1. INTRODUCCIÓN
La innovación es uno de los componentes más importantes para el desarrollo económico, productividad y avance tecnológico de cualquier nación (Nadiri, 1993). Mediante la innovación realizada por las empresas se obtiene mayor crecimiento económico y se pueden generar mayores ventajas competitivas a largo plazo (Fagerberg, 1988). Un retraso o un estancamiento en la innovación comprometen seriamente el desempeño y la supervivencia de una economía. (Porter, 1990). La innovación en una empresa se puede lograr a través de dos vías: La primera es una innovación propia, desarrollada internamente por la misma entidad que la utiliza. La segunda opción es la adopción, que es realizada principalmente por otras entidades y adquirida posteriormente por otra empresa que hará uso de la misma (Autant-Bernard et al., 2010).
El comportamiento de adopción suele ser muy usual en países en vías de desarrollo, donde las interacciones entre clientes y empresas se ven mermadas por el bajo grado institucional, lo que hace que no existan incentivos suficientes para innovar en base al esfuerzo propio (Chaminade & Vang, 2008). Con un análisis de costos y beneficios, algunas empresas pueden encontrar más factible adoptar una idea materializada por otros en lugar de desarrollar su propia innovación (Benhabib & Spiegel, 2005; Nelson, 1959).
Cuando se utilizan muy frecuentemente tecnologías e ideas desarrolladas por entidades externas podría estancar el potencial innovador de las firmas nacionales, incrementando la competitividad externa y extranjera (Benhabib & Spiegel, 2005; Liu et al., 2013; Nelson, 1959). Esto hace que las economías en vías de desarrollo se vuelvan progresivamente más dependientes de las economías más desarrolladas (Hobday, 2005; Jameson, 2016). Según el reporte The Global Innovation Index (2019) realizado por la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual, la Universidad de Cornell y la Escuela de Negocios INSEAD, Ecuador ha ocupado consecutivamente los últimos lugares entre los países menos innovadores a nivel mundial y regional, llegando incluso a posicionarse como el sexto país menos innovador del mundo en el año 2010. De acuerdo con la Encuesta de Actividades de Ciencia, Tecnología e Innovación (2015), entre el año 2009 a 2014, de las 8 025 empresas ecuatorianas encuestadas, 4 066 introdujeron una innovación o mejora significativa de bienes, servicios o procesos, que representan el 42,07%. De las empresas que innovaron, 1 339 empresas (32%) lo hicieron a través de la adopción.
El objetivo de esta investigación es analizar los determinantes de la adopción de la innovación. Para ello, se emplea la metodología Heckman-Probit que permite corregir el sesgo de selección. Este problema de sesgo consiste en que solo aquellas empresas que obtienen una innovación pueden elegir entre adopción o desarrollo propio. Esto implica que aquellas empresas que no hayan tenido alguna innovación no serían consideradas. Los datos usados pertenecen a la Encuesta de Actividades de Innovación, Ciencia y Tecnología en sus dos únicas ediciones existentes, 2009-2011 y 2012-2014.
Los resultados muestran que los canales de comunicación e intercambio creados por las empresas a través de la innovación organizacional, grupos empresariales y actividades de cooperación promueven el proceso de difusión de innovaciones, por lo cual las empresas ecuatorianas son capaces de reconocer innovaciones para posteriormente adoptarlas. El talento humano bien preparado también influye positivamente en el proceso de adopción de innovaciones, debido al efecto del intercambio y absorción de conocimiento. La participación en mercados internacionales a través de exportaciones aparenta no ser relevante.
Esta investigación contribuye a la literatura poco explorada sobre la innovación y adopción de innovaciones en vía de desarrollo, como es el caso de Ecuador, identificando la medida en la que ciertos factores inciden sobre la adopción de innovación. Además, en base a los resultados de este estudio, se proponen recomendaciones dirigidas a las entidades que tienen influencia en los procesos de innovación tanto en el ámbito público como privado.
La estructura de este estudio contempla varias secciones. En la sección 2 se realiza una exploración teórica que identifica los factores que determinan la innovación y la adopción de innovación. En la sección 3, se describen los datos y la metodología empleada. La sección 4 discute los resultados obtenidos y finalmente la sección 5 concluye y propone recomendaciones.
2.LITERATURA RELACIONADA
El proceso de adopción de innovación se puede entender a través de la teoría de la difusión de innovaciones (E. Rogers, 1962) y la teoría de la absorción de conocimiento (M. Cohen & Levinthal, 1990). Rogers (1962) afirma que las innovaciones podrían generar cierta incertidumbre antes de ser lanzadas al mercado. Así, solo una minoría de empresas deciden asimilar dicho riesgo y las empresas que no tienen la capacidad de asimilar la incertidumbre pasan a ser adoptantes. El beneficio que reciban de dicha innovación decrecerá con el tiempo hasta que la innovación naturalmente pierda su valor. La segunda teoría de absorción de conocimiento muestra que la propensión a adoptar innovaciones depende de la capacidad de las firmas de asimilar y absorber conocimientos adquiridos a través del aprendizaje. A su vez, el nivel de absorción de conocimiento dependerá en gran medida del personal altamente cualificado, la estructura organizacional, estructuras de comunicación y los flujos internos de información.
Como la innovación es un factor clave para el desarrollo de los países, el estudio para países en vías de desarrollo es pertinente y relevante. Según Hobday (2005), los países en vías de desarrollo adquieren innovaciones en un tiempo tardío, influenciados principalmente por el status o liderazgo de aquellos países con mayor industrialización Kim (1997) enuncia que los países en desarrollo inicialmente adoptan tecnología externa, la asimilan después de un tiempo para posteriormente mejorarla. Este proceso es conocido como proceso de recuperación.
La adopción de innovación tiene fundamentos teóricos relacionados con el conocimiento, el aprendizaje de la empresa, los canales de intercambio y comunicación, actividades cooperativas y otras características internas. Los mecanismos de relación con cada tipo de variable se presentan a continuación.
2.1. Nivel de Personal Altamente Cualificado
Las empresas con mayor capital humano para innovar tendrían una mayor disposición a realizar una innovación propia respecto a tomar innovaciones desarrolladas por otros (Arundel, 2007). Sin embargo, Arrow (1962), Benhabib y Spiegel (2005), Mansfield, Schartz y Wagner (1981) y Nelson (1959) manifiestan que imitar ideas pre-existentes tiende a ser menos costoso para las empresas, a pesar de tener un elevado recurso intelectual a su disposición. Cohen y Levinthal (1990), a través de su conceptualización de capacidad de absorción de conocimiento, sugieren que aquellas entidades que cuentan con talento humano mejor preparado tienen una mayor capacidad de adquirir conocimientos externos que se tienden a explotar en la imitación de nuevos productos o procesos. Dicha capacidad de absorción depende en gran medida del nivel de conocimientos previos que posee la empresa (Jovanovic & Rob, 1989) Nelson y Phelps (1965) argumentan que aquellos individuos con un nivel educativo más alto tienden a adoptar en mayor grado las innovaciones más productivas que aquellos con menor nivel de educación. Así, la capacidad para utilizar los resultados de los esfuerzos de investigación realizados por otras empresas o establecimientos depende de la capacidad para comprenderlos y evaluar su potencial económico. Autant-Bernard et al. (2010) deducen que las empresas con personal altamente cualificado deberían ser capaces de crear sus propias innovaciones y encuentran una relación negativa con la adopción de innovaciones.
2.2. Innovación Organizacional
Autores como Drucker (1985), Schumpeter (1934) y Hagerdorn (2002) sugieren que la innovación es resultado de la condensación de varios logros organizacionales que buscan responder a las necesidades del mercado y a la adaptación al progreso tecnológico. Así, las mejoras desarrolladas por la empresa en su sistema organizacional traen como consecuencia un aumento significativo de la innovación en productos y procesos (Naranjo-Valencia et al., 2012). Esto sucede puesto que las innovaciones en la organización de la empresa funcionan como mejoras hacia los canales de comunicación por las que la innovación se transmite dentro de un sistema social1 (Autant-Bernard et al., 2012; Lane & Lubatkin, 1998; Lenox & King, 2004). Para Veugelers (1996) y Naranjo-Valencia et al. (2012), la influencia que tenga la estructura organizacional en la decisión de desarrollar innovaciones propias o solo adoptarlas dependerá de la capacidad de absorción de conocimiento de la firma, como consideraban M. Cohen y Levinthal (1990).
2.3. Financiamiento Público
El soporte a través de entidades de fondos públicos parece ser efectiva para mejorar el desempeño innovador de las empresas, pues otorga apoyo a través de subvenciones, subsidios, préstamos de la banca pública con tasas de interés preferencial, exoneración de impuestos y aranceles bajos (Huergo & Moreno, 2015). Según Autant-Bernard et al. (2010), la financiación pública de la innovación es más eficiente para fomentar la adopción que para generar la innovación en sí. Esto podría deberse a que el tipo de instrumentos financieros utilizados (subvenciones, subsidios, préstamos) hacen que, a largo plazo, las firmas generen comportamientos dependientes de otras innovaciones a pesar de tener el incentivo suficiente para desarrollar ideas por sí mismas. Esto podría también depender de la magnitud del incentivo otorgado por la banca pública, según explican Autant-Bernard et al. (2010).
Spielkamp y Rammer (2009) señalan que algunos proyectos de carácter innovador pueden resultar desfavorables para la empresa al final si se comparan las ganancias que se obtendrán contra sus costos de implementación, lo cual según B.H. Hall y Lerner (2010) representa un monto demasiado elevado para que se realice con recursos propios.
2.4. Características Sectoriales
La actividad principal de la empresa en el mercado determina gran parte de su comportamiento innovador (Kenessey, 1987; Landau & Rosenberg, 1986). Los procesos de innovación requieren de fuentes de conocimiento que se desarrolla interna o externamente (M. Cohen & Levinthal, 1990). Autores como Freeman (1988), Lamberton (1986) y Hollander (2007) concluyen que las iniciativas de desarrollo de innovaciones provienen de personal con conocimientos científicos, de diseño y de ingeniería. El aprendizaje acumulado de ciertos sectores permite mejorar las condiciones para desarrollar una innovación (M. Cohen & Levinthal, 1990). Aquellas firmas de sectores de Alta Intensidad de Conocimiento2 poseen el talento necesario para innovar por su cuenta (Lane & Lubatkin, 1998). Esto se debería a que las actividades de dichas empresas se basan de por sí en el desarrollo de nuevas tecnologías y de nuevas ideas (Metcalfe & Miles, 2000) acorde a las necesidades de sus clientes y proveedores (Savic et al., 2014).
Apriorísticamente, aquellas firmas con un alto nivel de conocimiento tendrían la capacidad de desarrollar internamente sus propias ideas (Raspe, 2009). No obstante, estas firmas también disponen de una capacidad de absorción de conocimiento externo, que permite que el aprendizaje se asimile con relativa facilidad (M. Cohen & Levinthal, 1990). Por tanto, acoplar una innovación externa y explotarla en el mercado también puede ser una opción viable (E. Rogers, 1962).
La literatura sugiere que la tecnología es un aspecto sobresaliente de las actividades de la empresa cuando se trata de innovación y crecimiento económico (Acs & Armington, 2004; Fagerberg, 1988; Hausmann & Rodrik, 2003). Para Jaffe (1986), las firmas que destinan sus recursos al desarrollo tecnológico tienen mayor facilidad para lograr una innovación. Balcerowicz, P. Keczkowski y W. Katek-Rubiak (2009) sostienen que los sectores con un alto componente tecnológico son el motor de crecimiento económico del país, ya que las actividades de I+D que se generan en estos sectores son las principales fuentes de innovación tecnológica. En síntesis, aquellas industrias de Alta Intensidad Tecnológica3 tendrían una alta probabilidad de lograr una innovación.
2.5. Exportaciones
Las empresas más productivas se abren caminos a mercados internacionales para mejorar los retornos de sus inversiones, aumentar su productividad y disminuir sus costos de producción (Lileeva & Trefler, 2010). Las empresas que más destacan en su productividad e innovación serían las primeras en abrirse a mercados internacionales y comenzar a exportar (Yeaple et al., 2004). Las exportaciones funcionan como un mecanismo de aprendizaje e intercambio que permiten a las firmas locales acceder a tecnologías exteriores de última gama que posteriormente se aplican en el mercado local, lo que fomenta las actividades innovadoras locales (Albis Salas, 2015). Rogers (1962) explica a través de su teoría de la difusión de innovaciones que durante el comercio exterior existen un intercambio de activos tangibles e intangibles. Según Coe, Helpman y Hoffmaister (2009), un efecto secundario de dicho intercambio es la imitación de innovaciones. La continua interacción de las empresas exportadoras con otros países les permite acceder a nuevas tecnologías con gran eficiencia (Nobel & Birkinshaw, 1998). Así, existe una relación positiva entre el comercio exterior y la difusión de innovaciones (Fagerberg & Verspagen, 2002; Keller, 1997).
Respecto al intercambio de activos intangibles, a saber, ideas y conocimientos, Lucas (1989) y Autant-Bernard et al. (2010) explican que las interacciones interpersonales producidas durante el comercio exterior se relacionan directamente con la capacidad de absorción de conocimiento y la difusión de innovaciones. Albis y Salas (2015) y Iammarino et al. (2007) explican que la interacción y canales de comunicación creados a través del comercio pueden hacer que las empresas se limiten a aprovechar las innovaciones logradas por otras empresas más grandes. Esto es explicado por Narula y Zanfei (2003) como un efecto natural de la globalización.
Autant-Bernard et al. (2010) encuentran que el nivel de comercio exterior tiene una relación negativa con la adopción de innovaciones. Explican que esta relación era inesperada desde un principio, aunque argumentan que esto podría indicar que el efecto de incrementar la competitividad debido a la presión del comercio internacional es superior al efecto de incrementar la difusión de innovaciones. El incremento de la competitividad debido a la interacción en el comercio internacional se debe a que las firmas nacionales tienen mayor presión por incrementar su productividad, minimizando sus costos (Fagerberg & Verspagen, 2002; Kaldor et al., 1986; Kellman, 1983).
2.6. Tamaño de la Empresa
Las actividades de innovación conllevan un alto costo de operación y mantenimiento que solo puede ser soportado por empresas grandes con altos volúmenes de negocio (Klepper & M Cohen, 1996). Cohen (2010) señala que las empresas de gran tamaño generan economías a escala mediante de las actividades de I+D, a través de la adquisición de equipos especializados y contratación de personal multidisciplinario altamente capacitado, lo que conlleva a la generación de proyectos de innovación. Maskus (2000) y Battisti, Hollenstein, Stoneman y Woerter (2007) ilustran la innovación y adopción de innovación como un modelo de líder-seguidor, donde las empresas grandes son líderes y desarrollan primero una innovación y las empresas más pequeñas son seguidoras y se limitan a comprar o adquirir dicha innovación de las empresas grandes, convirtiéndose en adoptantes de innovación.
A pesar de que algunos autores concuerdan en que las firmas más grandes son las más propensas a innovar, existen otras teorías que afirman lo contrario. Tal es el caso de M. Rogers (2004), quien menciona que las empresas pequeñas tienen ciertas ventajas sobre las empresas más grandes. Las empresas más pequeñas serían más rápidas para reconocer oportunidades, más flexibles para investigar o implementar innovaciones, ajustan mejor los incentivos a sus empleados para garantizar un esfuerzo innovador óptimo, y su administración es menos rígida. En su estudio realizado para las empresas de Australia encontró que aquellas firmas pequeñas son más innovadoras en principio, no obstante, esta va decreciendo conforme aumenta el tamaño de las firmas. Otro estudio semejante fue desarrollado por B. Tether (1998), quien, utilizando los datos provenientes de la Unidad de Investigación de Políticas Científicas (Reino Unido) y Small Business Administration (EEUU), encontró que las empresas más pequeñas son las que más innovaciones tienen por empleado. Symeonidis (1996) explica que las empresas pequeñas se valen de sus ventajas competitivas en principio para incorporar innovaciones, de manera que puedan ganar una mayor participación en el mercado. No obstante, existiría un umbral en el cual la empresa se ve consolidada e innova con menos frecuencia. Autant-Bernard et al. (2010) afirman que el tamaño de la firma podría influenciar en la rentabilidad de la innovación adoptada, debido a que las empresas más grandes afrontan menores riesgos asociados a invertir en una nueva. M. Cohen y Levinthal (1990) y Dougherty y Heller (1994) insisten en que las grandes empresas adoptan con mayor frecuencia debido a su alta capacidad de absorción.
2.7. Inversión en I+D
Las actividades de Investigación y Desarrollo, también conocidas como I+D, son realizadas por las empresas con el afán de mejorar su desempeño económico. Para esto deberán especializarse e incrementar sus capacidades de aprendizaje, lo que a futuro podría derivar en la conquista de nuevos mercados (Rosenberg, 1984). La explotación de innovaciones se produce cuando la empresa hace uso eficiente de sus recursos y tiene un buen desempeño en el mercado (Schumpeter, 1934).
Autores como Buesa, Heijs y Martínez (2019) utilizan los gastos de I+D interno para explicar la probabilidad de innovación para las empresas españolas. Adicionalmente, Griliches (1979) también afirma que los gastos de I+D interno inciden directamente con la innovación.
La orientación externa en I+D de una empresa permite acceder a una variedad de mecanismos que aumentan la probabilidad de que la información sobre innovaciones ingrese al sistema organizativo de quien decide adoptar (O. Hall, 1967; Kimberly & Evanisko, 1981). Liu et al.(2013) demuestra, a partir del caso de la economía china, que la contratación externa facilita las actividades de adquisición de innovaciones, aunque merman las capacidades locales de realizar esfuerzos internos, fortaleciendo así la competitividad extranjera. Las empresas locales que optan mayormente por realizar actividades de I+D externa se limitan a la compra o adquisición externa de innovaciones (Piga & Vivarelli, 2004).
2.8. Cooperación con Clientes y Proveedores
Según Hagedoorn (2002), las empresas se ven motivadas a realizar actividades de cooperación en innovación con el fin de minimizar los costes de desarrollar una nueva idea. Para D. Arthurs y Busenitz (2006), algunas empresas con ideas innovadoras podrían tener una escasez inicial de recursos y capacidades, especialmente si estas son de reciente creación. Bruton y Rubinak (2002) enuncian que las firmas pueden superar el entorno hostil y la falta de recursos aliándose con otra empresa que, con activos complementarios, recursos humanos y tecnología única, pueden coadyuvar al desarrollo de la innovación. En un entorno cooperativo, la tarea de un proyecto de innovación podría ser repartida entre sus participantes para un trabajo conjunto (B. S. Tether & Tajar, 2008). Así, cada firma se especializa en su área e invierte menos de lo que necesitaría si hiciera el proyecto por sí solo, generando así economías de escala (Bougrain & Haudeville, 2002) y reduciendo significativamente los costos fijos (Gans & Stern, 2003).
Rogers (1962) plantea que las actividades de cooperación funcionan como canales de comunicación que propagan la existencia de una innovación dentro del sistema social. Además, asegura que una relación eficaz con proveedores y clientes mejora las capacidades de una empresa de reconocer nuevas tecnologías, que posteriormente serán adoptadas. Para Autant-Bernard et al. (2010), la cooperación con clientes y proveedores sirve para el desarrollo de insumos complementarios que fomentan la adopción de innovaciones. Rosenberg (1972) indica que la interacción con proveedores y clientes hace que se produzca la difusión de innovaciones a través de un intercambio continuo de mejoras en las tecnologías existentes, además de un intercambio de conocimientos. Adicionalmente, Lucas (1989) está de acuerdo en que durante las interacciones con clientes y proveedores se produce un intercambio intangible de ideas, lo cual da paso a la difusión de innovaciones y vuelve a las empresas más propensas a adoptar dichas ideas.
2.9. Grupo Empresarial
Según Rogers (1962), la comunicación eficiente entre las empresas promueve la difusión de innovaciones puesto que se da un intercambio continuo de aprendizaje (M. Cohen & Levinthal, 1990). Los grupos empresariales crean un mercado de financiamiento interno eficiente, con lo cual se puede acceder a fondos para desarrollar ideas con mayor facilidad, tomando prestado el dinero de otros integrantes del mismo grupo (Seru, 2007). En el mercado, la información entre empresas e inversores externos es asimétrica (Petersen & Himmelberg, 1994), por lo que las empresas confían en el financiamiento interno del capital del grupo para sus actividades de I+D, que es menos costoso que el financiamiento del mercado externo (Myers & Majluf, 1984). Para Belenzon y Berkovitz (2007), las empresas que se afilian a un grupo utilizan muy frecuentemente las innovaciones logradas por el resto de empresas pertenecientes al mismo grupo, por lo que, aunque la innovación no haya sido lograda por esfuerzos propios en principio, puede ser más accesible por la actitud colaborativa de las empresas dentro del grupo.
Técnicamente bastaría con que una de las empresas logre la innovación y el resto podría únicamente reutilizarla (Fisman & Khanna, 2004) lo que sería considerada una adopción de innovación. Autant-Bernard et al. (2010) encuentran un problema puntual en la construcción de esta variable puesto que algunas empresas pueden interpretar que las innovaciones internas logradas por otras empresas del mismo grupo les pertenecen, por lo que afirmarían que ellos lograron dicha innovación por cuenta propia. En este caso, no existe alguna forma de saber si esto ocurre o no, por lo que habría que acogerse a la posibilidad del dicho error.
2.10. Patentes
Un factor que se debe considerar son las patentes, que son un instrumento legal que conceden el derecho exclusivo de pertenencia de una invención nueva de producto o tecnología que es susceptible de ser comercializado por un lapso determinado de tiempo (Mansfield, 1986). Este factor surte un efecto ambiguo en la innovación. Según Arrow (1962), K. Whitaker y D. Nordhaus (1970), Merges y R. Nelson (1990) y Rai y Jagannathan (2012), el uso de un sistema de protección formal de patentes incentivaría la innovación, debido a las garantías y beneficios que el inventor recibe, como el monopolio temporal, la protección contra imitadores y los ingresos percibidos por el uso de sus patentes. En el segundo caso, según Llanes y Stefano (2010) y Boldrin y K. Levine (2012), las patentes desalientan la innovación, debido a los elevados costos de las licencias o su repercusión negativa en el equilibrio de mercado.
3. DATOS Y METODOLOGÍA
Para este estudio se utilizaron los datos provenientes de la Encuesta de Actividades de Ciencia, Tecnología e Innovación (ACTI) realizada por la Secretaria Nacional de Educación Superior, Ciencia y Tecnología e Innovación conjuntamente con el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), en sus ediciones 2009-2011 y 2012-2014. Unificando ambas bases de datos, se construye un pool de datos con un total de 8 025 observaciones.
La naturaleza binaria de la variable dependiente, a saber, si una empresa adopta innovación, amerita un modelo de elección binaria Probit. En este análisis, solo aquellas empresas que obtienen una innovación pudieron elegir entre adopción o desarrollo propio. Esto implica que aquellas empresas que no hayan tenido alguna innovación no serían consideradas, lo que provocaría un sesgo de selección. Para resolver el problema de sesgo de selección, se acude al método de corrección desarrollado por Heckman4 (1977). Por tanto, el método necesario para estimar la probabilidad de adoptar innovación corresponde al método Heckman-Probit. Dicho método consiste en una estimación en 2 etapas. En la primera, se estima un modelo de elección binaria Probit para la decisión de innovación, conocido como ecuación de selección, que se presenta a continuación.
Donde Y indica el estado innovador de la empresa:
1: Si la empresa logra una innovación o mejora significativa de bienes, servicios y/o procesos.
0: caso contrario.
Se puede denotar la ecuación (1) como un modelo de variable latente, suponiendo que existe una variable auxiliar asociado a la probabilidad de innovar, tal que:
Se asume que el término de error asociado a la ecuación (2) está normalmente distribuido, con media cero y varianza uno, esto es:
A su vez, la ecuación (2) se puede representar de la siguiente forma:
A continuación, se obtiene la probabilidad de una empresa de innovar como un modelo Probit ordinario que se estima a través de máxima verosimilitud5, representado de la siguiente manera:
Se tiene un conjunto de datos con n observaciones:
Entonces, la función de máxima verosimilitud está representada por:
A partir de la ecuación (6) se obtienen los estimadores
A partir de dicha estimación se calcula el factor conocido como el Ratio Inverso de Mills, denotado por:
Donde:
Función de densidad de la distribución normal evaluada en
Función de densidad acumulada evaluada en
Una vez obtenido el Ratio Inverso de Mills, se añade a la especificación del modelo de adopción, dando comienzo a la segunda etapa. En esta etapa se estima el modelo de adopción de innovación, incluyendo el Ratio Inverso de Mills como una variable explicativa adicional para corregir el sesgo de selección. El modelo de la segunda etapa asociado a la probabilidad de adoptar innovación, está denotado por:
Donde w representa si la empresa decide adoptar una innovación, lo cual no se puede observar si la empresa no logra una innovación en primer lugar, z representa un vector de variables independientes y <math> <mi>α</mi></math> un vector de parámetros, ambos evaluados en una función de distribución normal acumulada <math> <mi>�</mi></math>. Las variables explicativas de la adopción de innovación se describen en la Tabla 1. Este modelo también se puede denotar como un modelo de variables latente, suponiendo que existe una variable auxiliar:
Al igual que con la ecuación (2), se asumen que el error asociado a la probabilidad de adoptar tiene una distribución normal, con media cero y varianza 1.
La ecuación (10) puede representarse de la siguiente manera:
Como lo que se desea es obtener la probabilidad de que una empresa realice una adopción de innovación, dado que introdujo alguna innovación, y, una vez añadido el Ratio Inverso de Mills como una nueva variable explicativa adicional, se tiene:
Donde:
Los parámetros para la ecuación de adopción se estiman a través de máxima verosimilitud, de la misma manera que la ecuación (6) y (7).
Según Heckman (1977), como
3.1. Descripción de Variables
Al tratarse de una estimación en 2 etapas, existen entonces 2 variables independientes, en la ecuación de innovación viene representada de la siguiente manera:
Se desarrollarán 3 estimaciones econométricas, por lo cual habrá 3 variables independientes, una que explique la propensión a innovar en productos, otra en proceso y una que abarque ambos casos simultáneamente. La variable dependiente de la segunda etapa también contemplará aquellos 3 casos y se representa de la siguiente manera:
A continuación, se citan todas las variables independientes que serán utilizadas en el modelo econométrico, cada una incluirse en la ecuación de primera etapa, segunda etapa o en ambos casos simultáneamente.
Variable Independiente | Descripción | |
Afectan a la Innovación y Adopción de Innovaciones | ||
Nivel de Personal Altamente Cualificado | Número de trabajadores con título de tercer nivel o superior. | |
Innovación Organizacional | Igual a 1 si la empresa obtuvo una innovación organizacional, 0 caso contrario. | |
Financiamiento Público | Igual a 1 si la firma recibió financiamiento público, 0 caso contrario. | |
Alta Intensidad en Conocimiento | Igual a 1 si la empresa pertenece a una industria intensiva en conocimiento, 0 caso contrario. | |
Ln (Exportaciones Promedio) | Promedio de exportaciones en los 3 últimos años en logaritmo. | |
Afectan Únicamente a la Innovación | ||
Ln (Ventas Promedio) | Promedio de las ventas en los 3 últimos años en logaritmo. | |
(Ln (Ventas Promedio)) ^2 | Promedio de las ventas en los 3 últimos años en logaritmo elevado al cuadrado. | |
Ln (I+D Interna Promedio) | Promedio de los gastos en I+D interna de los 3 últimos años en logaritmo. | |
Patentes | Igual a 1 si la firma ha emprendido búsqueda de patentes, 0 caso contrario. | |
Alta Intensidad Tecnológica | Igual a 1 si la empresa pertenece a una industria intensiva en tecnología, 0 caso contrario. | |
Afectan Únicamente a la Adopción de Innovaciones | ||
Ln (Ventas Promedio Ponderadas) | Promedio de ventas en los 3 últimos años ponderadas de acuerdo al sector al que pertenecen en logaritmo. | |
Ln (Ventas Promedio Ponderadas) ^2 | Promedio de ventas en los 3 últimos años ponderadas de acuerdo al sector al que pertenecen en logaritmo elevado al cuadrado. | |
Ln (I+D Externa Promedio) | Promedio de los gastos en I+D externa de los 3 últimos años en logaritmo. | |
Cooperación con Clientes y Proveedores. | Igual a 1 si la empresa realizó cooperación con clientes o proveedores, 0 caso contrario. | |
Grupo Empresarial | Igual a 1 si la firma pertenece a un grupo empresarial, 0 caso contrario |
Se ha optado por ponderar el volumen de ventas respecto al sector en el que pertenecen, esto con el fin de diferenciar la ecuación de selección de la ecuación de adopción de innovaciones, en concordancia con la metodología aplicada por Autant-Bernard et al. (2010) para la economía de la Unión Europea.
4. RESULTADOS
En la siguiente tabla se presentan las estimaciones de los modelos Heckman-Probit. En la parte superior de la Tabla 2 se muestran los efectos marginales de la ecuación de selección de innovación de la primera etapa y en la parte inferior se muestran los resultados de la ecuación de la adopción de la segunda etapa. En la columna (1) se muestra el modelo que abarca las innovaciones en productos y procesos, en la columna (2) se muestra el modelo de innovación en productos y en la columna (3) es el modelo de innovación en procesos.
(1) | (2) | (3) | |
Variable | General | Productos | Procesos |
Adopción | |||
Ln (Ventas Promedio Ponderadas) | -0,0353** (0,0101) | -0,0416*** (0,0661) | -0,0152 (0,0643) |
Ln (Ventas Promedio Ponderadas) ^2 | 0,0020*** (0,0023) | 0,0022*** (0,0022) | 0,0008 (0,0101) |
Ln (I+D Externa Promedio) | 0,0248*** (0,0098) | 0,0167*** (0,0112) | 0,0190*** (0,0101) |
Nivel de Personal Altamente Cualificado | 0,0001*** (0,0001) | 0,0001** (0,0002) | 0,0002*** (0,0001) |
Innovación Organizacional | 0,0756*** (0,0506) | 0,0264 (0,0649) | 0,0958*** (0,0587) |
Financiamiento Público | 0,1062*** (0.1236) | 0,0583 (0,1485) | 0,1098*** (0,1386) |
Alta Intensidad en Conocimiento | 0,0917*** (0,0568) | 0,1140*** (0,0712) | 0,6080*** (0,0643) |
Cooperación con Clientes y Proveedores | 0,1006*** (0,0574) | 0,0765*** (0,0079) | 0,0876*** (0,0642) |
Grupo Empresarial | 0,1084*** (0,0609) | 0,0844*** (0,0777) | 0,1160*** (0,0664) |
Ln Exportaciones Promedio | -0,0055*** (0,0053) | -0,0045 (0,0070) | -0,0041** (0,0085) |
Inversa de Mills | 0,0887*** (0,0594) | 0,0590*** (0,0773) | 0,1386*** (0,0811) |
Nro. de empresas innovadoras | 3 376 | 2 246 | 2 585 |
Innovación | |||
Ln (Ventas Promedio) | 0,0424*** (0,0585) | 0,0084 (0,0559) | 0,0460*** (0,0614) |
Ln (Ventas Promedio) ^2 | -0,0019*** (0,0021) | -0,0069 (0,0020) | -0,0016 (0,0022) |
Ln (I+D Interna Promedio) | 0,1463*** (0,0152) | 0,0590*** (0,0071) | 0,0631*** (0,0072) |
Nivel de Personal Altamente Cualificado | 0,0005*** (0,0002) | 0,0002*** (0,0017) | 0,0003*** (0,0002) |
Innovación Organizacional | 0,2245*** (0,0356) | 0,1380*** (0,0354) | 0,2008*** (0,0344) |
Financiamiento Público | 0,4920*** (0,2034) | 0,3500*** (0,1213) | 0,3658*** (0,1266) |
Alta Intensidad en Conocimiento | 0,0897*** (0,0395) | 0,1418*** (0,0389) | 0,0273** (0,0391) |
Alta Intensidad Tecnológica | 0,0750*** (0,0764) | 0,1263*** (0,0719) | 0,0620*** (0,0709) |
Patente | 0,2065*** (0.0613) | 0,1867*** (0,0569) | 0,1373*** (0,0558) |
Ln (Exportaciones Promedio) | 0.0017 (0,0038) | 0,0013 (0,0354) | 0,0012 (0,0037) |
|
0,2684 | 0,1977 | 0,4115 |
LR test6 ( |
chi2(1) = 18,72 Prob>chi2 = 0,0000 | chi2(1) =6,61 Prob>chi2 = 0,0102 | chi2(1) = 26.58 Prob>chi2 = 0,0000 |
Correcta clasificación | 68,25% | 76,27% | 69,86% |
N | 8025 | 8025 | 8025 |
Se añaden el error estándar y el efecto parcial, este último representa el cambio que experimenta la variable dependiente de cada ecuación por cada unidad adicional de esa variable independiente. Entre paréntesis se encuentra el error estándar correspondiente a cada variable. El nivel de significancia se visualiza de acuerdo al número de asteriscos (***=0%; **=5%; *=10%; sin asteriscos= no es significativo)
En el modelo general para productos y procesos, todas las variables resultaron ser significativas a un 95% de confianza, tanto en innovación como en adopción, a excepción de las exportaciones, los cuales no resultaron ser significativas en innovación. Como el coeficiente relacionado a la Ratio Inverso de Mills es significativo, se rechaza la hipótesis de la nulidad de la correlación entre los factores no observados de la propensión a innovar y de la propensión a adoptar. Así, se corrigió exitosamente el sesgo de selección a través de la metodología Heckman-Probit.
El tamaño de las empresas medido a través del volumen de ventas muestra tener una relación con la adopción de innovación en forma de U como se muestra en la Figura 1. El incremento por cada unidad adicional de este factor no es lineal, sino que depende de las ventas7. Las empresas pequeñas tienen menor propensión a adoptar innovaciones en principio hasta alcanzar un umbral de aproximadamente $1 468 en ventas anuales8, a partir del cual aumenta la propensión a adoptar innovaciones. Como el umbral estimado es relativamente bajo, se puede decir que la mayoría de empresas tienden a adoptar innovaciones. La alta capacidad de absorción de las empresas grandes les permite adoptar innovaciones (Autant-Bernard et al., 2010; Dougherty & Heller, 1994; M. Cohen & Levinthal, 1990). Este factor aparenta no tener efecto cuando se trata de adopción de innovación en procesos.
Respecto a la innovación se obtuvo una relación en forma de u invertida con el tamaño de la empresa como se muestra en la Figura 2. Conforme la empresa va creciendo, alcanza un umbral de tamaño de aproximadamente $61 960 026 en ventas anuales, posteriormente se ve consolidada dentro del mercado y su innovación es cada vez menor. Como el umbral es alto, se puede decir que la mayoría de empresas incrementan su nivel de innovación conforme crecen (M. Rogers, 2004; B. Tether, 1998). Dentro de la innovación en productos, esta variable no resultó relevante.
El nivel de gastos en I+D externo resultó tener un signo positivo con la adopción, es decir, que mientras una empresa incremente sus recursos destinados a I+D de origen externo también incrementará su propensión a adoptar una innovación, ya sea de productos o procesos, en concordancia con Kimberly y Evanisko (1981), Liu et al. (2013) y O. Hall (1967). Un incremento en 1% en los gastos de I+D externa incrementa la propensión de la empresa a adoptar una innovación en productos en 0,017% y en procesos en 0.019%. Los gastos en I+D interna resultaron tener un efecto positivo en la innovación, en concordancia con la teoría citada por Rosenberg (1984), Griliches (1979) y la evidencia empírica de Buesa et al. (2019). Un incremento en 1% en los gastos de I+D interna de la empresa incrementa la propensión de la empresa a innovar en productos en 0,059% y en procesos en 0,063%.
La pertenencia al sector de Alta Intensidad en Conocimiento muestra tener una relación positiva con la adopción. Aquellas empresas que pertenecen a este sector tienen mayor propensión de 9,17% a adoptar innovaciones en comparación a aquellas que no pertenecen a dicho sector9. Esto se debe a sus altos niveles de conocimiento técnico, científico y su alta capacidad de absorción de conocimiento , en concordancia con Rogers, (1962) y M. Cohen y Levinthal, (1990). Se puede apreciar a su vez que el efecto es mucho mayor en la propensión de adoptar innovaciones en procesos (60,8%) que en productos (11,40%), lo cual indica que el recurso intelectual de la empresa es mucho más efectivo en la absorción de conocimiento para la adopción de procesos que en productos (M. Cohen & Levinthal, 1990), que va directamente relacionado en mejoras en los procesos de la organización. La incidencia sobre la probabilidad de innovar de la pertenencia a un sector con alta intensidad de conocimiento es mayor para la innovación propia en productos (14%) que para la innovación propia en procesos (2,7%), en concordancia con Lamberton (1986), Hollander (2007), Freeman (1988), Metcalfe y Miles (2000) y M. Cohen y Levinthal (1990). Las empresas del sector de Alta Intensidad Tecnológica son más propensas a innovar en 7,61% en comparación a aquellas que no pertenecen a este sector. El efecto es superior para la propensión a innovar en productos (12,6%) que para la propensión en innovar en procesos (6,2%). Esto se explica porque la disposición de tecnologías se destina principalmente a la innovación en productos, de acuerdo con Savic et al., (2014), Z. Acs y Armington (2004), Hausmann (2003), Fagerberg (1988), Jaff (1986), Balcerowicz P. Keczkowski y W. Katek-Rubiak (2009).
El nivel de personal altamente cualificado también resultó tener un efecto positivo con la adopción de innovaciones. Las empresas ecuatorianas estarían absorbiendo el conocimiento externo e interno, que es posteriormente asimilado y utilizado para incorporar eficientemente las innovaciones adoptadas dentro de sus instalaciones (M. Cohen & Levinthal, 1990; Nelson & Phelps, 1965). Por cada unidad adicional en el personal altamente cualificado de la empresa, la propensión a adoptar innovaciones en producto incrementa en un 0.01% y en proceso en un 0.02%. En lo que corresponde a innovación, el hecho de poseer un mayor personal con un alto nivel de preparación académico también hace que las firmas tengan mayores oportunidades de innovar. El incremento que percibe la innovación por cada unidad adicional en este factor es de 0,05%. El recurso intelectual de las empresas resulta beneficioso para el comportamiento innovador de las empresas en concordancia con Lundvall (2019) y Bordogna, Fromm y Ernst (1993) y E. Porter y Stern (2000).
Haber logrado una innovación organizacional tuvo una relación positiva con la adopción de innovaciones. Este resultado implicaría que las mejoras en la estructura organizacional influyen en los procesos de comunicación interna de la empresa, que, consecuentemente, incrementan su capacidad de absorción de conocimiento, lo cual surte efecto en incrementar su propensión a adoptar innovaciones, estos resultados concuerdan con las teorías de Autant-Bernard et al. (2010), Rogers (1962), Lane y Lubatkin (1998) y Lenox y King (2004). En término de efectos marginales, si una empresa innovadora incorpora una innovación organizacional la probabilidad de que adopte una innovación incrementa en un 7,56%. No obstante, este aspecto no fue relevante para explicar la adopción de innovación en productos.
Respecto a la innovación también se obtuvo un efecto positivo, las empresas que hayan logrado incorporar alguna innovación organizacional en sus instalaciones tendrían una mayor capacidad de innovar en productos y/o procesos, acorde con lo mencionado por Drucker (1985), Hagedoorn (2002), Schumpeter (1934), Lugones et al. (2019), Damanpour y Gopalakrishnan (2001) y Naranjo-Valencia et al. (2012). Específicamente su probabilidad de innovar incrementa en un 22,45%.
El financiamiento público resultó tener un signo positivo con la innovación, es decir que los instrumentos utilizados por el gobierno (subsidios, exoneraciones, créditos, etc.) cumplen su objetivo de promover la innovación, que también vuelve a las empresas más susceptibles de adoptar dicha innovación. El hecho de que una empresa innovadora reciba financiamiento público hace que esta incremente su propensión a adoptar esa innovación en un 10.62%. Particularmente se obtuvo el mismo resultado que el estudio empírico de Autant-Bernard et al. (2010). Este aspecto no resulta relevante para explicar la adopción de innovación en productos. En cuanto a la innovación, el incremento adicional por tener financiamiento público es de 49,20%.
El hecho de pertenecer a un grupo empresarial incrementa la propensión a adoptar una innovación en un 10,84%. Esto se debe a la ventaja de poder acceder a las nuevas tecnologías de las otras empresas que pertenecen al grupo, el mercado financiero interno, la actitud colaborativa, y el intercambio de aprendizaje que promueve la difusión de innovaciones, en concordancia con Belenzon y Berkovitz, (2007), M. Cohen y Levinthal, (1990) y Autant-Bernard et al. (2010). Adicionalmente, el efecto es significativamente mayor en procesos que en productos, ya que la pertenencia a un grupo empresarial está asociado a los cambios en la estructura organizacional de la empresa, que deriva en cambios y mejoras en los procesos (Autant-Bernard et al., 2010).
Las actividades de cooperación con clientes y proveedores tuvieron en efecto positivo con la adopción de innovaciones. Aquellas empresas que realizan estas actividades de cooperación incrementarían su propensión a adoptar innovaciones en un 10,06%. Este factor funciona como una fuente de conocimiento que forman canales de intercambio y comunicación entre empresas que propagan la existencia de una innovación, dando lugar al proceso de difusión de innovaciones, lo que permite a las empresas reconocer e incorporar innovaciones según las teorías citadas por Rogers (1962), Autant-Bernard et al. (2010), Rosenberg (1972) y Lucas (1989).
Las empresas que participan en los mercados internacionales a través de la exportación no ven incrementada su innovación, ya sea por adopción o por desarrollo propio, lo que implicaría que el intercambio de recursos tangibles e intangibles que se producen en el comercio exterior a través de canales de difusión citados por Rogers (1962), Coe et.al. (2009), Fagerberg y Verspagen (2002) y Keller (1997) y la presión sobre la competitividad de las empresas enunciado por Autant-Bernard et al. (2010), Kaldor, Sharp y Walker (1986) y Kellman (1983) no surten efecto.
Las patentes resultaron tener un efecto positivo en la innovación, es decir, que los beneficios como el monopolio temporal, la protección contra imitadores y el cobro por licencias son aprovechados por las firmas ecuatorianas para impulsar la innovación, dichos resultados concuerdan con Arrow (1962), K. Whitaker y D. Nordhaus (1970), Gedik (2012), Merges y R. Nelson, (1990), Rai y Jagannathan, (2012). Aquellas empresas que emprenden la búsqueda de patentes incrementan su propensión a innovar en un 20,65%.
5. CONCLUSIONES Y RECOMENDIACIONES
A través de un análisis descriptivo, se pudo verificar que Ecuador no ha tenido un posicionamiento favorable en comparación al resto del mundo en temas de innovación. Esto puede deberse al bajo nivel de innovación de las empresas ecuatorianas que mayoritariamente realizan innovaciones de mejora significativa o no innovaciones nuevas. Otro aspecto importante del comportamiento innovador de las empresas es que una gran parte de ellas adoptan innovación. Con el objetivo de identificar los factores que incentivan la adopción, se empleó un modelo Probit. Los resultados mostraron que los grupos empresariales, la innovación organizacional y la cooperación con clientes o proveedores promueven la creación de canales de intercambio de recursos tangibles e intangibles que propagan las innovaciones y facilitan la adopción de las mismas. El personal altamente cualificado puede también promover la adopción de innovaciones. En un entorno de industrias con requerimientos científicos altos, las empresas tienen una alta probabilidad de adoptar innovación. Las empresas ecuatorianas parten siendo bastante innovadoras hasta alcanzar un umbral en ventas de $61 960 026 anuales, momento desde el cual se ve consolidado en el mercado y empiezan a innovar cada vez menos. En cuanto a la adopción, las empresas comienzan a hacerlo a partir de un bajo umbral de solo $1 468 en ventas anuales. Los recursos que las empresas ecuatorianas destinen a la Investigación y Desarrollo de origen externo harían que se vuelvan más susceptible en adoptar innovaciones. La propensión a generar innovaciones propias incrementaría con la inversión en recursos de I+D interna. La presión de la competitividad internacional y el intercambio de tecnologías y conocimientos que se producen con las exportaciones no influyen en el comportamiento innovador de las empresas ecuatorianas. El apoyo gubernamental promueve la innovación y la adopción de innovaciones como resultado de los instrumentos financieros otorgados por entidades públicas.
Las patentes tienen la capacidad de promover la innovación en lugar de desincentivarla, este efecto puede deberse a sus beneficios asociados como el monopolio temporal, protección contra imitadores y costo de las licencias de uso. Las industrias que requieren un uso intensivo de tecnología en sus instalaciones tienen una mayor propensión a innovar, tanto en productos como en proceso.
Recomendaciones
En función al objetivo y resultados de esta investigación, se proponen recomendaciones dirigidas a sectores influyentes en tecnología y desarrollo de innovaciones, tanto públicos como privados. Para aumentar la propensión de las empresas a innovar y adoptar innovación, se debe incentivar la formación del capital humano. Para ello, se debe impulsar el acceso de la población a la educación superior de calidad. Así, los trabajadores capacitados aumentarán la capacidad de absorción y generación de conocimiento de las empresas para adoptar innovaciones o innovar con mayor facilidad. Otro factor clave a impulsar es la inversión de investigación y desarrollo tanto interna como externa. En este aspecto, el contexto actual indica que las empresas tienen poco interés en este tipo de inversión. Solo un 22.7% invierte en I+D en los años 2011 y 2014. Para mejorar este indicador, se necesita impulsar la cooperación con las universidades. En vista de que las actividades colaborativas como las agrupaciones empresariales y la cooperación con clientes y proveedores tienen una influencia positiva en la adopción de innovación, es necesario aprovechar al máximo los canales de comunicación e intercambio por los cuales se transfiere la existencia de una innovación. De esta manera, las empresas ecuatorianas podrían incorporarlas eficientemente dentro de sus firmas y obtener beneficios. Dado que la proporción de empresas innovadoras decrece, es recomendable para los entes influyentes en los sectores productivos desarrollar programas y nuevos incentivos que motiven a las empresas a innovar.
Esta investigación sugiere algunas pistas de investigación futura. Una de ellas es la consideración de la intensidad de adopción de innovación para conocer en qué medida las empresas adoptan innovación y si esta es mayor que la innovación propia. Otra línea de investigación es discernir sobre la importancia relativa de los efectos de la adopción de la innovación respecto a los de la innovación propia, analizando variables de rendimiento.