1. Introducción
Alteraciones biológicas en el metabolismo, sistema inmunitario y funciones intestinales ocurren durante e inmediatamente después del destete y pueden tener efectos tanto a corto como a largo plazo en el crecimiento y la salud posteriores del lechón, independientemente de la edad a la que se realice el destete. Es fundamental que los porcicultores utilicen estrategias adecuadas de salud, nutrición y manejo para minimizar los efectos adversos del estrés del destete y mejorar el rendimiento productivo hasta llegar al peso de mercado (Campbell et al., 2013). Durante el período posterior al destete, la expresión de proteínas relacionadas con diversos procesos metabólicos o biológicos celulares, como el metabolismo energético, la glicosilación de aminoácidos de las proteínas, el transporte de iones, la vía de señalización mTOR, así como la diferenciación y la apoptosis, se reducen en las células epiteliales yeyunales (células superiores de las vellosidades) de lechones (Wu et al., 2017; Yang et al., 2016a, 2016b). Además, el metabolismo de las poliaminas y la expresión de la ornitina descarboxilasa también se vieron alterados por el destete y pueden utilizarse como marcador del crecimiento intestinal y la restitución en cerdos (Wang et al., 2016). El estrés del destete genera una reducción en el consumo de alimento, por tanto, en la ingesta de proteínas y aminoácidos. Estudios demuestran niveles bajos de aminoácidos ramificados en suero de lechones destetados. Al no cubrir los requerimientos nutricionales a partir de la dieta, se da un catabolismo de los aminoácidos desde la reserva muscular (Yin et al., 2020). Los aminoácidos de cadena ramificada (AACR) se utilizan como fuentes principales de energía en las células musculares. La actividad metabólica global en el músculo durante la fase posabsortiva es la destrucción de los AACR y la formación de alanina. La alanina formada es liberada desde las células musculares a la sangre, desde la cual puede ser captada por el hígado para la gluconeogenia (Cunningham y Klein, 2014). Lo mencionado anteriormente demuestra que el destete es una fase crítica que hace uso de los aminoácidos corporales disminuyendo la síntesis proteica, el crecimiento muscular y, por lo tanto, el rendimiento productivo en lechones y la rentabilidad para el productor. El objetivo del presente estudio fue evaluar el efecto de la suplementación alimenticia de AACR en lechones destetados mediante la medición del rendimiento productivo y pruebas bioquímicas en sangre.
2. Materiales y Métodos
El presente trabajo de investigación se realizó en el módulo porcino del Centro Experimental Uyumbicho (CEU) perteneciente a la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Central del Ecuador. Se utilizaron 16 lechones Landrace x Yorkshire x Pietrain x Duroc destetados a los 28 días de edad, los que se asignaron al azar en cuatro tratamientos mediante un diseño completamente al azar, con cuatro repeticiones por tratamiento. La Fase 1 del programa de alimentación (1-27 días de edad) la recibieron todos los lechones antes del destete. Los tratamientos se aplicaron en la Fase 2 del programa de alimentación (28-49 días)
Los cuatro tratamientos fueron: T1 = testigo 1 (sin suplemento lácteo), T2 = testigo 2 (suplemento lácteo), T3 = suplemento lácteo + AACR (0,5%), T4 = suplemento lácteo + AACR (1%). El suplemento lácteo con o sin AACR fue administrado por un período de 7 días (28 hasta los 34 días de edad). Los lechones fueron nutridos con un alimento comercial cuya composición se muestra en la Tabla 1.
El rendimiento productivo (ganancia diaria de peso, consumo de alimento y conversión alimenticia) se midieron a los 34 y 41 días de edad. Las pruebas bioquímicas en sangre: creatina cinasa (CK) (por método enzimático), urea (por método GLDH, método completamente enzimático para determinaciones cinéticas de urea), lactato deshidrogenasa (LDH) (por química seca Fujifilm), creatinina (por Reacción Jaffé, prueba fotomérica colorimétrica para mediciones cinéticas de creatinina, método sin desproteinización) y albúmina (por prueba fotométrica colorimétrica para albúmina. Método BCG) se midieron a los 41 días, de acuerdo con lo indicado por HUMAN Gesellschatt Fur Biochemica and Diagnostica mbH (2008). El análisis estadístico se realizó mediante PROC GLM y la prueba de Tukey (en caso de diferencia de medias) en el sistema SAS versión 9.0. El modelo estadístico fue el presentado en la ecuación [1].
Donde:
3. Resultados
En la Tabla 2 se muestra el rendimiento productivo en lechones, medido a los 34 días de edad. En ninguna de las variables evaluadas se encontró diferencia significativa. Los lechones del grupo testigo presentaron una ganancia diaria de peso (GDP) de 264,29 g día-1 y una conversión alimenticia (CA) de 1,17 g g-1. Los lechones que recibieron los AACR al 1% mostraron una GDP de 235,71 g día-1 y una CA de 1,36 g g-1.
En la Tabla 3 se muestra el resultado de las variables productivas medidas a los 41 días de edad. Se puede observar la tendencia del grupo testigo a presentar la mayor GDP (310,71 g día-1) y la CA más baja (1,75 g g-1), similar a lo reportado para los 34 días de edad. El segundo lugar fue ocupado por el grupo testigo 2 (sustituto lácteo sin AACR) con 303,93 g día-1 y 1,97 g g-1, datos de GDP y CA, respectivamente.
En la Tabla 4 se presentan los resultados obtenidos de la bioquímica sanguínea, si bien no hubo diferencia significativa se aprecia que los lechones del grupo testigo 1 presentaron los valores más altos en las variables LDH-P (694,50 UL), creatinina (231 uMol L-1) y albúmina (41,35 g dl-1). El tratamiento de AACR al 0,5% presentó el valor más elevado de CK (2783,25 UL). Mientras que el nivel de 1% mostró el valor más alto de urea (2,95 mMol L-1).
4. Discusión
Se ha encontrado que los requerimientos de los aminoácidos ramificados son altos en lechones en crecimiento debido a la necesidad de síntesis de proteína (Wu et al., 2013). En el presente trabajo no se encontró diferencias significativas en el rendimiento productivo entre los lechones de los diferentes tratamientos. Los lechones que fueron suplementados con AACR tanto al 0,5 y 1% (medición día 41), fueron menos eficientes en transformar los nutrientes de la dieta en tejidos corporales a pesar de recibir un mayor nivel de AACR en su ración. Este efecto probablemente se deba a que el nivel de aminoácidos ramificados utilizado en el suplemento generó un bloqueo en la absorción del resto de aminoácidos provenientes del alimento (National Research Council, 2012), ello explicaría la menor ganancia de peso en los lechones y valores de CA más elevados. Los resultados de este trabajo no concuerdan con aquellos en los cuales la suplementación de leucina y valina si favoreció la síntesis de proteína muscular y el crecimiento en lechones (Murgas Torrazza et al., 2010; Suryawan et al., 2012; Yin et al., 2010). La leucina es el AA individual más eficaz para promover la síntesis de proteínas musculares a través de la actividad estimulante de la vía de la rapamicina en mamíferos (mTOR), la adición de leucina en dietas reducidas en el contenido de proteína cruda para regular el crecimiento animal ha sido el foco de muchos estudios previos (Escobar et al., 2005, 2006).
Ren et al. (2015) encontraron que la suplementación de L-isoleucina (0,19%), L-valina (0,27%) y L-leucina (0,07%) mejoró el desempeño productivo en lechones al destete frente a una dieta con el mismo nivel de proteína cruda. De manera similar, en dietas bajas en proteína la suplementación de AACR: L-isoleucina (0,19%), L-leucina (0,10%) y L-valina (0,34%) mejoró el rendimiento productivo al compararlo frente a dietas bajas en proteína sin suplementación de AACR. Encontrándose valores similares a los lechones que recibieron una dieta con niveles normales de proteína cruda (Zhang et al., 2013). El consumo diario de alimento fue mayor en el grupo suplementado con AACR a los 34 (291,32 g día-1) y 41 días de edad (589,29 g día-1). Estos resultados concuerdan con los encontrados en la investigación de Zheng et al. (2016) en la cual la suplementación de AACR; L-isoleucina (0,17%), L-leucina (0,24%) y L-valina (0,16%) demostró restablecer el consumo de alimento en lechones al destete luego de recibir una dieta deficiente en estos aminoácidos y favoreció el desarrollo muscular. Estudios previos demuestran que el balance de AACR tras su suplementación dietaria mantiene la reserva de AACR en suero, lo que mejoró el rendimiento productivo en lechones con restricción de proteína. Los balances de leucina, valina e isoleucina aumentaron las concentraciones séricas de AACR, respectivamente. Leucina y valina, pero no isoleucina, mejoraron la ingesta de alimento y la ganancia de peso en lechones con restricción proteica (Yin et al., 2020). Cabe recalcar que en el presente estudio el nivel de proteína cruda 21% (mínimo) recibida por los lechones fue similar para los 4 grupos ya que se utilizó una dieta comercial.
Respecto a las variables bioquímicas, al no encontrarse diferencias entre los grupos y al estar dentro del rango considerado como normal, hace suponer que a la edad de 28 días el impacto del destete es menor en los lechones o que la medición de estas debe realizarse de manera más temprana. En los trabajos de Murgas Torrazza et al. (2010) y Suryawan et al. (2012) el destete se realizó a los 5 días de edad. En los demás estudios el destete se realiza entre los 21 y 28 días (Ren et al., 2015; Yin et al., 2010; Zhang et al., 2013; Zheng et al., 2016). Para todos los trabajos el nivel de proteína cruda en la dieta fue inferior al requerido para esa etapa. Mientras más temprano se realiza el destete mayor es el descenso en el consumo de alimento e inicia un estado de catabolismo. La proteína muscular es utilizada como fuente de energía, deteriorándose el desarrollo muscular del lechón, con alteración de las variables sanguíneas analizadas (Pluske et al., 1997, 2018)
5. Conclusión
La suplementación de AACR no mejoró el rendimiento productivo ni las variables bioquímicas en lechones destetados a los 28 días tras 7 días de administración.
Contribuciones de los autores
Jorge Luis Paillacho Cabrera: curación de datos, investigación, recursos, redacción – borrador original.
José Manuel More Montoya: curación de datos, análisis formal, metodología, software, visualización.
Eduardo Fabian Aragón Vásquez: conceptualización, metodología, supervisión, validación, redacción – borrador original, redacción – revisión y edición.
Renan Patricio Mena Pérez: conceptualización, adquisición de fondos, metodología, recursos, redacción – borrador original, redacción – revisión y edición.
Jimmy Rolando Quisirumbay Gaibor: conceptualización, adquisición de fondos, investigación, metodología, administración del proyecto, supervisión, redacción – borrador original, redacción – revisión y edición.