Introducción
El Museo de Arte Precolombino Casa del Alabado custodia una colección de aproximadamente 5000 artefactos arqueológicos, pertenecientes a 21 culturas precolombinas que habitaron el territorio del Ecuador actual. Las piezas presentes en el museo cubren todos los períodos cronológicos (Precerámico, Formativo, Desarrollo Regional, Integración e Inca) y provienen de las tres regiones continentales del País (Costa, Sierra, y Amazonía). La colección del museo está en procesos permanentes de estudio y valoración, con el fin de aproximarse a las piezas a través de las artistas arqueológica, histórico-artística, del arte contemporáneo, entre otras.
En este marco, la exhibición SELLOS: La Potencia del Icono, es la propuesta del equipo de investigación y educación del museo para poner en valor estos objetos. El museo custodia un total de 435 sellos pertenecientes a las culturas Jama Coaque (350 a.C. - 1532 d.C), La Tolita (600 a.C.- 300 d.C.), Manteño Huancavilca (600 - 1532 d.C.), Guangala (500 a.C-800 d.C) y Napo (1200 - 1532 d.C.) y representan el 8,7% de la colección. La tipología de objetos antes mencionada se divide en tres categorías: cilíndricos (figura 1.), planos (figura 2.) e impresiones o estampados de cerámica.
En el pasado otras exhibiciones abordaron el tema de los sellos desde la perspectiva iconográfica como la del Museo Weilbauer −Quito en 2020 (en formato digital) −, el Museo Antropológico y de Arte Contemporáneo −Guayaquil en 1996− y la del Banco del Pacifico −Guayaquil, 1984. Aunque con limitada información arqueológica disponible, estas aportaron sobre todo en resaltar la riqueza visual de estos artefactos. La exhibición SELLOS: La potencia del ícono, se nutre de estas pasadas experiencias, complementa el acercamiento iconográfico, amplía la relación de los sellos con objetos en otros formatos, integra información arqueológica actualizada, e implementa tecnologías contemporáneas.
Con la finalidad de acercar a los públicos a estos objetos a través de su materialidad, estética, iconografía y posibles usos; la investigación y exhibición exploran los sellos a partir de las interrogantes ¿para qué servían?, ¿qué superficies fueron marcadas? y ¿qué connotaciones tenía su iconografía? En las siguientes páginas se analizarán los procesos investigativos, curatoriales y educativos alrededor de la exhibición y la relación de estos objetos con la experiencia contemporánea.
Investigación
El área de investigación del museo desarrolla actualmente un proyecto de estudio en torno a los sellos de la colección. Este apunta a entender mejor los objetos en cuanto a su uso, representatividad y transmisión de mensaje. Los procesos de investigación, aún en curso e incluyen, consulta de bibliografía disponible, documentación digitalizada para análisis iconográfico, análisis microscópicos y ejercicios de arqueología experimental.
En su fase inicial, se basó en la revisión de la bibliografía existente sobre las investigaciones realizadas en torno a estos objetos (Broghini y Di Salvo, 2011; Cummins et al., 1996; Di Capua, 1985; Estrada, 1959). Se revisó bibliografía sobre los estudios llevados a cabo en los sitios de La Tolita (Leiva y Montaño, 1994; Ugalde, 2009) y los del proyecto La Cadena - La Maná (Guillaume Gentil, 2013), los cuales reportan hallazgos de sellos en contextos arqueológicos. Posteriormente se consultaron los estudios iconográficos disponibles para las culturas La Tolita (Ugalde 2009) y Jama Coaque (Gutierrez Usillos 2011).
Para entender mejor el posible uso de estos artefactos se consultaron trabajos etnográficos (Alsina Franch, 1958; Clerc de Cuenca, 1990) y crónicas del siglo XVI como la de Lucas Fernandez de Piedrahita para Colombia (citado en Clerc de Cuenca, 1990), Diego de Landa para México (citado en Cummins, et al. 1996; Alsina Franch, 1958), entre otras.
En cuanto a la función de los sellos, los arqueólogos, historiadores, e historiadores del arte proponen que estos sirvieron, verosimilmente, para marcar textiles (Jaramillo y Contreras, 2017; Guillame - Gentil, 2013, pp. 322 - 323; Broghini y Di Salvo, 2011, pp.16-20;Cummins et al., 1996, p.26; Cummins 1994, p. 162; Leiva y Montaño 1994, pp. 95-97; Clerc de Cuenca, 1990) o decorarse el cuerpo (Broghini y Di Salvo, 2011, pp.16-20; Cummins et al., 1996, pp. 32-34; Cummins 1994, p. 162; Clerc de Cuenca, 1990, p. 30; Alsina Franch, 1958, p. 46). Las referencias en contextos de hallazgo arqueológico son escasas, y la información disponible no permite definir claramente su uso, pero nos da ciertas nociones al respecto: la presencia de estos objetos en contextos funerarios como parte de los ajuares sugieren que los sellos fueron objetos de prestigio (Leiva y Montaño, 1994, p. 47; Estrada, 1959, p.10; Ugalde, 2009, pp. 17-27).
Otro aspecto que es importante resaltar es la riqueza iconográfica plasmada en su superficie. Con la finalidad de poder clasificar en un futuro los motivos excisos en los sellos se documentaron los patrones con la ayuda de la fotografía y el dibujo digitalizado. Además, se desarrolló una metodología ad-hoc para plasmar los motivos de los sellos cilíndricos en plano, sin afectarlos o contaminarlos a través del escaneo y digitalización por medio del uso de software y tabletas gráficas (figuras 3 y 4).
Los motivos presentes en los sellos se incorporaron en la museografía a través de la proyección en sala, para mostrar su documentación y permitir la contemplación de los patrones extendidos. La investigación de estos artefactos sigue vigente. Para fases posteriores, se añadirán el estudio de vestigios de pigmentos y diversos materiales por medio del análisis microscópico.
Concepto Curatorial
La fuerza de los sellos radica en su capacidad comunicacional, que va más allá del objeto material. Cómo creadores de imágenes y transmisores de significados sociales, los sellos, nos conectan con el pasado, y nos generan reflexiones en el presente. La exhibición despliega en tres ejes la riqueza visual de los sellos, explora su vida social, y resalta sus correspondencias iconográficas con otros objetos de la cultura material.
La profunda atracción que los sellos despiertan en los públicos por su impactante estética, materialidad y simbología, identificadas a través de la mediación educativa, dio origen al primer eje de la exhibición que son los íconos (figura.5).
De la curiosidad e interés que estos artefactos suscitan en los públicos, nacen aquellas tres preguntas que dieron paso al proceso investigativo y que inspiraron el segundo eje que trata sobre la vida social de los sellos (figura.6). El tercer eje, llamado Constelaciones, se pensó desde las herramientas de mediación que se practicaron en salas a lo largo de la vida del museo, desde el juego de buscar correspondencias y similitudes iconográficas entre distintos tipos de objetos (figura 6).
A continuación, revisaremos a profundidad el concepto que contiene cada eje curatorial.
Íconos
Se presenta como un espacio de impacto en el que se muestra una selección de sellos notables por sus cualidades estéticas y el despliegue de patrones y diseños extendidos. Este eje amplía la concepción visual del sello al mostrar toda su capacidad iconográfica, simbólica y comunicativa. La selección incluye planchas de cerámica que parecen haber sido marcadas a las cuales llamamos estampados. Éstos, nos hacen pensar en la diferencia entre objetos marcadores y objetos marcados, y suman nuevas posibilidades estéticas a las que se ven frecuentemente en torno a los sellos (figuras 7, 8 y 9).
La vida social de los sellos
Expresa la agencia de dichos objetos y los vínculos que, a partir de ellos, se generaron entre las personas y comunidades. Explora los sentidos de uso que tuvieron en el pasado, las posibles superficies en las que se utilizaron y la relación entre sus creadores con el entorno. El eje se construye con cuatro subsecciones: Corporalidad, Textiles, Laberintos y Animales que, desde su particularidad, se alinean en la misión de mostrar la importancia de los sellos a nivel social.
En la sección Corporalidad, se piensa la relación sello-cuerpo a través del marcado corporal o de la ornamentación. Personajes femeninos de culturas como Jama Coaque (350 a.C. -1532 d.C.) y La Tolita (650 a.c.-300 d.C.) lucen sellos a manera de colgantes sobre el cuello. Esta diversidad de usos trasciende al concepto del sello como ornamento y abre otro tipo de aproximaciones al liderazgo femenino (figura.10), a los roles de género en contextos rituales y cotidianos, así como a las jerarquías sociales y espirituales del pasado (Gutierrez-Usillos, 2011, p. 232).
En la sección Textiles, se explora dicho material como un posible soporte de marcado para los sellos. Esta relación se analiza a partir de crónicas del siglo XVI y hallazgos en sitios arqueológicos de Ecuador y Colombia, en los que se encuentran sellos cilíndricos junto a torteros utilizados para el hilado. Si bien ésta continúa siendo una hipótesis, en la iconografía de culturas como Manteño Huancavilca (600 - 1532 d.C.), es posible observar en ambos tipos de objetos la reiteración de determinados símbolos, patrones y texturas que evocan las fibras entrelazadas de los tejidos (figura11).
En la sección Laberintos se exploran los posibles procesos culturales en torno a la muerte a través de esta simbología compartida entre sellos y urnas funerarias de la cultura Napo (figura 12). Contar con ellos en la muestra y reconocer su uso es una novedad en el análisis de este tipo de objetos cuyos estudios son incipientes.
En la sección Animales se muestra la representación de fauna marina, terrestre y aérea en sellos de las culturas Jama Coaque (350 a.C. - 1532 d.C.) y Manteño Huancavilca (600 - 1532 d.C.). Se resalta la importancia de los animales como componentes de mitos fundacionales y como seres tutelares, que se constituyen como elementos identitarios de carácter heráldico (Gutiérrez Usillos, 2011, p.232; Ugalde, 2009, pp.159-178). Serpientes, zarigüeyas, ranas, monos entre otros animales nos aproximan también a la riqueza de la fauna presente en los territorios correspondientes (figura.13).
Constelaciones es un eje que manifiesta el dinamismo de la iconografía presente en los sellos, y cómo los elementos que la constituyen formaron parte de un lenguaje simbólico de entendimiento comunitario para las sociedades del pasado. Con la ayuda de la museografía, en esta sección se juega a encontrar las correspondencias simbólicas entre sellos, estatuillas, cuencos y vasijas (figura14). El concepto de constelar se alinea al ejercicio de recirculación de símbolos y de tráfico y transmisión de imágenes.
Finalmente, la exhibición se complementa con la obra de Pablo Scaira, quién realizó una interpretación de los sellos desde la perspectiva contemporánea con el film “Huellas, el viaje de la mujer pájaro”, el cual abordaremos más adelante.
Nexos con la producción contemporánea
El trabajo experimental actual con objetos arqueológicos es delicado. Al ser artefactos de gran perdurabilidad, pero alta fragilidad, hay procesos de investigación/exploración artística a los que no pueden ser sometidos. Como aporte al diseño y demás campos creativos contemporáneos, se realizó un rastreo de las imágenes extendidas y continuas de los ejemplares cilíndricos (figura15). Esta producción digital es un recurso significativo en el que las tecnologías revelan por primera vez, decenas de vectores y composiciones en positivo y negativo de múltiples sellos precolombinos; que antes de la exhibición, se ocultaban en la reserva.
Al ver los patrones extendidos de los sellos, el querer marcar con ellos distintas superficies es un impulso que se genera de manera casi inmediata y que responde a su función innata. Este impulso fue motivación suficiente para replicarlos. Las tecnologías de escaneo e impresión 3D nos permitieron obtener réplicas fieles de los sellos en resina de petróleo, que fueron utilizadas en varios procesos experimentales y que responden a una necesidad de vincularnos con los objetos, desde distintas acciones contemporáneas.
Si bien la investigación fue uno de los motivos principales para marcar sobre varias superficies y evaluar la respuesta de los materiales ante el toque de los sellos; la reproducción de estas piezas hechas en un material del mundo contemporáneo por excelencia abrió la puerta a otras producciones, como talleres de marcado con fines educativos y el film “Huellas, el viaje de la mujer pájaro”.
En el ejercicio de acercarnos a objetos de otro tiempo es fundamental recordar que lo hacemos desde el presente, para no caer en el absurdo de intentar descifrarlos por completo, y para que lo incierto que contienen pueda crear reflexiones sobre nuestras propias realidades. Pablo Secaira, realizador, director y productor de cine independiente empezó su proceso creativo de “Huellas, el viaje de la mujer pájaro”, dentro de la reserva del museo en contacto con las piezas (figura 16 y 17). Los personajes representados en figurinas antropomorfas de arcilla, que portan sellos cilíndricos en los cuellos, cautivaron su atención porque representaban “gente como nosotros” (P. Secaira, comunicación personal, 1 de noviembre del 2020). Particularmente, su ojo se fijó en “La mujer pájaro”, una figura alada que lleva la estilización de un sello como colgante y pertenece a la cultura Jama Coaque (350 a.C. - 1532 d.C.).
En el viaje, el artista incluye planos que producen la sensación de sentirse dentro o muy cerca del sello y responden a la demanda del acercamiento que, como espectadores, queremos entablar con los objetos. El sonido precolombino, en sincronía con el producido por tecnologías contemporáneas, a cargo de Nicolás Fernández, se constituye como otro puente entre presente y pasado.
El proceso colaborativo entre el equipo de producción y los curadores de la exhibición fue enriquecedor. Se realizó el ejercicio de transmitir la imagen de las reproducciones de sellos, tanto a superficies que se utilizaron en tiempos precolombinos tales como la arcilla, la tela de algodón y la piel, como a superficies del presente, por ejemplo, la plastilina. En este sentido, el film es también una pieza documental que captó aquellos momentos de volver a poner en uso el sello, y darle un nuevo sentido al marcar íconos del pasado y sus enigmáticos mensajes, cientos de años más tarde.
La curaduría, museografía y relación con los públicos que frecuentan la exhibición temporal enriquecen el proceso investigativo alrededor de los sellos precolombinos. Los conocimientos en torno a estos objetos se actualizan constantemente, por medio de nuevos estudios y de la bibliografía arqueológica disponible. Nuevas hipótesis se generan en torno al uso, sentido y materialidad de los sellos. Las herramientas de mediación resuenan en toda la colección del museo. Uno de los ejercicios más interesantes es aquel de conectar simbólicamente la iconografía del eje Constelaciones, con piezas que no forman parte de la exhibición de SELLOS y que siguen conservando sus lugares originales dentro del recorrido permanente. Las digitalizaciones de los patrones de los sellos, la documentación e impresión 3D, y la aproximación a través del film, refrescan la visión clásica de estos artefactos. La exhibición genera una atmósfera de experimentación que permite a los públicos, investigadores y artistas, volver a usar los sellos y mirarlos con ojos de hoy.