Sra. Editora:
La mucormicosis es una infección fúngica y oportunista, causada por hongos del género mucorales. Estos ingresan por inhalación en forma de esporas(1); sus hifas invaden los vasos sanguíneos provocando trombosis, isquemia y necrosis de los tejidos afectados(2). Frecuentemente, compromete la nariz y los senos paranasales principalmente en inmunosuprimidos y diabéticos, pudiendo extenderse a la órbita, cerebro y fosa infratemporal; con inusual compromiso del nervio facial(1).
Se ha reportado la presencia de parálisis facial en pacientes con mucormicosis post-COVID-19. Su prevalencia es variable, reportándose valores de 3.8%(1), 5%(3), 10%(4) y 8.7%(2) (Tabla 1). Actualmente, no se conoce el mecanismo que origine la parálisis facial, lo que nos obliga a proponer posibles alternativas del origen de esta inusual complicación.
Autor | Tipo de estudio | Población | Parálisis facial | Comorbilidades |
Jaiswal et al(1). | Revisión retrospectiva | 103 pacientes | 4 pacientes | Diabetes mellitus, enfermedad renal crónica, hipertensión, enfermedad arterial coronaria |
Mehta et al(2). | Series de casos | 196 pacientes | 17 pacientes | Diabetes e hipertensión. |
Gautam et al(4). | Cohorte prospectiva | 300 pacientes | 30 pacientes | Hiperglucemia |
Arora et al(3). | Transversal | 60 pacientes | 3 pacientes | Diabetes, hipertensión |
La ruta de diseminación más probable inicia con el compromiso fúngico de la cavidad nasal, posteriormente, invade la fosa pterigopalatina, fosa infratemporal y se disemina a través de la fisura pterigomaxilar comprometiendo el músculo pterigoideo lateral. El compromiso lateral de éste, daría lugar a la inflamación del lóbulo profundo de la parótida y del nervio facial en su salida por el agujero estilomastoideo(1). Otro de los posibles mecanismos sería el compromiso del nervio facial en su porción timpánica, cuando hay compromiso del oído medio, a través de la trompa de Eustaquio(5).
Finalmente, podemos postular que la parálisis del nervio facial debida a mucormicosis podría originarse por contigüidad de la infección iniciada en la cavidad nasal. Esta afección debería ser considerada como una complicación inusual en pacientes con mucormicosis post COVID-19 por neurólogos y especialidades relacionadas, para su diagnóstico y tratamiento precoz.