Estimada editora:

He leído con interés la reciente carta al editor de Rodríguez-Morales y colaboradores ⁽¹⁾, donde se hace una análisis de la situación actual en cuanto a producción de artículos científicos en América Latina. Se detalla la notable mejoría en la producción centífica de Ecuador y otros países vecinos en los últimos años. Sin embargo, se destaca acertadamente la dificultad que supone la escasez de revistas científicas indexadas en bases de datos como Scopus a la hora de aumentar la producción científica en nuestros países. Este problema que los autores identifican como endémico de nuestra región, es particularmente acuciante para Ecuador, hasta el punto que resulta ciertamentamente sorprendente el enorme incremento en la producción de artículos científicos que destacan Rodríguez-Morales y colaboradores ⁽¹⁾, a la luz de los datos que a continuación detallaré.

Si tomamos como referencia la base de datos Scimago/Scopus para clasificar los países de América Latina en base a su producción científica, se obtienen los siguientes resultados para los 10 primeros clasificados (entre paréntesis se indica el número de documentos indexados): 1. Brasil (938.352); 2. México (318.095); 3. Argentina (209.294); 4. Chile (147.389); 5. Colombia (99.301); 6. Venezuela (40.072); 7. Cuba (39.570); 8. Perú (25.175); 9. Uruguay (19.229); 10. Ecuador (18.795).

Tomando nuevamente la base de datos Scimago/Scopus, podemos clasificar nuevamente a los países de América Latina en base al número de revistas indexadas en Scopus con que cuentan, siendo los 10 primeros clasificados los siguientes (entre paréntesis se indica el número de revistas indexadas): 1. Brasil (378); 2. México (114); 3. Chile (102); 4. Colombia (99); 5. Argentina (64); 6. Venezuela (39); 7. Cuba (25); 8. Perú (9); 9. Ecuador (2); 10. Uruguay (1).

Comparando ambas clasificaciones se observa que hay una correlación positiva entre el número de artículos científicos indexados en Scopus en un país y el número de revistas indexadas con que ese país cuenta, con alguna excepción a esta norma como Argentina, que es tercero en producción pese a ser quinto en número de revistas. Sin embargo, es particularmente llamativo el caso de Ecuador, donde sólo existen 2 revistas indexadas en Scopus (una de ellas la Revista Ecuatoriana de Neurología) del total de 848 revistas indexadas en dicha base en América Latina. Si se observan los dos seriales expuestos en los párrafos anteriores, la producción de artículos de Ecuador es cercana al 20 % de la de Colombia, 50% de la de Venezuela o Cuba y 75% de la de Perú. Por el contrario, Ecuador cuenta con un 2%, 5%, 8% y 25% de revistas indexadas en Scopus comparado con Colombia, Venezuela, Cuba y Perú, respectivamente. En definitiva, existe un enorme desfase entre la producción de artículos y el número de revistas indexadas en Ecuador.

La existencia de revistas indexadas en bases de datos internacionales como Scopus en un país determinado permite no sólo la publicación en la lengua materna de los autores, sino además que puedan ser publicados resultados de un interés regional y no necesariamente global. En definitiva, supone un catalizador de la producción científica de calidad en el país que a nivel global es frecuentemente evaluada tomando como referencia dichas bases de datos (muchos de los rankings mundiales de universidades toman como referencia estas bases de datos como Scopus para medir la producción científica de una universidad).

Como bien indican Rodríguez-Morales y colaboradores, el aumento de la producción de artículos científicos indexados en Scopus en Ecuador ha sido espectacular en los últimos años ⁽¹⁾. Si embargo, mantenemos como asignatura pendiente la generación de un número de revistas nacionales indexadas en Scopus acorde con nuestra producción. Si la comunidad científica ecuatoriana ha conseguido notables mejoras en producción con este handicap, sólo cabe esperar que se alcancen cotas aún más extraordinarias con el aumento del número de revistas científicas nacionales indexadas. Este debe ser un esfuerzo colectivo de universidades, centros de investigación, hospitales, colegios profesionales y la academia ecuatoriana en general. La Revista Ecuatoriana de Neurología ha sabido ser pionera en este ámbito, demostrando que puede haber revistas científicas ecuatorianas de calidad internacional.