omega. [ Links ]

Instituto Nacional de Estadísticas y Censos. (2012). Informe de hábitos de Lectura. Quito. [ Links ]

Naranjo, E. (2010). Formación de usuarios de la información y procesos formativos. México DF: Ideas. [ Links ]

Naranjo, E. (2014). Bases pedagógicas del bibliotecólogo. Bogotá: Alfaguara. [ Links ]

Osorio, Y. (2007). La promoción de la lectura. Bogotá: Comfenalco. [ Links ]

Peralta, M. (2015). ¿Qué es la lectura y cuáles son sus funciones? Madrid: Arcos. [ Links ]

Robledo, J. (2014). La experiencia de leer. Barcelona: Seix [ Links ]

Recibido: 25 de Junio de 2017; Aprobado: 30 de Julio de 2017

Creative Commons License Este es un artículo publicado en acceso abierto bajo una licencia Creative Commons