Introducción
La temperatura debe ser considerada como una constante fisiológica vital, todo el personal que esté implicado en el cuidado del paciente debe conocer y concientizar la importancia de mantener la temperatura del paciente en índices normales, lamentablemente, en la Medicina Veterinaria de pequeños animales, muchas veces es infravalorada en el cuidado perioperatorio o anestésico. La falta de monitorización de esta constante en medicina veterinaria favorece a la no detección de episodios de hipotermia o hipertermia (Fernández & Álvarez, 2012). Además en el estudio realizado por Vietiez (2011) se determinó que en aproximadamente el 41,7% de pacientes sometidos a anestesia pueden llegar a tener hipotermia, generando complicaciones anestésicas.
En los pacientes caninos sanos categorizados como ASA I, que son sometidos a profilaxis dental de rutina, se debe tomaren cuenta que la hipotermia conlleva a un enlentecimiento metabólico sucesivo, además de la reducción de la oxigenación tisular: demorando la recuperación de anestesia del paciente y aumentando la tasa de morbilidad e incluso en casos de hipotermia severa podría dar como consecuencia la muerte del paciente (Alvarez, et al., 2001).
El objetivo del presente estudio fue proponer y evaluar un protocolo de prevención de la hipotermia para los pacientes caninos sanos que son sometidos a profilaxis dentales de rutina.
Materiales y Métodos
Lugar de Estudio. - El ensayo clínico se realizó en la clínica veterinaria de la Universidad de las Américas Quito-Ecuador.
Tipo de Estudio. - Es un estudio controlado de tipo cruzado, por intención de tratamiento.
Población Objetivo. - Se reclutaron 10 pacientes caninos, los cuales tuvieron que ser sometidos a un examen físico riguroso, además de exámenes de laboratorio para evaluar el estado general de los pacientes.
Criterios de selección. - Siendo los siguientes:
Criterios de Inclusión
Pacientes machos
Pacientes hembras esterilizadas
Peso mayor a 5 Kg
Peso menor a 15 kg
Pacientes mayores de 3 años
Pacientes menores de 7 años
ASA I
Criterios de exclusión
Pacientes hembras enteras
Pacientes menores a 5kg
Pacientes mayores a 15kg
Pacientes menores a 3 años
Pacientes mayores a 7 años
ASA II - III - IV - V
Diseño de estudio. - Los pacientes en la primera intervención se constituyen como el grupo control; los mismos que fueron sometidos a la primera profilaxis dental durante 35 minutos sin brindarles un tratamiento normotérmico; solamente se utilizó una manta para aislar al paciente de la mesa y un plástico que cubra el dorso y extremidades del paciente para evitar que el individuo se moje excesivamente.
Al ser sometidos a la segunda profilaxis dental, se les aplicó el siguiente protocolo normotérmico: Se ubicó al paciente en jaula, se precalentó manteniendo la temperatura ambiental de la zona en 28°C por 30 minutos con la ayuda de un calefactor, monitorizando la temperatura con la ayuda de un termómetro ambiental (Stepaniuk & Brock, 2008). Los primeros 15 minutos se los mantuvo con una vía intravenosa permeable, posteriormente se premedicó a los pacientes y se mantuvo 15 minutos más en el precalentamiento hasta cumplir la media hora. Al culminar el precalentamiento, y con el paciente sedado, se lo cubrió con una manta reflectora (Survival Blanket®) trasladándolo a la mesa de manejo donde previamente se colocó una manta para tener más aislamiento (Potter, et al., 2015) y se procedió con la inducción; con anterioridad se preparó la mesa de manejo colocando una lámpara de luz infrarroja de 250W a una altura de 70cm (Rigotti, 2008). De tal manera que cuando el paciente se encuentre en la mesa de manejo estuviese bajo el dispositivo de calor radiante y cubierto con la manta reflectante.
Procedimientos y recolección de información. - Los pacientes tienen una primera valoración clínica para verificar su estado de salud, donde se toma la temperatura rectal por primera vez; se los envía a jaula con precalentamiento. Antes de administrar la premedicación, se toma la segunda temperatura rectal, desde ese momento se tomará la temperatura cada 5min. El momento que culminó el procedimiento de profilaxis dental se desconectó el sevoflurano, en este momento se toma el último dato de temperatura rectal que se la tomó con un mismo termómetro a una distancia de 4cm en el recto cada 5 minutos, medida en grados centígrados.
Procesamiento y análisis de datos. - Se realizó la prueba de t-student para la comprobación de la hipótesis del ensayo clínico controlado de tipo cruzado. La variable dependiente de tipo cuantitativa continua de este estudio es la temperatura rectal de los pacientes.
Consideraciones éticas. - Al tratarse de un ensayo de farmacología clínica, los individuos reclutados son pacientes con mínimo riesgo anestésico, clasificados como ASA I, los cuales ya tenían programada una profilaxis dental de rutina como parte de su calendario sanitario.
Cada paciente ingresado en el estudio debe tener un consentimiento informado firmado y aceptado por el propietario.
Resultados
En el presente ensayo clínico de acuerdo a los criterios de inclusión se reclutó un número de 10 pacientes clínicamente sanos siendo 5 machos (50%) y 5 hembras esterilizada (50%), los cuales recibieron dos procedimientos de profilaxis dental con una duración de 60 minutos desde la premedicación hasta la finalización; se tomó un número total de 14 datos de temperaturas. La profilaxis dental como tal, tuvo una duración de 35minutos y se mantuvo con el mismo protocolo anestésico en ambos casos (Tabla 1), siendo la única diferencia la aplicación del protocolo normotérmico durante la segunda intervención.
Se realizó la comparación entre grupos y se reflejó que hay diferencias significativas en las temperaturas 0, 3, 4, 7, 8, 9, 10, 11, 12 y 13 ya que los valores p obtenidos fueron menor al p valor =0.05 (ver tabla 2)
Se hizo una comparación entre el promedio de temperatura en ambos grupos y se demostró que hay diferencia significativa entre grupos debido a que el valor p obtenido fue (3.06485E-05) el cual es menor al nivel de confianza a la prueba T (α=0.05) (ver tabla 3) y (Figura 1).
Discusión
La hipotermia inadvertida intraoperatoria es muy recurrente en medicina veterinaria ya que no se utiliza ningún tipo de protocolo normotérmico durante todo el tiempo anestésico o, es muy limitado el uso de recursos o métodos para minimizar esta complicación.
En el presente ensayo clínico se observó que dentro del grupo control sin protocolo normotérmico, 5 pacientes (50,0%) tuvieron temperaturas ≤ 36,1°C llegando a tener hipotermia moderada y 5 pacientes (50,0%) marcaron temperaturas ≥ 37°C considerada hipotermia leve, lo cual está de acuerdo a lo manifestado por Redondo et al (2012), que en su estudio demuestran que el 32% de pacientes quirúrgicos caninos llegan a tener hipotermia con temperaturas ≤ 36,4°C; esto puede ocurrir ya que los médicos veterinarios subestiman la temperatura corporal del paciente.
Comparando a los dos grupos se encuentran diferencias significativas de temperatura al final de la premedicación (p valor= 0.039), y al inicio de la inducción (p valor = 0.041); esto refleja que el precalentamiento ayuda a minimizar la pérdida de temperatura de los pacientes.
No obstante, es importante utilizar otros métodos sean estos pasivos o activos para que el paciente no pierda temperatura de una manera considerable durante todo el perioperatorio, ya que no se ve una diferencia significativa de temperatura durante el final de la inducción y el tiempo de entubación endotraqueal, (p valores= 0.095 y 0.12 respectivamente); esto coincide con el estudio de Riggoti, Jolliffe y Leece (2015) que ve pertinente la utilización de otros métodos pasivos o activos que complementen el precalentamiento. Este cambio de temperaturas a la que se expuso a los pacientes sumado la manipulación y el manejo que se realizó para colocar el tubo endotraqueal pudo haber generado que no existiese diferencia significativa.
Durante el mantenimiento de la anestesia se vuelven a observar diferencias significativas de temperatura en todas las mediciones de ambos grupos, esto se atribuye al uso de la manta reflectante (Survival Blanket) sumado al foco infrarrojo de 250W (luz radiante); todo esto se corrobora con el estudio de Tan et al (2004), en donde se observó que cuando se utilizan varios métodos en conjunto se obtienen temperaturas más altas en los pacientes, situación que no pasa cuando se utiliza un solo método. También se encuentran similitudes con el ensayo clínico controlado aleatorizado dirigido por Tünsmeyer et al. (2009), realizado en 40 pacientes caninos sometidos a cirugías electivas de duración mínima de treinta minutos, en el que se aplica una manta reflectante junto almohadillas de gel calientes, observándose una disminución en la pérdida de la temperatura con una diferencia significativa respecto al grupo control (p=0,012).
Conclusiones
Al comparar los dos grupos, se obtuvo diferencias estadísticamente significativas en las mediciones 3, 4, 7, 8,9, 10, 11, 12, y 13; las mismas que corresponden a las etapas de premedicación, inicio de la inducción, y mantenimiento de la anestesia.
Por esto se concluye que, la aplicación del presente protocolo de prevención de la hipotermia logra mantener temperaturas superiores en el paciente en la mayoría de mediciones del tiempo anestésico, es recalcable que, durante el mantenimiento, todas las mediciones del grupo al que se aplicó el protocolo son superiores al grupo control.
Esto es importante ya que, instaurando estas acciones fáciles y de bajo costo, se puede prevenir la hipotermia durante anestesia general y de esta manera lograr una mejor recuperación en los pacientes caninos.
Comparación de las temperaturas de los pacientes durante cada fase del tiempo anestésico utilizando la prueba estadística (T- Test para muestras emparejadas)
Comparación de los promedios de ambos grupos utilizando la prueba estadística (T- Test para muestras emparejadas)