Introducción
Desde siempre, los seres humanos hemos sentido un enorme interÈs por explicar cÛmo se producen nuestras habilidades mentales, como lo es la capacidad para hablar, entender lo que escuchamos, realizar movimientos complejos, percibir los diferentes estÌmulos del mundo que nos rodea, sentir empatÌa, ser solidarios, poder escribir, leer y dem·s habilidades humanas que nos han convertido en los seres vivos m·s desarrollados en la naturaleza.
Esta b˙squeda de respuestas ha pasado por varias etapas en la humanidad, como por ejemplo, cuando humanos primitivos comÌan el cerebro de otros bajo la creencia de que con este acto, se apoderarÌan de las habilidades mentales del ex dueÒo de esa materia gris o las creencias m·gicas, de que las capacidades intelectuales se originaban en la divinidad.
Toda la perspectiva sobre el papel del cerebro cambiÛ con los hallazgos de Broca y Wernicke, alrededor de 1860, ya que sus aportes revolucionaron la comprensiÛn de los procesos mentales humanos y por primera vez se consideraba al cerebro como el Ûrgano base para la actividad mental, lo que realmente generÛ el gran avance de la neurociencia.
Actualmente, el interÈs se ha centrado en entender quÈ sucede en el cerebro en su estado normal y patolÛgico, para lo cual, existen varios mecanismos de evaluaciÛn neuropsicolÛgica, como lo son, los test de laboratorio, que han sido creados para evaluar de forma especÌfica las funciones cerebrales, los test de evaluaciÛn en otras ·reas con un gran aporte clÌnico y las pruebas de evaluaciÛn diferida, que se basan en escalas de graduaciÛn de conductas implicadas en la vida diaria. Otro aspecto de interÈs en el estudio del cerebro humano, es el proceso que se sigue en la rehabilitaciÛn neuropsicolÛgica de funciones cerebrales daÒadas, en donde existen los procesos de restauraciÛn, compensaciÛn, sustituciÛn, activaciÛn-estimulaciÛn e integraciÛn.
Dentro del contexto planteado, surge la propuesta del presente artÌculo, en donde se tiene como objetivo explicar los aspectos esenciales de la neuropsicologÌa, profundizando en el desarrollo histÛrico del cerebro, la evaluaciÛn neuropsicolÛgica y la rehabilitaciÛn de las funciones cerebrales.
Datos histÛricos en el estudio del cerebro
Si bien, se creerÌa que el estudio del cerebro humano es reciente o desde el gran avance de las tÈcnicas de neuro-imagen que emergieron desde el siglo pasado, el interÈs por comprender quÈ sucede dentro de la cavidad craneana del ser humano se remonta siglos atr·s, en donde se evidenciaron ciertas pr·cticas que permiten comprender un primer acercamiento en la relaciÛn entre el cerebro, la cogniciÛn y el comportamiento del ser humano.
Uno de los primeros acontecimientos, fueron las pr·cticas de trepanaciÛn, que consistÌa en cortar, raspar, cincelar o perforar la pieza de hueso del cr·neo, con la finalidad de aliviar la presiÛn relacionada con la hinchazÛn que genera un edema cerebral. Un gran n˙mero de casos perdÌa la vida durante o despuÈs de la intervenciÛn quir˙rgica (Figura 1), sin embargo, tambiÈn existÌan sujetos que sobrevivÌan y en sus cuerpos se observaban signos de recuperaciÛn y en muchos de estos casos, se volvÌa a practicar la trepanaciÛn hasta lograr una "curaciÛn" definitiva a los problemas de la conducta o de dolor que presentaban los humanos cientos de aÒos atr·s(1).
Otras acciones que ya daban luces a los seres humanos sobre el papel del cerebro en los procesos mentales, se evidenciaron en ritos canibalÌsticos en donde tribus se alimentaban de cerebros de personas altamente intelectuales o con grandes habilidades, con la esperanza de apropiarse de las capacidades del ex dueÒo de la materia gris ingerida.
Posteriormente, HipÛcrates, el padre de la medicina, alrededor de 400 aÒos antes de Cristo, describiÛ dos tipos de alteraciones del lenguaje producto de un daÒo en el cerebro humano: (a) sujetos carentes de una adecuada sonoridad de la producciÛn del habla, a quienes denomino ¡fonos y (b) sujetos con dificultades en la elocuencia del lenguaje, a quienes denominÛ Anaudos (2).
A pesar de estos eventos que hacÌan suponer la importancia del rol del cerebro en la cogniciÛn y el comportamiento humano, no siempre fue asÌ. Durante un largo tiempo de la humanidad se creÌa que la inteligencia era de origen divino o de fuerzas externas al ser humano. Tal es el caso, que durante una Època, alrededor de 150 aÒos atr·s, se consideraba a la epilepsia como un estado en el cual, el mismÌsimo demonio poseÌa el cuerpo del individuo que presentaba una crisis epilÈptica(3).
Un intento por superar la teorÌa divina como explicaciÛn de las funciones mentales de los seres humanos, fue la escuela del localizacionismo, que consistÌa en el saber propuesto por Galeno, quien afirmaba que la actividad mental se producÌa en el encÈfalo, mediante la interacciÛn de diversos elementos, y cuando existÌa alg˙n daÒo cerebral, el ser humano perdÌa alguna de las funciones que eran producidas por dicha zona del cerebro. A esta etapa de la historia humana se la conociÛ como la frenologÌa, siendo Franz Gall (1758-1828) su m·ximo exponente y su mayor fundamento, el que la actividad mental se producÌa por 27 zonas localizadas (Figura 2) a lo largo del encÈfalo del ser humano(4).
Sin duda, uno de los acontecimientos m·s importantes y que abriÛ las puertas al desarrollo de las neurociencias, es la sistematizaciÛn del caso "tan, tan" reportado por el gran Paul Broca en 1861, quien demostrÛ que una de las funciones cognitivas del ser humano son producidas por el cerebro, especÌficamente, describiÛ que la capacidad de articulaciÛn de la palabra es producida por la tercera circunvoluciÛn del lÛbulo frontal izquierdo, a lo que actualmente y en su honor, denominamos como Afasia de Broca(5).
Posterior al hallazgo de Broca, en 1874 Carl Wernicke aportÛ al avance de la neurociencia, al afirmar que otra de las grandes funciones del lenguaje se encuentran en el cerebro humano, especÌficamente, identificÛ que la comprensiÛn verbal es una funciÛn del lÛbulo temporal izquierdo(6).
Tanto el acierto de Broca como de Wernicke (Figura 3), hacen caer en cuenta que la cogniciÛn del ser humano es producto del funcionamiento de un Ûrgano, un sustrato biolÛgico que a los individuos nos permite pensar, sentir, reflexionar, recordar, respetar, comunicar; en fin, ser todo lo que comprendemos como ser humano, al igual que el resto de Ûrganos del cuerpo permiten otras funciones, por ejemplo, la respiraciÛn es producto de los pulmones, la frecuencia cardiaca del corazÛn y dem·s; por tanto, la cogniciÛn, subjetividad, emociones, sentimientos, narrativas, regulaciÛn comportamental y dem·s, es producto de un Ûrgano, el cerebro(7).
Siguiendo con este recorrido histÛrico del desarrollo de la neurociencia, debemos resaltar el trabajo realizado por un hombre conocido como el padre de la neuropsicologÌa, Alexander Romanovich Luria, quien -producto del estudio sobre las funciones cerebrales en pacientes atendidos en la segunda guerra mundial- desarrollÛ un modelo teÛrico que explica la organizaciÛn cerebral y su relaciÛn con las fuerzas culturales y ambientales(8).
Con la propuesta de Luria(12) se supera el localizacionismo de las funciones cerebrales y se avance a una comprensiÛn del funcionamiento cerebral como producto de la interacciÛn de diversas unidades funcionales, que permiten al ser humano la actividad mental y comportamental. Desde la perspectiva de este autor, el cerebro se configura en tres unidades funcionales, donde la primera se encarga de regular el tono cortical y la vigilia; la segunda de recibir, procesar y almacenar la informaciÛn; y la tercera unidad funcional, que se encarga de la planificaciÛn, ejecuciÛn y verificaciÛn de la actividad cognitiva y conductual (Figura 4).
Finalmente, al dÌa de hoy el gran avance de la neuro-imagen, ha determinado una verdadera revoluciÛn en lo que respecta al estudio del funcionamiento cerebral del ser humano, en donde, tÈcnicas como la magneto-encefalografÌa, el electroencefalograma, la resonancia magnÈtica funcional y otras, permiten analizar el funcionamiento neuronal del cerebro en las determinadas actividades que es capaz de realizar un ser humano(2)(9).
La evaluaciÛn neuropsicolÛgica de las funciones cerebrales
Las funciones cerebrales de interÈs en la neuropsicologÌa son el lenguaje, atenciÛn, memoria, sistemas perceptivos, funciones ejecutivas y las praxias en el contexto de desarrollo normal y en el daÒo cerebral adquirido.
Antes de mencionar los procesos de evaluaciÛn neuropsicolÛgica, es indispensable mencionar la descripciÛn realizada por el gran Antonio Damasio(15), quien presentÛ el caso de un paciente con daÒo cerebral adquirido que en la evaluaciÛn neuropsicolÛgica, dentro de su laboratorio, realizaba de manera exitosa todos los test experimentales que evaluaban sus funciones neuropsicolÛgicas, es decir, -en teorÌa- el paciente de Damasio no presentaba mayor dificultad en su funcionamiento cerebral, sin embargo, en la vida real era realmente un fracaso.
Este caso, que no es aislado y sucede a menudo en la consulta clÌnica neuropsicolÛgica, ha generado el desarrollo de varias estrategias metodolÛgicas para la evaluaciÛn de las funciones cerebrales. En tal sentido, GarcÌa-GÛmez(16) propone tres estrategias para evaluar ˙nicamente las funciones ejecutivas, sin embargo, dicha propuesta contiene una alta riqueza que puede extenderse como tres estrategias para valorar todas las funciones neuropsicolÛgicas:
a. Pruebas EspecÌficas: Son todos los test neuropsicolÛgicos que han sido desarrollados para la evaluaciÛn de una determinada funciÛn cerebral, por ejemplo, la torre de Hanoi, Stroop, cartas de Wisconsin, las pruebas para las afasias, el test de Barcelona, la ENI, la prueba de copia de la figura compleja de Rey, etc.
Un aspecto positivo que se debe mencionar de este tipo de evaluaciÛn radica en el alto contenido psicomÈtrico que se obtiene del test especÌfico, adem·s, el clÌnico puede utilizarlo de manera amplia en la experimentaciÛn(10). Un factor en contra de este tipo de evaluaciÛn es la falta de validez ecolÛgica que contienen este tipo de test, ya que tiene una elevada artificialidad, que no siempre pueden aportar en la comprensiÛn de la vida real del paciente y que muchas veces son tareas tan aisladas que -como lo reporta Damasio- es posible que realicen este tipo reactivos de manera excelente, cuando realmente no es asÌ dicho funcionamiento en la vida real. Una situaciÛn vista a menudo en la clÌnica, es el gran porcentaje de niÒos que acuden a la consulta por el motivo de presentar dificultades en la regulaciÛn de su comportamiento y deficiencias en sus procesos atencionales, y en la primera sesiÛn de evaluaciÛn neuropsicolÛgica realizan las pruebas atencionales de manera adecuada, sin embargo, en la vida real, en la escuela o en su hogar, presentan serias dificultades al respecto(18). Un aspecto positivo de este tipo de evaluaciÛn, es el contar con baremos de las funciones cerebrales valoradas, lo cual aporta en el criterio cuantitativo del diagnÛstico neuropsicolÛgico.
b. Pruebas no especÌficas: Son los test que no han sido creados de manera especÌfica para la evaluaciÛn de una funciÛn neuropsicolÛgica, sin embargo, tienen un alto contenido para la valoraciÛn clÌnica. En este tipo de evaluaciÛn se utilizan reactivos que son ampliamente utilizados en fenÛmenos de interÈs en la evaluaciÛn psicolÛgica, como por ejemplo, el test HTP, las sub-escalas del test de inteligencia de Wechsler, el test de Bender, CAT, entre otros, que han sido desarrollados en el contexto de la evaluaciÛn psicolÛgica de aspectos subjetivos, emocionales y dem·s, sin embargo, brindan un gran aporte al juicio clÌnico del neuropsicÛlogo experto en el funcionamiento cerebral y que, con sÛlo analizar el procedimiento seguido por un paciente en la ejecuciÛn de una tarea, ya es capaz de emitir un par·metro del estado de la funciÛn cerebral valorada. Al igual que las pruebas de tipo especÌfico, las pruebas no especÌficas presentan la limitaciÛn de falta de validez ecolÛgica, adem·s de no contar con baremos psicomÈtricos propios de la funciÛn evaluada, que permita entregar un criterio tÈcnico de normalidad o patologÌa en base a un criterio cuantitativo.
c. Pruebas de exploraciÛn diferida: Este tipo de reactivos fueron creados para superar la poca validez ecolÛgica de los test especÌficos y no especÌficos, ya que es de vital importancia en la práctica clÌnica neuropsicolÛgica poder tener una valoraciÛn del funcionamiento cerebral en las actividades de la vida diaria, a travÈs de la aplicaciÛn de escalas comportamentales. Este tipo de evaluaciÛn se basa en una lÛgica clÌnica utilizada en otras disciplinas como la medicina, en donde basta con evaluar los signos observados sobre un Ûrgano para emitir un diagnÛstico, tal es el caso del corazÛn o los pulmones, donde ˙nicamente con escuchar la frecuencia cardiaca y respiratoria, ya se puede determinar su estado y no es necesario usar una tÈcnica invasiva para lograr una evaluaciÛn eficaz (claro, Èsta es la evaluaciÛn m·s compleja, ya que no es posible de ser realizada si el profesional no cuenta con una formaciÛn excelente). De la misma manera, con las pruebas de observaciÛn diferida, como las escalas comportamentales, se puede valorar clÌnicamente el funcionamiento de zonas cerebrales como el lÛbulo frontal en su desempeÒo en la vida real(11). Un punto que se debe mencionar en favor de las escalas de observaciÛn diferida es, que si bien, las tÈcnicas de neuro-imagen aportan en el an·lisis de las funciones cerebrales, este procedimiento no permite al clÌnico tener una percepciÛn clara del impacto del daÒo cerebral en las actividades reales de la vida diaria del sujeto(20), por lo que, el uso de escalas de observaciÛn diferida de las funciones cerebrales constituyen una herramienta de gran aporte a la evaluaciÛn neuropsicolÛgica.
Finalmente, se debe seÒalar que el gran avance tecnolÛgico experimentado por la humanidad, ha generado unaverdadera revoluciÛn y surgimiento de una diversidad de tÈcnicas de neuro-imagen que permiten valorar el funcionamiento cerebral en vivo de sujetos con un cerebro indemne o que han sufrido alg˙n tipo de injuria. Entre las tÈcnicas m·s importantes se encuentran la resonancia magnÈtica, tomografÌa por emisiÛn de positrones, tomografÌa computarizada por emisiÛn de fotÛn ˙nico, resonancia magnÈtica funcional, electroencefalograma y otras , que permiten estudiar el funcionamiento encef·lico en base a su estructura, flujo sanguÌneo regional, metabolismo, actividad elÈctrica y dem·s mÈtodos usados con el sujeto en reposo, actuaciÛn y activaciÛn(12).
La rehabilitaciÛn neuropsicolÛgica de las funciones cerebrales
Barbara Wilson, quien es la m·xima autoridad en la rehabilitaciÛn neuropsicolÛgica, define a este proceso como el conjunto de tÈcnicas que tienen como finalidad mejorar el estado cognitivo, emocional, psicosocial y comportamental de una persona que ha sufrido un daÒo cerebral adquirido. Otra finalidad de la rehabilitaciÛn neuropsicolÛgica es permitir a las personas con alteraciones cerebrales conseguir un Ûptimo nivel de bienestar, para reducir el impacto de sus dÈficits cerebrales en las actividades de la vida diaria y para ayudar a retornar, en la medida de lo posible, a sus actividades previas al daÒo cerebral(13).
Seg˙n Ginarte-Arias(21) existen cinco mecanismos (Figura 5) que se pueden seguir para desarrollar un programa de rehabilitaciÛn neuropsicolÛgica, los cuales est·n relacionados y en ocasiones pueden co-existir, de manera que, se pueden proponer programas rehabilitaciÛn neuropsicolÛgica que combinen distintos mecanismos de forma simult·nea.
a. RestauraciÛn: TambiÈn conocido como restituciÛn de las funciones cerebrales, es un proceso que se basa en la repeticiÛn constante de ejercicios sobre una funciÛn neuropsicolÛgica especÌfica. Es com˙n su utilizaciÛn cuando existe una pÈrdida parcial de una determinada ·rea y existe una disminuciÛn de alguna funciÛn elemental, la cual puede mejorarse con el entrenamiento. Es interesante mencionar un aspecto que se debe tener presente al momento de abordar a un paciente con este procedimiento, el cual radica en el estadio evolutivo en el que se encuentra, ya que, en el desarrollo de la plasticidad cerebral humana, existe una relaciÛn inversamente proporcional, en donde a medida que avanza la edad del ser humano, disminuye la plasticidad cerebral. Por tal razÛn, la restauraciÛn darÌa mejores resultados en pacientes con daÒo cerebral adquirido en edades tempranas y con una gravedad entre leve y moderada, ya que si es aplicado en pacientes de edad avanzada con una afectaciÛn elevada, lo m·s probable es que este mecanismo de rehabilitaciÛn neuropsicolÛgica no brinde el mejor de los resultados.
b. CompensaciÛn: Este procedimiento se lo utiliza cuando una funciÛn cerebral tiene una afectaciÛn de tal magnitud, que no puede ser restaurada, por lo que, se toma la decisiÛn de utilizar otras funciones cerebrales conservadas, para que asuman el rol de la funciÛn cerebral daÒada.
c. SustituciÛn: Es un proceso en el cual se busca entrenar al paciente con daÒo cerebral adquirido en diferentes estrategias que le apoyen a disminuir los problemas cognitivos, comportamentales, en fin, de la vida diaria, que son resultantes dela injuria cerebral. Por lo general el elemento que sustituye a la funciÛn cerebral es un dispositivo externo que reemplaza a la funciÛn daÒada, como por ejemplo las agendas electrÛnicas que sustituyen a la memoria del paciente con daÒo de zonas cerebrales implicadas en procesos mnÈsicos.
d. ActivaciÛn-EstimulaciÛn: Su empleo se realiza cuando existen zonas cerebrales bloqueadas con una disminuciÛn o desaparecimiento de su activaciÛn. Una de las condiciones que determinan el uso de este mecanismo es el enlentecimiento en el procesamiento de la informaciÛn, cansancio o disminuciÛn de la motivaciÛn. En este proceso se suelen utilizar psicof·rmacos, el proceso de terapia de conducta, ambientes con una elevada riqueza de estÌmulos o la reiteraciÛn de preguntas y consignas al momento de realizar una actividad.
e. IntegraciÛn: Es usado cuando el paciente presenta alteraciones en la interacciÛn entre mÛdulos funcionales o cuando en su procesamiento temporal se produce alg˙n tipo de interferencia. En este mecanismo se utilizan los mÈtodos psicofarmacolÛgicos y los diferentes mecanismos de rehabilitaciÛn neuropsicolÛgica, en beneficio de las necesidades del individuo con daÒo cerebral adquirido.
Por otro lado, Wilson(20) propone un listado de 10 ·reas que en los ˙ltimos aÒos han demostrado evidencia a favor de los procesos de rehabilitaciÛn neuropsicolÛgica:
1. Terapia enfocada en la compasiÛn: se orienta en el trabajo en las dificultades psicolÛgicas producto del daÒo cerebral que se presentan, tanto en el paciente como en los familiares.
2. Terapia Musical NeurolÛgica: tiene como finalidad la estimulaciÛn de redes neuronales involucradas en la m˙sica, como lo son, la memoria, lenguaje, atenciÛn, percepciÛn y control motor. Adem·s, una propuesta interesante es la terapia de entonaciÛn melÛdica, que ha generado cambios en pacientes con afasia. En este tipo de rehabilitaciÛn neuropsicolÛgica se ha encontrado que pacientes con daÒo cerebral han mejorado en memoria verbal y atenciÛn focalizada, al ser comparados con pacientes en iguales condiciones que no han recibido este tipo de intervenciones(22).
3. EvaluaciÛn mediante realidad virtual: se refiere al uso de equipos y programas computacionales para crear interacciones simultaneas y ambientes que brinden al paciente una sensaciÛn similar al mundo real sin poner en riesgo su integridad debido a sus alteraciones cerebrales. La riqueza de este procedimiento radica en la posibilidad de configurar el entorno en relaciÛn a las caracterÌsticas y objetivos de la rehabilitaciÛn neuropsicolÛgica de un determinado paciente.
4. RestauraciÛn de los dÈficits de la memoria operativa: basada en la estimulaciÛn y repeticiÛn constante de ejercicios para rehabilitar esta funciÛn ejecutiva, donde se ha reportado los beneficios en adultos con su funcionamiento cerebral conservado, pacientes con daÒo cerebral y niÒos con trastorno por dÈficit de atenciÛn con hiperactividad.
5. MonitorizaciÛn del aprendizaje para personas con dÈficits del lenguaje: es una tÈcnica que tiene como finalidad entrenar a sujetos en detectar errores mientras est·n aprendiendo una nueva habilidad o adquiriendo nueva informaciÛn.
6. Terapia de ResoluciÛn de Problemas para personas con dÈficits ejecutivos: tiene como finalidad intervenir en una de las caracterÌsticas m·s comunes en las personas con alteraciÛn de las funciones ejecutivas: la resoluciÛn de problemas. Existe evidencia de estudios previos en donde se ha reportado el beneficio de este tipo de intervenciÛn, a diferencia de otros procesos como la terapia de memoria(14)(15). Los principales beneficios observados con esta intervenciÛn radican en las mejoras de los pacientes en el rendimiento de test que miden las funciones ejecutivas, autoevaluaciÛn, logro de objetivos y juego de roles.
7. Apoyo en las primeras etapas de la demencia: se basa en un procedimiento de intervenciÛn psicosocial, no basado en terapia farmacolÛgica, que busca apoyar a la persona con demencia, en sus primeras etapas, a mejorar su desempeÒo en las actividades de la vida diaria.
8. Reconocimiento de la necesidad de evaluar la rehabilitaciÛn en formas m·s apropiadas: reconoce la importancia en el vÌnculo entre pacientes, familiares, cuidadores y terapistas de individuos con daÒo cerebral que reciben rehabilitaciÛn, en donde se busca que las participaciones de todos los individuos alrededor del paciente aporten de forma tÈcnica y significativa en el proceso de rehabilitaciÛn.
9. Videoc·mara sensorial: es una pequeÒa c·mara utilizada usualmente alrededor del cuello que toma fotografÌas autom·ticamente de las diversas actividades que realiza la persona con daÒo cerebral adquirido. El uso de este dispositivo externo ha sido beneficioso en el funcionamiento de la memoria autobiogr·fica y en el tratamiento de personas con demencia, encefalitis y otros tipos de alteraciÛn cerebral (16).
10. Evidencia de la eficacia de la rehabilitaciÛn holÌstica: para el futuro, la proyecciÛn de la rehabilitaciÛn neuropsicolÛgica considerada como holÌstica necesita evidencia empÌrica que permita validar su eficacia al intervenir en las consecuencias cognitivas, emocionales, sociales y funcionales de las personas que tienen un daÒo cerebral adquirido.
Conclusiones
En este artÌculo de revisiÛn se han tratado tres temas de gran interÈs en la neurociencia: el desarrollo histÛrico del estudio del cerebro, el proceso de evaluaciÛn de las funciones cerebrales y la rehabilitaciÛn neuropsicolÛgica en el daÒo cerebral adquirido.
En el proceso de la historia del estudio del cerebro humano se relataron datos importantes, como las pr·cticas de trepanaciÛn para aliviar problemas encef·licos y las acciones canibalÌsticas, donde seres humanos se comÌan los cerebros de otros humanos, con la finalidad de alimentarse de la sabidurÌa del dueÒo previo de dicha materia gris.
Si bien estos dos datos iniciales, permiten identificar que el interÈs por el estudio del cerebro estuvo presente desde siglos atr·s en la historia de la humanidad, en donde se intentaba atribuir la actividad mental a su sustento biolÛgico, no siempre se evolucionÛ en ese sentido, ya que en una etapa crÌtica del desarrollo cientÌfico, se atribuyeron las capacidades propias del sistema nervioso a la bondad o crueldad de la divinidad sobre el ser humano, en donde patologÌas cerebrales eran consideradas como verdaderas posesiones demoniacas, sin saber que, realmente se trataba de lo que ahora es tratado como epilepsia. Luego de superar este pensamiento m·gico, los hallazgos de Broca, Wernicke y la brillantez de Luria, generarÌan la verdadera maquinaria que dio origen a lo que hoy conocemos como neurociencia.
Posteriormente hablamos de la evaluaciÛn neuropsicolÛgica de las funciones cerebrales, en donde se identificaron tres mecanismos que permiten al neuropsicÛlogo realizar una valoraciÛn completa de las funciones cerebrales: los reactivos especÌficos, no especÌficos y las pruebas de valoraciÛn diferida, donde se recalcÛ las bondades y limitaciones que se proyectan de cada uno de los mecanismos de evaluaciÛn, que se deben tener presentes al momento de emitir un juicio diagnÛstico sobre el funcionamiento cerebral de un paciente.
El tercer tema tratado fue la rehabilitaciÛn neuropsicolÛgica de las funciones cerebrales, en donde se describieron los procesos de restauraciÛn, compensaciÛn, sustituciÛn, activaciÛn-estimulaciÛn e integraciÛn, que constituyen las herramientas de trabajo al momento de intervenir en seres humanos que han sufrido un daÒo cerebral adquirido.
Finalmente, es importante recalcar que el avance de la neurociencia va a un ritmo acelerado, ya que la tecnologÌa y el progreso cientÌfico de la ciencia del comportamiento, dÌa a dÌa proponen nuevas tÈcnicas y teorÌas para entender el funcionamiento cerebral y los procesos que se aplican en su evaluaciÛn y rehabilitaciÛn, por lo que, el clÌnico debe realizar una constante actualizaciÛn para ir de la mano con los avances de esta apasionante relaciÛn, del funcionamiento cerebral, conducta, cogniciÛn y subjetividad humana.